Atrapada, en mis brazos

Capítulo 2 - Perdida en un mundo cruel

06:02 AM

Como cada mañana, Rin se levanto arrastras de la cama, se aseo el rostro y comenzó a vestir el uniforme de su colegio.
En la noche había arreglado una vez más su falda, no era la primera vez que pasaba, hoy, nuevamente trataría ingresar al colegio.
Ella no pensaba abandonar sus sueños y sus ganas de salir adelante por culpa de la gente sin moral que la rodeaban.
Comenzó a ordenar sus cuaderno y a cargar su mochila con los elementos que utilizaría.
Parada frente a su mesa de noche, observo su rostro en el pequeño espejo que estaba sobre esta...
Cabello largo y castaño, ojos cafés, sin brillo, piel blanca, algo pálida.
Ella misma notaba que no era la misma de antes, pero no hacía nada para cambiarlo, simplemente trataba aceptar la vida que le tocó, y aprender a vivir con ello, al menos hasta que ella pueda conseguir un trabajo y mantenerse sóla.

- Necesito terminar mi colegio de una vez, ya falta poco... Rin, aguanta, tu puedes - se animó a si misma.

A pesar de que todo a su alrededor se derrumbaba, ella no perdía la fé, en que todo mejoraría.

- Todo sería más fácil si el maldito de Naraku me dejará trabajar - susurró, cerrando ambos puños - pero ya cumpliré mis 18 y me largaré de aquí, no podrá retenerme ni un día más - aseguró.

Tomó su mochila y bajo a la cocina, se sirvió un vaso de leche, la bebió y sin perder más tiempo, salió y cerró la puerta, tratando de ser lo más sigilosa posible, no quería despertar a Naraku.

07:01 AM

Llegó a tiempo frente a las puertas del colegio, pero al ingresar, se topó con dos chicas que le cubrieron el paso.

- Eres una rata muy testaruda, ¿Qué acaso no entendiste cuando te dije que no vuelvas? - comenzó a hablar mientras me cruzaba de brazos.

- Tengo el derecho de venir, tu no eres nadie para decirme que hacer, Kagura - desafió Rin

~ Ya estoy harta de dejarme manipular por estás perras con collar de oro - apretó los puños con fuerza ~ Perdoname madre, pero hay gente que no se merece recibir ni la mínima bondad ni un buen trato, sino saben tratar bien a la gente, tampoco merecen ser bien tratadas.

- Y tu quién eres para trartarme así, eh? Perra callejera.

- Trata a la gente de la misma forma que deseas que te traten a tí, y si no puedes hacer eso, aguantate, no pienso tratarte de otra...

- ¡¡Estúpida!! - levantó sus manos con la intención de estrellar su palma con el rostro de Rin...

Pero Rin fue más astuta y reaccionando doblemente más rápida que Kagura y detuvo sus manos en el aire.

Kagura quedó inmóvil, con un rostro de sorpresa y la vez temor en su rostro.
Apretó los dientes...

- Ayer fue, y será la última vez que me dejaré tocar por gente como ustedes - aseguró Rin frunciendo el ceño, Kagura se soltó de su agarré de un estirón.

Sin más que decir, Rin decidió acabar con esa conversación que para ella era absurda y sin sentido, ya que Kagura no cambiaría su forma de pensar nunca, siempre habia sido así, la conocía, desde pequeña andaba haciendole la vida imposible a ella.

Sin perder tiempo apuro sus pasos y al llegar a las puertas de su clase ingresó, sin percatarse de la presencia del profesor en el curso.

- Además de faltar a clases ahora entras sin tocar, ¡¡Donde quedaron tus modales, señorita!! - la regaño el profesor una vez la vió.

~Si supieras que por la culpa de tus alumnas favoritas no puedo ni entrar al colegio... - se dijo Rin en sus adentros.

- Perdone profesor, es que yo...

- ¡¡Excusas!!... Ya sientate, si no fuera por tus buenas notas ya te hubiera hechado de mi clase por maleducada.

~ Maldito viejo, es que no me pudes dejar hablar? Idiota - sólo le quedaba maldecirlo por sus pensamientos, ya que este era el único profesor con el cuál no se llevaba. Y como la vida de Rin carece de buena suerte, justo le había tocado toparce con el.

Pero al final, las clases terminaron tranquilas para Rin, en el descanso las chicas se juntaban en un rincón a susurrar y murmurar entre ellas, cosa que ella decidió no prestar atención.

11:17 PM

Salió del colegio a pasos lentos, mirando al suelo pensativa, el sol la uliminaba con fuerza, cosa que lograba que le comenzara a doler la cabeza.
Eschuchó pasos tras ella, giró medio rostro y vió a una persona encapuchada tras ella. Rin comenzó a sospechar... Y a asustarse.
Aceleró el paso y los pasos comenzarón a sonar más fuertes, hasta que la alcanzó y antes de que pudiera gritar le tapó la boca y con la otra mano sacó una navaja y la apuntó a su pecho.
Rin no se inmutó y comenzó a sacudirse y a intentar gritar, la navaja que apretaba su pecho rasgo su camisa y tambien su piel, aún así ella siguió sacudiendose.
Este giró el cuerpo de Rin y de una cachetada la tiró al suelo, y la apretó al suelo con su cuerpo.
Rin sentía sus mejillas arder, tenía los ojos llenos de lágrimas, sin saber más que hacer le pateó en la entrepierna y esté cayó al suelo gimiendo de dolor.
La capa se le había caído y su cabello negro largo azabache quedó expuesto.
Sin perder mas tiempo Rin se propuso a correr, pero antes de que diera un paso el hombre alcanzó agarrarla del tobillo, perdiendo el equilibrió ella cayó y al caer al suelo su cabeza cayó sobre una roca que sostenía el pie de uno de los basureros públicos.

-M-madre, llévame, con-contigo- susurró, y cerrando los ojos, termino inconciente.

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Voy avanzando de a poco con este fic, espero que no les desagrade como la voy llevando.
Si te gusta déjame tu voto >☆< please, y dame tu opinión de este cap en los comentarios.
Tengo planeado que este fic será más largo de lo que tengo acostumbrado hacer, al menos que llegue a los 40 cap, así que voy narrandola de a poco, no se pongan impacientes xD

Sin mas que agregar... ¡Hasta el próximo cap.!