Juego sucio (GYLLENHOLLAND)

Capítulo 2

Cuando Tom y Jake se hicieron novios oficialmente (¡por fin!), el segundo corrió a contárselo a todo mundo; a su hermana, sus padres, sobrinos, incluso hasta a sus perros.

Cuando se lo contó a su mejor amigo Ryan, este lo invitó al bar que siempre frecuentaban y brindaron en celebración.

Todo era perfecto y no podía estar más feliz. Las salidas con Tom eran más frecuentes y entonces se animó a invitarlo a vivir juntos. Algo que con Ryan lo habló mucho y que él siempre le decía lo mismo:

— Creo que te estás apresurando.

Así que su amigo intentaba convencerle siempre de no preguntarle a Tom, que sólo lo asustaría. Y Jake al final  le daba la razón pero en su mente no podía dejar de pensar en esa, oh tan maravillosa idea, por lo que un día sin ocultar su emoción casi se lo gritó en la cara.

— Creo que te estás apresurando. —y Tom lo rechazaba una vez más con su sonrisa amable.

Aunque a Jake le hizo eco la voz de su amigo Ryan y decidió no contarle sobre este desliz. Podía verlo con su mirada burlona mientras le decía "te lo dije" o algo por el estilo.

Pero entonces, la próxima vez que vió a su amigo podía ver pintado en su cara aquellas palabras.

— Te dije que no lo hicieras. —dijo su amigo dando un trago a su bebida.

— ¿Cómo lo supiste?

— Tom me lo dijo.

Jake se sintió confundido por unos segundos y le dió un trago a su vaso.

— ¿Ustedes... hablan? —preguntó entonces lentamente.

Ryan sonrió, oh maldito.

— Claro, soy tu mejor amigo y él tu novio, tenemos mucho de qué hablar.

— Espera, espera. —dijo apartando su vaso lejos de él.— Ustedes hablan de mí.

— Uy, qué presumido. —Ryan se burló.

— ¿De qué hablan? —Preguntó Jake muy interesado. ¿Tenía su número?

— Cosas.

— ¿Qué cosas? —Jake ya comenzaba a impacientarse.

Ryan sólo lo miraba con travesura en sus ojos castaños. Y ya no dijo nada y él tampoco. Se sentía extraño, no sabía qué pensar sobre esos dos hablando juntos, es decir, claro que era bueno que su mejor amigo y su novio fueran amigos le parecía genial pero, ¿cuándo se hicieron tan cercanos?
Incluso para contarle sobre la invitación que con mucha educación Tom se encargó de rechazar.

Ryan era un ídolo para Tom así que Jake se sentía un poco desplazado por su propio novio.

Lo primero que hizo al ver a Tom (después de besar su dulce boca, claro) fue preguntarle por su amigo.

— ¡Oh sí! Hablamos por Instagram.

— Instagram. —repitió Jake.

— Sí, también se pueden enviar mensajes por ahí, ¿sabías? —se burló Tom pellizcando sus mejillas.

— No es que tú seas un experto en las redes sociales, tampoco. —lo acusó y tomó sus manos para besarlas.

Tom rió murmurando "redes sociales". Jake mordió uno de sus dedos en venganza.

— ¿Entonces de qué hablan?

— Cosas.

Jake sintió su ojo temblar y continuó.