El miedo de perderte | Bade One-shot

One-shot

            La voz de Jade resuena en sus oídos ... 4... 5... 6... Pero está tan aturdido par la tacleada de Trina y por el momento que está pasando que no puede moverse, solo está ahí paralizado frente a la puerta, escuchando todo a su alrededor, pero sin poder moverse.

¿Por qué no podía ser más fácil? ¿Por qué tenían que recurrir a esto? Estaba a segundos de perder a su chica y no podía ni moverse para evitarlo, todo porque no saben cómo dejar de pelear. ¿Por qué Jade tenía que ser tan mala? ¿Por qué él no podía ayudarla a dejar de serlo? ¿Por qué?

—Beck —la voz de André lo sacó de sus pensamientos—, piénsalo bien. Sé que estás muy abrumado y te sientes en una cuerda floja como para que yo venga a empujarte, pero si no abres esa puerta será el final —Beck sabía eso, pero no podía reaccionar—. Si dejas que se vaya no hay vuelta atrás. Es momento de pensar seriamente si la amas... O vas a perderla.

Había cierto deje de esperanza y a la vez de tristeza en la voz de André y Beck sabía por qué. Sabía que su mejor amigo se había enamorado de su novia y lo ocultaba para no perder su amistad, no necesitaba decirlo, Beck podía sentirlo. Pero Jade no se siente atraída en lo más mínimo por André y él lo sabía más que nadie.

... 7...

Solo Dios sabe cómo, dio un paso, estiró la mano hacia la puerta y de nuevo se detuvo. No quería perderla, pero no quería seguir peleando, ya no lo soportaba. No retrocedió ni siguió avanzando porque una voz de nuevo lo detuvo.

—No tienes que hacerlo, Beck —dijo Tori—. No tienes que cumplir cada una de las amenazas de Jade, si no quieres seguir con esto, tienes el derecho de acabarlo —Trina asentía frenéticamente ante lo dicho por su hermana.

... 8...

La voz de Tori tenía un tono parecido a la de André y, de nuevo, Beck sabía por qué. La diferencia es que André le estaba animando a que siguiera su corazón, aunque el suyo propio de destruyera. Tori por otro lado estaba intentando con todas sus fuerzas disimular que deseaba que Beck no abriera esa puerta. El problema era, de nuevo, que Beck tampoco sentía lo mismo por Tori.

Beck sabía que le rompería el corazón tarde o temprano a sus dos amigos, porque en esos tres segundos se había dado cuenta de algo que ya sabía: amaba a Jade. No quería que fuera de nadie más que de él y si la dejaba ir le estaría dando paso tanto a su amigo como a otros chicos (si es que se atreven) a entrar en su corazón y eso no lo iba a permitir. Por otro lado, si eso pasaba le daba también la oportunidad a Tori de acercarse a él, lo que destrozaría el alma y quizás la cordura de Jade, y jamás se perdonaría por lastimarla.

... 9...

Un flachback de cada momento, bueno y malo, que había pasado junto a su novia pasó por su mente al oír el penúltimo número y un dolor atravesó su pecho. El conteo casi termina y él sigue paralizado frente a la puerta. No quería seguir peleando, eso es verdad, pero no quería perderla. Hoy mismo iban a acabar con todo, pero no como Tori y Trina querían. Hay otras maneras, hay mejores maneras y lo iba a demostrar.

Solo esperaba poder salir del Shock a tiempo.

—... 10. —Jade dijo finalmente.

La puerta sigue cerrada. Un nudo se siente en su garganta, pero se lo traga y comienza a caminar, no iba a perder su dignidad junto con su relación, no iba a darles ese gusto. Sin embargo, sentía como algo dentro de ella se quebraba.

—Dijiste que no querías terminar —susurró para sí misma.

Le había mentido, él nunca le había mentido, pero hoy lo hizo. Esa pequeña parte de ella que se quebraba estaba a punto de ver su final, de no ser por una mano que la tomó del brazo y la detuvo.