The Evolution of Our Love. [BangInho]

28

Y bueno, niños, sucede que un día de nuevo el bello Hyunjin junto a su novio Jeongin me invitaron a una fiesta. Realmente, invitaron a casi todos los de la escuela, diciendo que sería la mejor noche para todos, y yo me arreglé lo más que pude para verme hermoso ese día.

Había pasado casi una semana desde aquel día en el que Minho no fue al descanso conmigo, y ya me había acostumbrado a aquello pues me explicó que sus amigos le pidieron que estuviera más con ellos, y lo entendí.

Lo invité a la fiesta, sin embargo me dijo que iba a estar con su familia, y a pesar de que sin él yo no quería ir, mis amigos literalmente me llevaron a la fuerza.

Y ahí estaba yo.

En medio de mucha gente, con un trago en mi mano, observando como todos bailaban con diversión.

— ¡Hey, Bang!— Me giré para buscar a quién me llamó, y vaya sorpresa ver ahí al pequeño castañito acercándose a mi.— ¿Por qué tan solo? ¿Y tu novio?

— No quiso venir.

— ¡Oh! — Se quedó por unos segundos callado, y luego tomó mi mano, dejando mi trago en algún lado.— ¡Ven, vamos a bailar!

— ¡Wow! — Fuimos corriendo hacia donde todos estaban, y empezamos a bailar, torpe y tontamente, pero lo que importaba era que nos estábamos divirtiendo.

Colocó su cabeza en mi hombro, mientras movía sus caderas sensualmente... Yo no sabía que hacer, como actuar, ¿Esto podría contar como infidelidad? Por primera vez no me interesó anda y bailé con él, lo estábamos haciendo de esa manera, pero sin ningunas segundas intenciones.

Y duramos un gran rato bailando juntos, incluso colocaron salsa y bailamos como pudimos, todo siendo cada vez más divertido y sacándonos risas cortas.

— ¿Estás cansado?— Susurró en mi oído con una sonrisa.

— Sí, ¿Podemos sentarnos?— Reímos al unísono y nos salimos del mar de personas.

No hacíamos más que reír y decir bobadas, incluso se lo presenté a los demás y se cayeron re bien.

— ¡Chicos! En las habitaciones de arriba están jugando v o r, ¿Vamos?— Preguntó emocionada Roseanne.

Y todos aceptamos, mientras subíamos a las habitaciones, nos dimos cuenta de que habían varias cerradas, ¡Oh por dios! Apenas eran las 12 y ya estaban follando, no te lo puedo creer.

— ¿Channie?

— ¿Sí, Jisung?

— ¿Me acompañas a buscar el baño?— Preguntó con una risita nerviosa, asentí y juntos lo buscamos.— Creo que es ese, vamos. — Caminamos hacía allá, y el intentó abrir la puerta, estaba sin seguro.

— ¿Te espero abajo?

— No, quedate, y luego volvemos con los chicos. 

El se dispuso a abrir la puerta, y se sorprendió cuando observó lo que estaba detrás de ella, además de que cerró la puerta rápidamente. —¿Pasó algo?—Cuestioné acercándome.

— Sí, sí, todo bien.— Estaba nervioso, ¿Qué vio allá?— Creo que ya no entraré, volvamos con los chicos. —Caminó hasta la habitación con rapidez, y yo me quedé ahí. Mi curiosidad era más grande.

Abrí la puerta.