Nerd and Nerder - Jikook

F (29)

- Yo creo que... sería bueno esperar para eso también - responde Jimin luego de algunos segundos de indecisión.

Jungkook hace un perfecto puchero ante esa respuesta y baja su cabeza.

En todas las series que vio con Jin y  novelas románticas que había leído, los protagonistas se besaban cuando uno se declaraba al otro.

¿Por qué eso no estaba pasando ahora?

- ¿Te enfadaste? - pregunta Jimin tomando su barbilla y elevando su cabeza para que lo mirara.

Jungkook niega y desvía la mirada.

No estaba molesto sino más bien triste.

Él quería un beso.

Pero al parecer Jimin no.

- Hey, no es que no quiera - aclara Jimin al no obtener respuestas - T-tienes... tienes unos labios muy bonitos.

- ¿Entonces por qué no quieres probarlos? - dice Jungkook de pronto acercándose más a Jimin.

Todo su instinto coqueto que no sabía que tenía estaba saliendo a la luz.

¿Eso era el instinto, cierto?

- Es que... - responde Jimin tragando saliva ante la cercanía de sus rostros - Estoy demasiado nervioso e inseguro. Tengo que investigar al respecto. Debe haber evidencia y referencias bibliográficas que respalden una práctica efectiva y satisfactoria.

Jungkook frunce la nariz ante esa respuesta.

Si bien le gustaba Jimin tal y como era, es decir, perfeccionista y gruñón, necesitaba que flexibilizara un poco.

- Sunbae - susurra Jungkook sin dejar de mirarlo con ojos soñadores - Sabes que grandes descubrimientos científicos han sido sin experiencia, por coincidecia o simplemente accidentes, ¿verdad?

Así continuó acercándose. Como si alguien se hubiera metido en su sistema dejando a un lado al Jungkook tímido, con el único objetivo de besar los labios de Park Jimin.

- C-como la penicilina - susurra Jimin  perdiéndose en esos ojos que parecían esconder galaxias.

- Como la penicilina - repite Jungkook sonriendo por lo bien que podían entenderse.

Jimin estaba entrando en colapso mientras Jungkook seguía acercándose lentamente.

¡Thomas Edison!

Su cerebro comienza a trabajar al 1000%.

Tal y como ese capítulo de Bob esponja cuando es mesero y olvida su nombre.

¿Debería estirar los labios?

¿O quizás entreabrirlos?

¿Qué hay de humedecerlos?

¿Tengo que cerrar los ojos?

¿Cómo se mueve la lengua?

¿Qué pasa con los dientes?

Pero no  había previsto que si ambos se acercaban de la misma forma...

- Ay - se queja Jungkook cuando sus narices chocaron.

Ambos se miraron y se echaron a reir por su torpeza.

- ¿Deberíamos mover la cabeza, no?  - se atreve a preguntar Jimin un poco más relajado después de lo ocurrido. ¡A la mierda la investigación! - T-tú a la derecha y yo la izquierda.

- Hecho.

Ambos movieron sus cabezas al mismo tiempo y se acercaron rápidamente por la ansiedad que sentían.

Pero volvieron a chocar.

Risas tontas otra vez.

Elemental.

Sus derecha e izquierda coinciden si están de frente.

- ¿Ambos a la derecha? - pregunta Jungkook esta vez.

Jimin asiente y entonces ambos comienzan a acercarse expectantes, con sus cabezas ladeadas en sincronía esta vez.

Ojos brillantes, mejillas y orejas coloradas y corazones latiendo fuerte.

Sus labios se juntan armoniosamente como imanes y en sus estómagos inicia una fiesta de fuegos artificiales.

Por un mísero segundo.

- ¡ENEMIGOS! - grita un niño de unos 6 años que había subido al castillo y los amenazaba con su espada de plástico - ¡ENEMIGOS EN MI CASTILLO!

Inmediatamente ambos se separaron ante ese grito.

- ¡ALZAD VUESTRA ESPADA Y ENFRENTAD VUESTRO DESTINO! - continua el niño decidido a defender su lugar como rey del castillo.

Ambos miraron al adorable pero inoportuno niño que los miraba con su ceño fruncido y en posición de batalla.

Resignados por la interrupción, se miran y se sonríen algo avergonzados pero decididos.

Después de todo, si un niño te retaba a una batalla épica solo había una cosa que podías hacer, ¿verdad?

Los besos podían esperar.

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