Eres esa droga prohibida, la que me deja anestesiada, ajena a cualquier dolor al cual se me pueda someter, la misma que cuando no corre por mis venas anhelo con desesperación.
Y es que me pregunto si lo nuestro será un amor destructivo...
De esos que al final no sobreviven, pero que se quedan impregnados en cada rincón de tu cuerpo, alma y ser.
Y se me ciegan los ojos de lágrimas al pensar en la simple posibilidad de no tenerte
a mi lado, y al mismo tiempo me siento culpable además de avergonzada por dejar que ese pensamiento volara por mi mente.
Estúpida niña tonta, ¿En que estabas pensando?
Me dan ganas de arrancarme cada pedazo de piel, y dejar al descubierto mi interior, con la esperanza de así conocerme al fin.
¿Quien soy? ¿Quien eres? ¿Quienes somos?
No losé. Todo. Un 'ni contigo ni sin ti', supongo.
Solo sé que me da miedo respirar sin ti.
Y he teñido mis pensamientos con cada una de las emociones y estados
que tengo reprimidos en mi ser: Miedo, Amor, Tristeza, Demencia, Vulnerabilidad..
Y estos me provocan terribles pesadillas de las que no logro escapar, pero de las que quizás no quiera despegarme.
Porque el dolor que me producen, me confirman que existe aún un - nosotros - .
