Capítulo 17

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Pero al parecer a Jeon Jungkook no le importaba estar en el salón de clases mientras lamía mi cuello.

_J-jung...- y no pude terminar de decir su nombre que sentí sus dientes morder mi piel. Cerré los ojos por inercia y llevé ambas manos a mi boca para no gritar y para no quitármelo de encima por más que estuviera mordiéndome. Odiaba aquél dolor pero amaba tenerle tan cerca mío y haciendo justo lo que estaba haciendo. Este tipo me daba vueltas la cabeza.

_¿Qué estaba por decir, Park?- me miró, con la ceja levantada. Estaba enojado, por haberme mordido. Tomé su celular de la mesa y vi mi cuello en el reflejo, notando la enorme marca roja que ahora tenía en mi piel. No había forma de disimular eso con nada, por lo que estaba enojado.
Pero cuando le ví, mirándome como si estuviera contemplando su creación, su obra de arte, no pude evitar jadear. La sensación en mi estómago era abrazadora, quería arrancármelo con las uñas. Parecían cosquillas y retorcijones juntos. Estas no eran mariposas.
Estas eran las garras de la lujuria arañando la puerta.

_Nada...Señor- dije con un tono seco. Quería que supiera que estaba enojado.

Él simplemente se rió y colocó su índice en mi mentón, bajando lentamente por mi mandíbula contorneando todo a su paso. Llegó a la zona roja y me estremecí un poco, por lo sensible que estaba.
Siguió bajando, y comencé a notar como el brillo de sus ojos aumentaba y su nuez subía y bajaba. Su dedo me recorrió las clavículas, llegando por encima de la ropa hacía mis pezones. Tocó suavemente el izquierdo, levantándome la mirada, como si quisiera saber mi opinión sobre esto.
Asentí, ¿Qué más podía hacer? Moría por que me tocara en todas partes.
Pero lo único que hizo fue contornear la aureola de mi piel sensible y yo me mordí el labio, tratando de no hacer ruido y mirando de reojo al prefecto quien seguía hundido en sus papeles.
Jeon notó esto y pellizcó mi botón, haciéndome saltar por la sorpresa y mirarle, mientras sonreía lujuriosamente. Pasó su yema hacia el lado derecho e hizo lo mismo con aquel pezón. Ambos estaban duros y erectos, más sensibles ante su tacto.

_¿Pasa algo?- preguntó, con la voz un poco más ronca de lo normal. Bien, no era una piedra. Estaba igual que yo.
Pero la diferencia era que yo era un reprimido sexual, y lo había sido por casi 18 años. En cualquier momento iba a explotar.

Negué, incapaz de hablar.

Jungkook alejó su mano, sonriendo y viendo de lleno a mis labios. De inmediato dejé de morderlos, porque tenía en claro lo que estos le producían a mi Dominante. Había dicho que les encantaba y fue por lo que me reconoció, y yo no quería ser empotrado aquí mismo contra la mesa.

Murmuró.

_Eso es jugar sucio, Park Jimin...aún no se tu debilidad.

Y no lo necesitaba, pues todo él era mi debilidad. Desde su cabello a sus pies.

Pero cuando estaba por responder, el prefecto dejó caer su cabeza contra la madera de su mesa.

_Chicos...-murmuró, totalmente frustrado y cansado. Bostezó, pero rápidamente se arregló el traje y frotó sus manos en su cara- voy a por un café, que al parecer tengo trabajo para rato. Me llevo esto- dijo, tomando la llave de la puerta mientras se levantaba.
Se podían escuchar los ronquidos de mi mejor amigo mientras el silencio se hizo, junto a los zapatos de Jun golpeando en el piso. Cuando cruzó el umbral, nos dio una última ojeada para cerrar la puerta y ponerle el seguro.

_Debe tener mucho tra- no pude terminar la frase porque unos labios me invadieron, avalanzándose de lleno contra nuestro pupitre. Me sorprendí, pero pronto dejé que me devoraran. Se escuchó un estruendo proveniente de las sillas siendo abruptamente corridas y le dí gracias al cielo porque mi amigo tuviera el sueño demasiado pesado.
Aunque no me importaría menos que me viera en aquella situación, con Jeon Jungkook devorándome entero.
Esto no era como nuestro beso en la fiesta, esto era algo distinto.Era algo necesitado y desesperado, como si hubiésemos estado aguardando días por probar nuestros labios.
Sentí sus suaves belfos sobre los míos y la cosquillosa sensación de su lengua recorriéndome de principio a fin mi cavidad. Nuestros alientos se mezclaron y nuestros rostros chocaron un poco al igual que nuestros dientes.
Me agarré de mi pupitre por el miedo a caerme, pues mis rodillas temblaban. Las manos de Jeon tomaron el inicio de mi cabello en mi nuca y jalaron hacía atrás, exponiendo mi cuello y levantando aún mas mi rostro para su encuentro.

Losing It    [PJM × JJK]Where stories live. Discover now