𝘮𝘢𝘺𝘣𝘦

3.3K 288 25
                                    

—¡Hola! ¿Cómo están? ¡Espero que estén muy bien el día de hoy!—exclamó Julia mientras se grababa con su cámara de vlog. Se encontraba en su habitación en Argentina—. Yo estoy un poco nerviosa porque Samuel viene a Argentina a pasar año nuevo conmigo y con mi familia —dijo feliz mientras caminaba por su pequeño cuarto—, y yo voy a ir a buscarlo ahora al aeropuerto.

La imágen cambió y Julia ya se encontraba en un auto. Acomodó la cámara para que se viera bien.

—Como pueden ver es un día muy lluvioso en Buenos Aires, pero sigue haciendo demasiado calor.

Ella andaba por la carretera.

—Tengo que ir a buscarlo a Ezeiza y creo que llego un poco tarde.

—No tenía planeado grabar nada de esto, pero se me antojó, estoy como con muchas ganitas de verlo.

—Los que me siguen en Instagram, que abajo en la cajita de info les dejo todas mis redes sociales para que me sigan, saben que no lo veo hace como una semana y de pasar a vivir juntos a no vernos por una semana para mí es muchísimo.

—El plan principal era que yo me vaya a pasar las navidades con su familia, pero hubieron problemas en el medio y tuve que venir a Argentina antes.

—Estoy nerviosa porque no sé cómo se va a tomar Samuel un año nuevo en pleno verano, pero espero que no lo sufra.

Julia no despegaba la mirada del camino y de vez en cuando hablaba y en otras simplemente se quedaba en silencio. Total eso después no aparecería en el vídeo.

—Vamos a hacer un carpool karaoke, acá en mi auto y sin James Corden —dijo riendo.

—Esta canción me hace acordar muchísimo al club media fest, a Rubén y a Mangel, pero demasiado.

Uptown Funk de Mark Ronson con Bruno Mars empezó a sonar en el carro. Julia cantaba divertida.

—Me hace acordar muchísimo porque no parábamos de cantarla, en serio, es genial.

La música seguía sonando. Julia ya se encontraba en la autopista e iba tranquila escuchando la melodía que salía de los parlantes.

Pasó casi una hora manejando cuando se iba acercando al aeropuerto.

—Bueno, según Samuel, aterrizaba a las 15:50 y estoy llegando 15:30 así que, estoy puntual.



A lo lejos pudo verlo. Con unas ojeras normales de doce horas de viaje, pero con una sonrisa inmensa cuando logró observarla.

Casi como una película Julia se abalanzó sobre él para apretujarlo.

—Hola, cariño —susurró él y le dió un beso en la mejilla— ¿Me extrañaste?



—Les voy a contar algo que no sé cómo debería reaccionar —dijo Julia una vez ambos se subieron al coche y comenzaban su regreso a la casa de la morena—. Para los que no saben yo tengo una sobrinita que se llama Isabella, que tiene cuatro años.

Julia logró ver una sonrisa escaparse de los labios de su novio que llevaba puestas unas gafas de sol y su ya, tan característica, gorra negra. En cámara seguro se veía muy sexy.

—Pero Isabella está enamoradísima de Samuel que, cuando se enteró que venía a pasar la fiestas con nosotros, le pidió a mi hermano que le comprara un vestido, o sea... increíble.

—Esa niña cuando sea grande va a tener un buen gusto, eh, ya te lo digo.

—Sí, sí, decile eso a mí hermano, lindo.



—¿Vos me estás cargando? —preguntó Julia indignada intentando descubrir si era una broma.

—No quiero discutir, Julia —respondió Samuel sacando su ropa de la maleta.

—No podés ser más hijo de puta, en serio, sos increíble.

—Ostia, la boca —dijo dándose la vuelta para mirarla—, que yo a ti no te estoy faltando el respeto.

Julia lo miró asombrada.

—¿Ah no? ¿Mentirme no es faltarme el respeto?

—Julia, acabo de llegar y no quiero hablar de esto, es para peor.

—Pero yo sí quiero hablarlo ahora, ¿sabes? Me muero por saber qué carajo hacía Noelia en lo de tus viejos y de qué tema tan importante hablaron.

Samuel cerró los ojos y tomó de las manos a Julia. Ambos se sentaron en la cama.

—No te quería decir hasta que pasaran las fiestas, joder, pero no sé qué tienes que te enteras de todo antes, tía.

—Hablá de una puta vez.

—Mi madre invitó a Noelia y a sus padres a pasar la Navidad con nosotros, como todos los años.

—Que raro tu madre siendo tan gentil —dijo Julia sarcásticamente soltándose del agarre de su novio.

—Y nada más. Vino Noelia a hablarme, pero no pasó nada extraño, en serio.

Julia ya se estaba haciendo mil historias en la cabeza. Últimamente Noelia no paraba de mandarle mensajes a su novio  ¿Qué buscaba? Era obvio que lo quería a él.

¿Habían estado solos? ¿Y si Noelia intentó besarlo? Capaz Samuel le dió a entender algo que no era... No podía ser, no podía pensar tantas estupideces.

—¿De qué hablaron? —preguntó intentando sonar calmada.

Samuel suspiró y atrajo hacia sí a su novia. Una semana sin verla, la había extrañado demasiado.

—Que por qué no le respondía los mensajes, que al final éramos amigos y no sé qué.

—Sí, amigos —dijo Julia poniendo los ojos en blanco.

El muchacho sonrió y le dió un beso en los labios esperando que se olvidara un poco de lo sucedido.

—Dormimos una siesta, ayudamos a tu madre a preparar todo para la noche y nos vamos a juntar con tus amigos después de las doce, ¿Así era el plan?

—Odio que siempre cambies de tema.

—Es que siempre funciona.

Julia: vos sabés lo que amo dormir no? bueno, no puedo pegar un ojo.

Rubito: qué pasó? vegettita la ha liado?

Julia: más o menos. Noelia.

Rubito: jodeeer, pero esa muchacha no había pasado de moda ya?

Julia: OJALÁ

Julia: sigue dando vueltas.

Julia: encima Samuel hace como si nada y me jode demasiado porque sé que me está ocultando algo

Rubito: crees que sucedió algo entre ellos?

Julia: no sé, siento que hay algo más, pero él no me lo va a decir

Rubito: yo te quiero mucho, lo sabes no?

Julia: soltalo.

Rubito: últimamente te pasas todo el tiempo flipada con que vegetta te mete los cuernos

Rubito: tía, si no confías en él para que sigues?

Julia: confío en él, no confío en Noelia ni en ninguna de sus amiguitas.

Rubito: venga, como digas.

Rubito: si Irina me llega a decir eso la mando a mierda.

Julia: te juro que no quiero pensar mal de Samuel, Rubén, pero me sale así

Julia: Capaz estoy maquinado cosas que no son

Rubito: tal vez.

𝙨𝙬𝙚𝙚𝙩 𝙨𝙖𝙢𝙪𝙚𝙡• 𝙨𝙖𝙢𝙪𝙚𝙡 𝙙𝙚 𝙡𝙪𝙦𝙪𝙚Onde histórias criam vida. Descubra agora