McWay

Capítulo 13

   Colt se quedó petrificado observando la escena, sin ser capaz de reaccionar.

-¿Qué... Carajos? - Preguntó Adeline a su lado con la misma estupefacción que él.

   Era muy extraño que aquella muchacha se sorprendiese de algo pero, demonios... Lo que estaban viendo era increíble.

   Corinne y Darly... Desnudas.

   Aquellas dos muchachas no se quitaban la ropa jamás. La morocha porque se sentía demasiado avergonzada de su propio cuerpo y Darly... Pues porque era Darly. Ella no dejaba piel a la vista nunca, no era sexy y, definitivamente, no tomaba alcohol.

-Corinne, estás muy delgadita... - Le dijo Adam a la morocha entre risas mientras se acercaba a ella y la tomaba de la cintura para atraerla hacia él. - No te me rompas, chica.

   Colt se quedó helado observando como el moreno se abalanzaba tambaleante sobre Corinne para plantarle un rígido beso en los labios.

-¡ADAM! - Soltó de repente el morocho, sin poder controlar su reacción. Aquel tipo había cruzado la puta línea. - ¡Suelta a Corinne ya mismo, imbécil de mierda!

-¡Colt! - Chilló Darly con alegría volteando hacia él. - ¡ADELINE! - La castaña sonrió y corrió hasta donde la muchacha de cabello blanco se hallaba.

   Demonios, esas cosas sí que rebotaban, pensó Colt.

   ¿Quién habría dicho que Darly escondía semejantes bellezas debajo de todos aquellos vestidos de anciana?

-¿Colt? - Preguntó Corinne con voz de borracha, volteando hacia él al mismo tiempo que Adam.

-Oye, ¿Qué pasa, viejo? - Preguntó con confusión su amigo al escuchar los insultos de Colt.

-Corinne, ven aquí. - La llamó firmemente con el ceño fruncido.

-Pero, no... - Comenzó a decir la morocha con una sonrisita.

-¡Ahora! - La regañó.

   La pequeña borrachita se acercó tambaleante hacia él, dejando escapar risitas y lanzándole rápidas miradas a Adam, quien se hallaba detrás de ella.

   Colt frunció el ceño con un repentino y explosivo enfado hacia la muchacha.

   ¿Por qué demonios había hecho eso?

   Se quitó el abrigo que llevaba puesto, intentando mantener la mirada alejada de la morocha que se acercaba hacia él y, una vez ésta estuvo a su lado, la cubrió con la prenda.

   Afortunadamente, era tan pequeñita que el abrigo la tapaba entera y no dejaba ver nada... Inapropiado.

   Estúpido Adam, pensó. ¿Cómo había podido aprovecharse de ella así?

-¿Acaso quieres perder todos los putos dientes, idiota? - Le gritó al moreno con furia mientras mantenía a Corinne sujeta a él con su brazo.

-Viejo, ¿Qué hice? - Preguntó el muchacho con confusión.

-No lo regañes, Colt. ¿Por qué te pones así? - Soltó de repente la morocha con una sonrisita.

-¡Tú te callas! - La reprendió. - Contigo hablaré luego.

   Corinne lo observó con sus enormes ojos marrones por algunos segundos, y luego se echó a reír.

   Demonios, estaba muy jodidamente borracha.

   Claro que lo estaba, pensó el morocho, con su tamaño diminuto y el poco alimento que ingería, el alcohol debía de haberla afectado mucho más que a cualquier otro. Sin mencionar que hacía un largo tiempo en que aquella chica no bebía.