07

239 30 0
                                    

Ninguna relación amorosa, por mucho empeño que se le ponga llega a ser perfecta. Las altas y bajas estarán ahí presentes, tan solo para recordarte que la fragilidad humana puede ser tomada en dos vías porque al fin de cuentas, en una relación esta la unión de dos personas, con diferentes personalidades y formas de pensar. Por desgracia, Park Jimin tuvo que aprender aquello de la manera más dolorosa posible.

— ¡Hyung!...

— Jimin, sabes que me hace gracia que me llames "hyung" si solo nos llevamos un año de diferencia, tú puedes decirme solo Namjoon.

Las mejillas de Jimin se tiñeron de rojo debido a la suave caricia que había dejado el alfa sobre su rostro, especialmente al recordar la única vez que se había olvidado del honorifico, cuando Namjoon lo había ayudado con su primer celo tan solo unas semanas atrás.

— Es por respecto hyu-Namjoon — dijo Jimin finalmente después de unos segundos.

— Así es mejor — comentó Namjoon antes de besar rápidamente los abultados labios de Jimin.

— Lo extrañé — alegó con un puchero que lo hacía lucir realmente tierno.

— Y yo a ti Jiminie, no tienes una idea de cuánto.

Caminaron tomados de las manos hasta llegar a un lugar lo suficientemente apartado, otorgándoles la privacidad que tanto necesitaban. Namjoon necesitaba decirle algo realmente importante a Jimin.

— Esta semana no vino a la escuela, puedo preguntar ¿Por qué? — el menor cuestionó, dando a demostrar así lo mucho que lo había extrañado.

— De hecho, es justo por eso que te pedí que saliéramos hoy. Tengo que contarte algo...

Jimin solo tenía catorce años cuando se enamoró por primera vez, si, podría decirse que era un enamoramiento pasajero, pero vamos, que todos en algún momento lo han tenido. La cuestión es cuando aquel amor te hace daño a tal punto que sientes que tu corazón no podrá volver a amar de la misma forma a alguien más. Y aunque Jimin y Namjoon eran aún muy jóvenes para comprenderlo, también estaban siendo lo suficiente valientes para enfrentar lo difícil que era la carrera del amor.

—... ¿Entonces? — Jimin se atrevió a preguntar con la preocupación marcando su rostro después de un muy largo silencio.

— Con la muerte de mi abuelito, mi papá ha decidido que lo mejor es que vayamos a vivir a la casa de la abuela, sobre todo porque no quiere que le vaya a pasar algo malo, después de todo, ellos estuvieron juntos durante cincuenta años y mi abuelita ya es una persona mayor.

— ¿Cincuenta años?

— Eran almas predestinadas Jiminie, ellos se conocieron justo a nuestra edad y estuvieron juntos hasta... Bueno, ya sabes.

Las lágrimas que habían estado conteniendo, finalmente se vieron libres, Namjoon al recordar a su abuelo, quien había fallecido tan solo unos días atrás, mientras que Jimin lo hizo al comprender lo que aquello significaba. Namjoon iba a mudarse justo al otro lado del país, a kilómetros de distancia para no volver jamás.

— Voy a extrañarte demasiado, pequeño, mi Jiminie — objetó el mayor al tiempo que limpiaba las lágrimas del menor con sus manos, sintiendo al mismo tiempo como su corazón se rompía en pedazos por no ser lo suficiente mayor para quedarse con él, después de todo él era un adolescente también.

Con un último abrazo junto a un último beso fue como Namjoon dejó a Jimin una tarde de verano, ambos sintiendo que una parte de ellos se quedaba con el otro. Sin embargo, lo que ninguno de los dos esperó que sucediera — al menos no, después de una separación de esa magnitud —, fue lo que aconteció exactamente dos meses después, cuando el recuerdo de Namjoon apenas y comenzaba a desvanecerse entre una bruma de bellos recuerdos, para convertirse en memorias amargas y tristes que harían madurar a Jimin mucho más rápido de lo normal.

Perfect Illusion [Yoonmin/Omegaverse]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora