Empecemos de nuevo

538 55 33
                                    

Prólogo;

Dicen que los deseos se vuelven realidad si lo anhelas desesperado, que cada plegaria llegara a ti siempre que mantengas la fe de su existir pero... Creo que mejor perderé todo tipo esperanza; ya que, por más que esperé a ver su sonrisa una vez más, por más que anhele ser regañado por su parte, sé y tengo claro que Akaashe jamás querrá hablar conmigo. Aún guardo su contacto y de vez en cuando le envío un pequeño mensaje; estoy seguro que cambió su número para que no pudiera dar con él de ninguna forma, ni siquiera sé dónde vive ahora. Realmente estoy solo en este mundo tan cruel y grisáceo que prefiero vivir en mis fantasías todos los días al menos así, poder mantenerme colorido.

Entiendo fue mi culpa, y todos los días lo digo al viento para que llegue a ti, no creí; mucho menos pensé, que unas simples palabras acabarán con una amistad de años en el pasado, lo que me llevó a ver que siempre pensé en él e intentaba protegerlo, era amable y cariñoso para no verlo triste en ningún momento ya que lo había visto en ocasiones a escondidas... Detesto verlo llorar y me odio a mi mismo por haberlo causado.

Ahora sé que es feliz, este donde este y junto a la persona que yace a su lado en mi lugar, mi único deseo es que lo cuidé como alguna vez lo hice, que lo quiera y lo más importante... Que las únicas lágrimas que caigan, sean de felicidad y no de tristeza o mucho menos vergüenza.



❝  El búho yacía durmiendo con complejidad, despertando a cada momento entre sollozos queriendo alcanzar algo que no está ahí para sostener , mirando desorientado seguido de abrazar la almohada y seguir durmiendo

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

❝  El búho yacía durmiendo con complejidad, despertando a cada momento entre sollozos queriendo alcanzar algo que no está ahí para sostener , mirando desorientado seguido de abrazar la almohada y seguir durmiendo.

Los sueños que tenía mostraban sus deseos más grandes, jamás creería que eso se volvería su propio martirio cada noche.

Veía un lindo paisaje, lleno de un azul brillante con degradados celestes, enormes nubes alrededor y una brisa agradable que despeinada su cabello; bajo sus pies había agua, un enorme charco que reflejaba el cielo. Se sentía relajado, lleno de armonía hasta que a lo lejos pudo ver al azabache; su corazón latía fuertemente corriendo tras él sin pensarlo dos veces, al estar cerca sonreía con sus ojos cristalizados tomando su mano con delicadeza — ¡Akaashe! Estas aquí... Realmente estas aquí — Musito entre pequeños sollozos.

        —Bokuto-san, veo que sigue siendo el
                     mismo de siempre —

Podía oír su voz, dulce al oído volviéndose reconfortante.. No quería despertar, se sentía seguro ahí, tomando su mano. — Moo ¡No sabes cuanto te extrañe! ¿¡Que clase de persona desaparece así como así!? Akaashe idiota... — ¿Realmente estaba ahí con él? Así lo sentía, podía verlo; tocarlo y hablar... Poder oírlo, abrazarlo... Su mejor amigo lo estaba viendo, y tomaban ambos sus manos.

—¡Ven! Caminemos ¡Tengo mucho de que contarte! — Estaba emocionado, reía; sonreía e inclusive tarareaba, sentía que todo había vuelto a la normalidad aunque sea una cruel fantasía.. Quería vivir ahí por siempre.

[One-Shots] BokuAkaWhere stories live. Discover now