Capítulo 14. Un día malo

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Despierto escuchando en la madrugada una botella romperse, después unos pasos hasta la habitación de mi padre y su puerta cerrándose con fuerza.

Miro el reloj y son las 6 a.m., trato de volver a dormir, pero la verdad es que ya es imposible. Tomo de debajo de mi almohada una barra de chocolate y comienzo a saborearla mientras escucho algo de música. Siento el palpitar asustado en mi pecho y de repente la letra de la canción encaja a la perfección con Holly. Con mis sentimientos por ella.

Suspiro alegremente pensando en que cada día puedo comprobar cuán enamorado estoy de ella. Todo comenzó con un simple "Hola" donde sin ningún compromiso se acercó a nosotros y ahora formaba parte de todo. Los chicos y yo habíamos hablado anteriormente sobre lo que era bueno o no para ella al estar con nosotros, por temor a ser obstáculo para su vida.

Sabíamos muy bien que la perjudicaría el vernos, el que todos nos vieran a su lado. Ella era un ángel precioso. Un regalo de Dios. Pero no quería ser egoísta y tenerla para salvarme de mis propios demonios, debía dejarla salvarse y volar hasta las nubes e iluminar el cielo. Cuando hablé con ellos y les dije que lo mejor era alejarnos, nunca imaginé que me costaría más trabajo a mí que a ella todo eso. Era insoportable imaginarla a mi lado y no poder escuchar su voz, no ver sus hermosos ojos. O su olor tan natural y dulce, tanto como ella.

Pero necesitaba tomar una decisión ahora. Antes me parecía la mejor opción el irme y dejarlo todo. Para mí ya estaba planteado el día de mi muerte el cual era el día de mañana. Pero justo ahora que apenas empieza el día, tengo una extraña emoción en mi interior. Quiero luchar por ella, quiero que ella sea feliz y me encantaría ser yo quien la hiciera sonreír.

Ella me hace ser mejor hombre y deseo ser lo mejor para mi linda Holly hasta el último suspiro. Adrien podrá ser mejor que yo en todo lo demás, pero no en amarla. Yo estaba dispuesto a seguir viviendo este infierno con tal de seguir en el mismo mundo que ella, recibiría un sinfín de balas por protegerla, no temería cuando se refiriese a mantenerla a salvo.

Me levanté animado por los pensamientos anteriores y me di una ducha, el día de hoy sería la fiesta de Adrien organizada por todos nosotros. Yo ayudaría a Holly a preparar absolutamente todo y los chicos apoyarían. Nadie podría conocer tan bien a mi primo como yo, por lo que me encargué de decorar y proponer todo lo que le gustaría a él.

Cuando salía del baño envuelto en una toalla mi padre estaba en el corredor esperándome. Su rostro se veía desaliñado y sucio. Había estado bebiendo de nuevo, era más que obvio que tampoco estaba de buen humor y aquello solo empeoraba al verme.

– ¿A dónde vas? – dijo cauteloso. Mirándome con desdén y examinando mi sonrisa la cual desapareció al instante que lo vi.

– A la escuela... – dije temeroso de que pudiese actuar de mala forma.

– Hoy es cumpleaños de tu primo, ¿cierto? – pregunta tallándose la cara para despertar.

– Si, hoy cumple años Adrien y... mañana yo. – sonrío tímidamente.

– ¿Y qué esperas? ¿Qué te dé un abrazo? ¿Qué compre un pastel? Tú no te mereces nada de eso. Sabes que me da asco tu sola presencia. – me empuja levemente para pasar al baño y cierra de un portazo la puerta.

Sus palabras se resbalan por mi cuerpo como un veneno que afecta directamente mi pecho el cual comienza a estrujarse, rompiendo los pedazos en los que se resume mi órgano vital. Ni siquiera sentí el empujón que me ha dejado rojo el brazo al golpearme con la barandilla de la escalera. Camino cabizbajo a mi cuarto y al estar desnudo frente al espejo me repudio como cada día.

Maldigo mi cuerpo, mis mejillas y cicatrices, los moretones en mi cuerpo que tienen un color ya llegando a amarillo. Así como mi cabello azul que antes me encantaba ahora le veo como algo ridículo al recordar que mi padre odia todo de mí. Me siento débil y estúpido. Tomo unos pantalones y camisa de manga larga con botones pues recuerdo que he dejado ropa para vestirme en casa de Holly en mi mochila.

SuicideWhere stories live. Discover now