Prefacio

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Después de 3 meses de la boda de Juliette y Juan Carlos el Rey Felipe de España abdicó al trono dejando a esta nueva pareja el reinado de España siendo las ovejas negras ambas familias.

Eso implicaba que Juliette renunciara al trono de Londres y ser quitada de la línea de sucesión, al igual que cambiar cosas de su persona.

Tener que casarse por la religión católica y renunciar a su religión del anglicismo, renunciar a sus costumbres, hasta a su propia familia para que su nuevo País esté bien y la acepten.

Ser algo que ella nunca pensó ni siquiera estar cerca.

...

Nunca pensé que fueras a ser de esta manera, me das asco—dice con rabia

—Para esto nos preparan tanto años, creo que estoy haciendo bien mi papel como Reina y si me permites tengo asuntos más importantes—dice Juliette saliendo de la habitación, le rodaron unas cuantas lagrimas pero no se iba dejar quebrar por esto, ha luchado contra muchos para dejarse vencer justo en este momento

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Por Siempre RebeldeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora