To Hobi or Hope | HOPEV

¦UNO¦

Se dice y se escribe rápido. Suena francamente bien. Parece un ideal en toda relación pero... ¿Es así? ¿Cuál es la diferencia entre emoción y sentimiento? Lo que sentimos es una emoción, sin embargo, los sentimientos suelen surgir más a largo plazo con el roce y el contacto entre personas, entonces...

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—Kim Taehyung, un chico casi universitario de 17 años, proveniente de Daegu, Corea del Sur. Es malditamente popular y acosado no solo gracias a su hermoso y lindo rostro, sino también por su suave y acolchonado trasero que puede volver locos hasta a los pr-— El castaño fue cortado gracias a un repentino gruñido por parte de un pequeño malhumorado sentado a unos metros de él.

—¡¿Suave trasero!? ¡¿Acaso cree usted que a la universidad le importa sobre lo suave y acolchonado que es mi maldito trasero?!—chilló el menor con frustración.

—Bien, bien, como sea, vamos de nuevo.— Dijo el mayor rodando los ojos.

—Kim Taehyung, un chico casi universitario de 18 años proveniente de Daegu, Corea del Sur. Tiene... una relación co- — El mayor fue cortado sin siquiera notarlo, ya que tan solo tocar ese tema le dolía. —Hobi, por última vez; esta no es una de sus tontas películas, ¡¡Es mi presentación para tener un maldito lugar en la universidad!!—

—Cierra el pico niño, ¿Me reclamas aún después de corroborar para tu tonto trabajo?— Contestó el castaño con un ademán de manos algo exagerado y una mueca de tristeza muy falsa en el rostro. Aunque en realidad, lo hacía con total placer, pues le encantaba pasar tiempo con su persona favorita.

—Hyung, por favor no me malinterprete, no quise decir eso, aprecio el valioso tiempo que me está dando, pero por favor ¿Podemos parar?, llevamos haciendo esto por más de una hora y la espalda ya me duele— Suplicó el menor con un puchero en los labios.

—De acuerdo, bonito.— Dijo el el mayor con su auténtica sonrisa soltando un suspiro. —¡Al fin!— Hizo un pequeño festejo el menor estirándose en su asiento soltando uno que otro jadeo gracias a los estiramientos que este se daba en la silla, tal cual un gato.

El castaño se mantenía embobado con cada acción que hiciese el pequeño, como su festejo de minutos antes. Pero claro que no todo era bueno y bonito oh, claro que no.

Min Yoongi, mejor amigo de Jung Hoseok, y actual pareja del tierno Kim Taehyung del cual, Jung está perdidamente enamorado desde tiempos inmemorables, pero se a mantenido así, sin ser correspondido aunque le basta la bonita y estrecha amistad que tiene con el pequeño, no le consta que no le da celos al estar con su mejor amigo, pero él que puede hacer cuando su amado Tae es feliz junto a otro hombre, más específico, con su mejor amigo.

Son felices el uno con el otro... Decirlo dolía, sentía como si cada vez que se dan afecto en frente de él, un pedazo de su corazón cayera.

—Tae, volvamos a comenzar, ya fue demasiado descanso, y como sabes no tengo demasiado tiempo por más que quiera quedarme.— Dijo el mayor retomando su lugar detrás de la cámara.

—Lo sé Hyung, aunque... tal vez podrías decirme qué es lo que siempre te mantiene tan ocupado, ¿no?— El castaño se colocó firme ante su indirecta interrogación del menor.

—¿Por que no puedes decirme?— Preguntó el menor con la esperanza de que en este mismo momento el mayor le dijera eso que no puede decir desde hace tiempo. —¿En que anda metido? Digo, e-es algo malo?— El sentimiento de que su hyung corriera peligro de lo que sea que fuese lo aterraba, pues en estos últimos meses el mayor no había parado de tener salidas inesperadas de las reuniones con sus amigos, para que, al día siguiente se enteren de que está en un vuelo al otro lado del mundo. Sin duda era extraño.

A los demás no les causaba tal intriga, en cambio Taehyung cada día se preguntaba el porque hacía eso, o si tal vez algún día el mayor tendría la confianza suficiente como para contarle lo que tanto desea escuchar, aunque las chances de que eso pase sean muy pocas.

—¿Alguien ordenó pizza?— Se escuchó al fondo de el viejo salón de música cortando la tensión que comenzaba a ser incómoda para los dos. Más para uno que para el otro.

—¡Hola Yoongi!— Saltó el rubio de su asiento, llendo donde se encontraba su novio con una pizza.

—Te extrañé.— Dijo el pelinegro con una pequeña sonrisa extendido de brazos esperando que su pareja le diera un abrazo, pero tal fue su sorpresa al darse cuenta de que la pizza ya no se encontraba en su poder, si no más bien en las garras de un hambriento leonsito. —¡Oye!—

Los dos se mantenían en su pequeña pelea, que ni siquiera notaron cuando Hoseok juntó sus cosas y se dirigió a la puerta de salida por donde minutos antes su mejor amigo había entrado. —Me voy Tae, tu ayuda llegó.— Sin querer oír una respuesta, salió de aquel viejo salón con los ojos cerrados, reprimiéndose el querer golpear a la persona que estaba casi besando a su querido amor.

—Oh cierto, ¡gracias Hobi Hyung!— Se oyó a lo lejos la un poco aguda y tierna voz del pelinegro.

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—¿Por qué Hoseok parecía algo... molesto?— Preguntó el pelinegro con un brazo posado sobre el cuello del rubio, retirándose de donde minutos antes compartían una pizza juntos después de haber terminado el trabajo de Tae. —No lo sé, ¿tu que crees?.— Preguntó el menor. -Quién sabe.- Dijo el mayor alzando los hombros restándole importancia.

Mientras tanto, el castaño se encontraba viendo tal escena con el corazón roto, preguntándose si algún día el rubio se daría cuenta de los grandes sentimientos del mayor, que cada día se debilitaban más.

Y por si lo estaban esperando no hablarán con honoríficos (solo cuando sea necesario) porque me vale un huevo si.

-lael-