M de Matrimonio [DRARRY]

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Años de riñas, golpes, maldiciones e incluso una que otra tragedia los marcaron en un camino difícil. Todos sabían que no existía mas enemistad en Hogwarts que la de Draco Malfoy y Harry Potter, su relación básicamente se basaba en hacer sentir al otro miserable. ¿Entonces que estaban haciendo allí, en una sala del ministerio con un juez mágico leyendo que efectivamente el contrato matrimonial entre ambos estuviera bien redactado y que todas las clausulas fueran agregadas?

Draco bufo poco elegantemente cabe decir y sus cejas se juntaron todavía más dejando en claro lo mucho que odiaba la situación, Harry al contrario estaba aun armando un escándalo de proporciones inimaginables en contra de Dumbledore aunque ya le hubieran dicho hace semanas que no había opción de librarse de esto. Narcisa arreglo por millonésima vez la manta sobre los hombros de Draco que cubría al chico del frio e ignoro los berridos de su futuro nuero.

—Por Merlin Potter—Gruño el rubio por fin, luego de escuchar una vez más el argumento de "¡No puedo casarme con Draco Malfoy, nos odiamos!" —Cállate y siéntate, me estoy congelando los huevos esperándote y no, no me importa lo disgustado que estés de casarte conmigo—Rodo los ojos al mejor estilo Draco Malfoy, el moreno detuvo cada uno de sus movimientos, tenso, miro a su futuro esposo al fin callado—Esto es un mero trámite, serán dos años hasta que seamos mayores de edad—Aviso—Después de eso podemos desligarnos totalmente fuera del asunto y mis padres encontraran a alguien más para que sea mi esposo—Harry se volvió rojo y apretó los puños, silenciosamente Dumbledore acompaño a Narcisa fuera de la sala, era mejor que ambos jóvenes sacaran todo de si en ese momento o habría grandes problemas en un futuro

—¡Son dos años casado contigo maldito idiota, ¿Acaso no te importa pasar dos años de tu miserable vida de sangre pura enlazado a un mestizo?! —Draco al fin enfureció, cosa que Harry había estado esperando desde que les avisaron que iban a casarse en un mes, solo que no lo hizo de la manera que esperaba

—¡Por supuesto que me importa idiota cara rajada! —Grito de la misma manera—¡¿Por qué me interesaría casarme contigo de forma voluntaria de todas las personas en este planeta?! —Draco apretó los dientes con furia—¡Pero aquí estoy, en una jodida silla de ruedas, maldito como el infierno gracias al hijo de puta del señor oscuro, a punto de decirte que sí, que me voy a casar contigo si eso detiene a mis padres de mirarme como si fuera una jodida desgracia para el jodido apellido Malfoy y me hace caminar una vez más, si eso me hace ver plenamente de nuevo y por sobre todo, me hace vivir para ver el maldito día en el que venzas a ese monstruo! —Harry parpadea, sus ojos verdes mirando al rubio de arriba abajo notando por fin que efectivamente el chico está muy delgado, su traje a la medida le queda suelto y arrugado, había profundas ojeras debajo de sus ojos y por sobre todo, el chico está en una silla de ruedas muggle, de todas las cosas del planeta eso era algo que el moreno jamás creyó que vería.

Con los labios apretados Harry se acerco hasta Malfoy—Bien, si. Lo siento pero, te odio. Y esto es...—Harry despeina su cabello aun más

—Horrible, lo sé—Aporta Draco—A mí tampoco me hiso gracia que de todos los magos poderosos fueras tu el que coincidía con mi magia—Harry suspira y arregla distraídamente su corbata roja con dorado, señal de que efectivamente venían del colegio y que a pesar de haber tenido una hora para alistarse para la reunión como Draco, el moreno había preferido solo despotricar sobre el asunto y hacerse el mártir

—Bien, hagamos esto ¿Qué son dos años, no? —Draco sonríe de medio lado, una sonrisa que ahora que Harry lo piensa, no le había visto a Draco desde hace un tiempo, una sonrisa que solo asocia al rubio frente a él

—Sí, probablemente se pasen rápidamente—Aporta el rubio, Harry atrapa el sarcasmo en la voz aterciopelada y le manda una fea mirada, el rubio se la devuelve sin problema, ambos siguen mirándose con odio cuando los adultos regresan