Park Jimin es el nerd más nerd de su clase, nadie lo duda.
¿Qué pasará cuando a un chico dos clases menor a él lo adelanten a su mismo grado y sea su nuevo compañero?
- Gracias por la hospitalidad - dice SeokJin poniéndose de pie - Pero ya es hora que nos retiremos.
- ¿No pueden quedarse un poco más? - dice la señora Park al ver la cara de decepción de los chicos.
- Lo siento pero Jungkookie se duerme a las 23.00 en punto.
- ¡Hyung! - se queja Kook con las orejas rojas.
Los presentes sonríen ante la reacción del menor.
- Con permiso - continua Jin haciendo una reverencia - Te espero en el auto - le susurra a su hermano, dándole espacio para despedirse.
- Muchas gracias por todo - dice Jungkook dirigiéndose a los tres haciendo una reverencia - Estaba todo muy delicioso. Gracias, de verdad.
- Aw cielo, espero verte pronto por aquí - responde la señora Park encantada.
- Fue genial que vinieras, Jungkookie~ - dice Tae con una gran sonrisa.
Todos miran a Jimin, esperando también sus palabras.
- Y-yo te abro la puerta - es lo que finalmente dice, ignorando las miradas sugerentes de su madre y Tae.
Ambos caminan hacia la entrada evitando mirarse.
- Gracias por invitarme, sunbae - dice Jungkook cuando finalmente llegan a la puerta - N-nos vemos en la escuela.
- Sí - responde Jimin y entonces sube su mirada encontrándose con los lindos ojos de Jungkook que lo observaban con un brillo especial.
Los dos se quedan mirando fijo por un rato. Como esperando algo más.
¿Pero qué?
- Gracias por venir - dice Jimin y deja de mirarlo y así poder huir de lo que estaba sintiendo.
No quiero que se vaya.
No quiero irme.
Jungkook con un puchero espera que Jimin lo mire nuevamente, pero como no pasa, un impulso se apodera de él.
Con el corazón acelerado, se acerca rápidamente y deja un dulce y fugaz beso en la mejilla de Jimin, para luego salir corriendo al auto.
Oh.
- ¡Hyung, vámonos! - dice Jungkook, completamente rojo, subiéndose al auto a toda velocidad.
- El cinturón... - le recuerda SeokJin.
- ¡Rápido!
- ¡La seguridad primero!
- Aish - suelta Jungkook, intentando colocarse el cinturón pero fallando miserablemente por los nervios.
- Yah, ¿qué demonios te pasa? - dice Jin ayudándolo a colocarse el cinturón correctamente.
- No sé... - responde sin poder calmarse - No sé qué me pasa, hyung... - finaliza escondiendo su colorado rostro entre sus manos.
Por otro lado...
- Jiminie~, ¿veamos una peli... - pregunta Tae pero se calla al ver a su amigo completamente petrificado y sonrojado - Oh por Dios, no me digas que... ¿¡le diste un beso!? - suelta completamente emocionado dando saltitos a su alrededor.
- ¿¡Alguien dijo beso!? - se une la señora Park, corriendo a toda velocidad hacia ellos.
Jimin niega, enrojece aun más e ignorándolos sube a su habitación cerrando de un portazo.
- ¿En serio se besaron, Tae?, ¿los viste?, ¿hubo lengua involucrada? - pregunta emocionada la señora Park.
- Bueno... - dice Tae, deteniendo sus saltos de alegría - No los vi pero, ¿no vio lo rojo que estaba?. Tía, ¿no tienes cámaras de seguridad o algo así?
- Omo, ¡sí tengo una!, ¡y está ubicada justo en la entrada! - dice tomando al menor del brazo para que fueran a checar el video - ¡Vamos!
Rápidamente buscan los registros.
- Ow, Jungkookie es tan tierno~ - dice la señora Park al ver el video - ¡Mira cómo corre! - dice repitiendo la escena.
- Buu, solo fue en la mejilla - dice Tae con un puchero.
- Es un primer paso, querido - responde ella totalmente encantada - Yo creo que mi Chimchim al fin encontró el amor~
- No va a ser fácil que lo acepte, tía - dice Tae pensativo - ¡Su hijo es tan testarudo!
- Ash, lo sé - dice suspirando - ¿Cómo podemos ayudarlos?
Los dos se quedan pensativos mirando al horizonte.
Solo esperaban que todo resultara bien entre Jimin y Jungkook.
Los cuales, por cierto, aun no calmaban a sus alterados corazones recordando el momento que compartieron hace unos minutos.
Jimin con tatuajes me dejó en el suelo, chingus .-.
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