CAPÍTULO 05

1K 153 74
                                    


—Oh, vamos, Woojin ¿Puedes dejarlo ya? Lo estás asustando.

Escuché la voz de Jisung y lo divisé a un lado de todo el escándalo, estaba rodeado por unos cuantos adolescentes mirones, mientras Woojin y todos sus amigos continuaban riéndose, seguro de mi rostro asustado. Soobin era alto, muy alto, y cuando tomó mi brazo, no pude evitar gemir de dolor, no porque doliera en sí, sino porque no quería que me tocara, me sentía de nuevo el estúpido omega que se dejaba llevar por todo.

—Vamos, Hyunjin, no te resistas, no quieres que use la voz y te veamos mearte en los pantalones ¿No? Soobin entrará en celo muy, muy pronto, puedes servirle bien, además según las revistas bien sabes servir hasta a millonarios ¿No? — Mi mirada viajó por la gran cantidad de personas que nos rodeaban, incluso ahora sabía porque Jisung no se acercaba, dos amigos de Woojin lo tenían bien sujeto de los brazos, impidiéndole avanzar ¿Quién más abogaría por mí? Incluso los profesores se alejaban de escenas como esta, nadie se mete con un alfa cazando a un omega, yo era el omega, Soobin el alfa y su mirada era el perfecto método para hacerme doblegar.

—Woojin ¡Basta! — La voz de Jisung ya parecía algo distante, la mirada de Soobin me estaba consumiendo, sentía mi cabeza doler, era yo luchando contra mi omega, tratando de la forma que sea no doblegarme ante aquella mirada. E incluso cuando el brazo de Soobin rodeó mi cuerpo, lo sentí quemar, no de la buena forma, aquel contacto me repugnaba tanto, pero ya era tarde, mis pies se estaban moviendo para cuando quise decir o hacer algo. Él ganó, el alfa siempre obtiene lo que quiere, porque eso es lo que soy, una cosa que sirve para aliviarlos, ni siquiera una cosa que deseen mantener a su lado.

Caminamos a paso tranquilo hasta donde los alfa esos tenían sus autos, suspiré, mis pies se movían por inercia propia mientras mi mente solo se llenaba de la imagen del único alfa con el que quizás aceptaría subirme a su auto, y de hecho, me había subido a su auto sin chistar aquella noche. ¿Cómo estaría Changbin? Bueno, era rico ¿No? Seguro se alimentaba bien, comía bien, dormía bien y tenía una vida de sueños.

Si lo pensaba con la cabeza un poco más fría, cuando me estaba acercando a vivir una de las cosas más desagradables de ser la parte más baja del régimen genético, debí de haberme imaginado que algo así pasaría, quizás habría evitado esto si hubiera traído puesta la ropa donde aún tenía algo impregnado el fuerte olor de Changbin, no solo para protegerme, sino también porque lo extrañaba, y sinceramente sonaba enfermizo no haber lavado ese conjunto de ropa solo para mantener su olor, pero era lo único que me quedaba de él.

Cuando ya estábamos a nada de subirnos a uno de los coches, escuché un auto viniendo a velocidad y luego un hermoso Ferrari negro ya conocido para mis ojos se estacionó rozando el parachoques del coche donde se supone iba a entrar. Mi corazón se detuvo y después lo sentí palpitar con fuerza, incluso mi omega estaba aullando de felicidad, si es que eso era posible.

Changbin, era mi Changbin.

Bueno, solo Changbin.

Él bajó del auto cerrando la puerta con un fuerte golpe y se paró justo frente a nosotros, sentí su enojo, el fuerte olor que desprendía estaba seguro que nos asustó a muchos, Changbin estaba más que enojado, parecía colérico y la mueca en su rostro solo me confirmaba mi teoría.

Jadee cuando estiró su mano hacía mí y sin pensarlo dos veces la tomé, me liberé del agarre de Soobin para coger la mano de Changbin mientras este rodeaba mi cuerpo después. Mi cabeza se apoyó en su pecho e incluso me atreví a frotarme contra la tela, mientras su agarre en mi cintura se hacía más fuerte, sin embargo Changbin no bajaba la mirada para verme, continuaba observando a Soobin sin siquiera pestañar.

The Perfect Omega [changjin]Where stories live. Discover now