Different // Rubegetta

5

Estaban sentados formando un círculo, con una botella vacía girando en el centro, cuando se detuvo, Fargan frotó las manos entre sí.

"Vege, Vegetitta, Vegetta..." murmuró, con la sonrisa malévola formándose en sus labios.

"Me cago en mi desgracia." susurró el susodicho.

"¿Verdad o reto?" inquiere.

"Voy a elegir verdad, tomando en cuenta que hiciste que Auron se tragara un huevo crudo." el de máscara de búho se echo a reír.

"Está bien, está bien." levantó las manos y se encogió de hombros. "¿Quién es mejor? ¿Rubius o Willy?"

Todo el mundo notó el cambio en el ambiente, menos Fargan, que se encontraba demasiado entretenido mirando la expresión del ojimorado.

"¿Mejor en qué?" cuestionó, no quería responder.

Rubius ya se había acomodado el cabello blanco tres veces en aquel corto período de tiempo, Mangel lo golpeó suavemente con su hombro, y el más alto tuvo que dedicarle una sonrisa forzada. Solía ser muy inseguro, aunque no le gustara, en especial con Willy, después de todo, todos esos años de relación que había tenido con Vegetta no se iban a esfumar de un día para otro.

"Ya sabes..." continúo Fargan, subiendo y bajando las cejas repetidamente. "en eso." El ojimorado carraspeó, y dedicó un rápido vistazo a Rubius, y luego otro a Willy. "Está bien si dices que Willy, yo puedo corroborar eso."

Recibió un golpe en el abdomen de parte del susodicho, y se echó a reír.

"Bueno, con Willy era algo..." sonrió, y el ambiente se volvió mucho más tenso, nadie dijo nada durante unos instantes, hasta que Rubius habló.

"F" murmuró, estaba tratando de reírse, pero no podía. "¿Podemos darle la vuelta a la botella ya?"

"No, no, no." se apresuró el ojimorado. "Me refiero a qu~"

"Mejor déjalo así, macho." aconsejó Alex, poniendo la mano sobre la botella. "No trates de~"

"Que no, tío, que solamente es... diferente." explicó, pero la expresión de Rubius seguía igual de dolida que antes. "Hey, Rubius, chiqui."

"Debo ir a..." tuvo que pasar saliva, antes de ponerse de pie. "a ver a Juan Carlos, no estoy seguro de si dejé bien cerrada la puerta de casa."

"Rubén..." volvió a llamar, pero el susodicho hizo un movimiento vago con la mano, ya de espaldas.

"Está bien, Samuel, sigan jugando." entonces se marchó, Mangel y Alex se dedicaron una mirada, después de todo, eran ellos quienes más lo conocían. Ambos se pusieron de pie, Mangel después de susurrar algo en el oído de Lolito y plantarle un suave beso en la mejilla.