03; La flor en la superficie

1.2K 229 8
                                    

Las cuatro hermanas menores juegan alrededor de Woozi, mientras él hace coronas de flores para la sirena que resulte ganadora del juego. Ama verlas divertirse y prefiere hacer detalles para ellas que nadar en círculos mientras una pesca a la otra.

Nana da la señal de que un nuevo bote se acerca a la cueva, no está segura si los hombres a bordo van por ellas, pero deben ponerse en posición, por si resulta que entran a la cueva. Woozi deja sus coronas de flores cerca de la orilla y baja por su flor, logra escabullirse y esconderse de sus hermanas, para que no lo vean colocando su flor una vez más.

Cuatro chicos entran a la cueva, pero uno se rehúsa a entrar más allá —aquí los espero— dice sentándose en el primer escalón del muelle, muy cerca del límite entre el mar salado y las aguas dulces de la cueva.

Woozi lo mira escondido detrás de una roca, el cabello del chico es negro, un poco largo y bastante alborotado, seguramente por el viento en el alta mar. No puede evitar mirar sus labios gruesos y rosas que lo tientan a fantasear con él. Se sumerge y ve a sus hermanas distraídas, cuidando de sus flores para salir en caso de que alguno resulte enamorado.

Se muerde el labio con un poco de culpa, pero deja que su flor salga a la superficie y se mueva lentamente hasta el chico en la orilla. Su flor no tiene nada especial, es rosa como su cabello, con algunas delicadas hojas verdes como el ramillete que le gusta poner en su mejilla cada mañana. Sin embargo, capta la atención del chico.

Ve sus ojos brillar, y puede escuchar a su corazón palpitar cuando el chico ve la flor detenidamente. Él se ha enamorado de la flor. Jihoon sale a la superficie lentamente, enseñando su rostro y el agua le llega hasta las clavículas, sus ojos se conectan con los del chico y los dos sonríen.

—Esto es basura, vámonos de aquí— dice uno de los chicos.

Woozi sabe que sus hermanas atacaran en cualquier momento y no quiere que se lleven al de cabellos negro, pues ahora es suyo —vete antes de que intenten llevarte— dice y se esconde antes de ser visto por los demás humanos.

El de cabellos negros no comprende bien qué podría pasar, pero cuando ve a las demás sirenas salir a flote, decide huir antes que se lo lleven al fondo del agua. De los cuatro chicos, uno murió y Woozi comía muy alegremente del pie que le había tocado, sus hermanas se dan cuenta al instante de que algo ha pasado, no es normal verlo tan feliz después de que los hombres entran a la cueva.

Usualmente se enoja porque no puede dejar su flor en la superficie y come de mala gana lo que le dejan. Así que Sungyeon y Xiyeon comienzan a molestarlo, pero nada detiene el cantar de su hermano.

—¿Qué te ha pasado Woozi?— pregunta con una enorme sonrisa Sungyeon, nadando en círculos a su alrededor.

—Me he enamorado— dice sin darse cuenta que eso sonó mal para sus hermanas.

—¿Qué dijiste?— pregunta Uee preocupada de que haya desobedecido.

—Lo que escucharon, me enamoré de un hombre apuesto.

—Por favor, no digas que dejaste tu flor en la superficie.

—No necesito dejarla para enamorarme— dice frunciendo su ceño, pero sin ser aún suficiente para enfadarlo realmente —pero si lo hice— explica rápidamente.

—¡Woozi! ¿Por qué lo hiciste?— regaña Ailee.

—¡Porque quiero que alguien se enamore de mí!— dice al borde de las lágrimas.

Sus hermanas deben impedir que llore bajo el agua, o sus lágrimas podrían dejar amarga el agua por algunos días, así que lo hacen salir hasta la superficie y que se siente en el muelle.

—No necesitas que alguien se enamore de ti— dice Raina tratando de consolarlo al dejar que use su hombro para llorar.

—Pero yo quiero— una lágrima se desliza y Ailee la recoge antes de que caiga donde no debe.

—Veamos el lado positivo— dice Lizzy —los hombres no regresan aunque estén enamorados de las flores, así que Woozi está a salvo.

Eso destroza el corazón de Woozi, haciéndolo llorar sin consuelo. Uee y Ailee la ven con mala cara, aunque era bueno para ellas, no lo era para el pequeño tritón, así que ahora deben calamar a Woozi y que no saltara al agua llorando.

El rey tritón sale a la superficie, le extraña que todas sus hijas estén tan calmadas y la mayoría fuera del agua. —¿Qué sucede aquí?

—Woozi enamoró a un hombre— acusó Uee sin pensarlo mucho.

El tritón miró a todos lados —¿y dónde está?

Todas miraron a Woozi, esperando que él respondiera —le dije que huyera— dice inhalando con fuerza y regresando sus fluidos nasales al interior de su cuerpo —no quería que mis hermanas lo atacaran, así que él me hizo caso y se fue.

Eso era nuevo de escuchar, usualmente los hombres ignoran cualquier pedido y se lanzan al agua si es necesario con tal de seguir junto a la bella sirena. El tritón asiente —si regresa, déjenlo ir a cumplir su deseo— dice tranquilamente.

—Pero padre...— Ailee está en contra de aquello y Jihoon tiene una diminuta sonrisa en sus labios.

—Ya dije— el tritón se sumerge una vez más y deja que las sirenas terminen de consolar al único varón.

Flores en el agua [JiCheol]Where stories live. Discover now