Acto 3

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"Bajo la pesada carga del amor me hundo"

-Desastre!- gritó el director acomodándose los lentes negros amenazante hacia los dos muchachos que se encontraban en el escenario -¿dónde está esa pasión que mostraron en la audición?-

Ambos chicos voltearon la mirada avergonzados incapaces de continuar con el papel. Después de todo, Craig seguía siendo Craig y Tweek seguía siendo Tweek.

La escena del beso, una parte fundamental de la obra que el pelinegro había estado esperando al momento de audicionar, aunque le avergonzara admitirlo, pero por más que lo intentara no podía evitar sentirse nervioso e incluso asfixiado. Y, por otro lado, para Tweek, que estaba temblando más que de costumbre, tener a su amigo tan cerca le provocaban sensaciones que no había sentido antes, confundiéndolo y haciéndolo equivocarse en cada linea que se había aprendido de memoria.

-Bien, una vez más!- ordenó el director mientras aplaudía fuertemente para llamar la atención de cada uno en el salón de ensayo.

Rubio y pelinegro se miraron decididos y desafiantes, ninguno de los dos quería defraudar al otro. Sin embargo, el ruido de la voces de sus compañeros animándolos, además de las risas y silbidos por parte de su equipo solo los entorpecía más.

Craig decidido a dar el primer paso y se inclinó sobre el rubio quien se sonrojó un poco por la acción. Todo hubiera salido bien de no ser por un cartel de Clyde que decía "Con lengua" con letras en rojo y varios corazones. Tweek se puso nervioso nuevamente y empujó al pelinegro haciéndolo caer de trasero al piso, sudó frío, realmente no soportaba toda la presión que sentía y solo encontró solución en correr fuera del salón aún como vestido y peluca rubia, dejando pasmados a más de uno.

El joven ojiazul corrió por toda la escuela, avergonzado escuchando las voces a su alrededor como un viento fuerte contra sus oídos, solo ruido. El recuerdo de la mirada de sorpresa a través de las esmeraldas de su compañero al momento de empujarlo solo hicieron que su vergüenza aumentara y luego de una ardua carrera en tacones decidió meterse al almacén del concerje. Trató de calmarse respirando profundamente el olor de los químicos de limpieza que en a el momento parecían ser la mejor medicina para los nervios.

-te encontré- la puerta del almacén se abrió sorprendiendo al menor. La negra cabellera del ojiesmeralda se movió hasta donde él, respaldándose contra el muro en el cual ahora ambos se encontraban sentados.

Pasaron sentados unos eternos segundos en silencio que el rubio no pudo soportar -¿n..no me gritarás?-

-¿debería hacerlo?- lo miró por el rabillo del ojo, notando los zafiros que lo observaban entre dudaa y nervios.

-arruiné la escena, te empujé y escape trasvestido a un almacén a respirar químicos de dudosa procedencia- ocultó su mirada tras su flequillo esperando el reproche del más alto, pero este nunca llegó.

La estrepitosa risa del pelinegro sorprendió a Tweek. Nunca desde que se conocieron lo había visto reírse, jamás, pero ahora, el ojiesmeralda lo apuntaba mientras se agarraba del estomago dejando a un rubio totalmente es shock.

-n..no es gracioso! Craig- dijo todo avergonzado mientras analizaba toda su conversación con el mayor.

-Claro que lo es- Craig se calmó mientras el rubio aun lo miraba con recelo.

Antes de que el chico con vestido pudiera volver a replicar, el pelinegro le quito la peluca y se aproximó rápidamente a su rostro robándole un beso al rubio. No era más que un casto beso donde ninguno de los dos parecía querer moverse, tan solo disfrutando de la calides de los labios del otro. Duró unos minutos hasta que el de esmeraldas se separó dejando al rubio en la misma posición en la cual había consumado el acto.

Los ojos azules del rubio temblaron confundidos, aturdidos y finalmente emocionados por aquél fugaz beso. Por un momento pensó que el fuerte olor a químicos lo había drogado haciéndolo ver y sentir cosas que no eran posibles.

-creo que ahora podemos realizar el papel- dijo el pelinegro mirando en una dirección contraria a la del rubio, tratando de evitar su mirada.

-fu..fue mi primer beso!!- gritó histérico sorprendiendo al pelinegro -idiota!-

-¿en..es en serio?!- preguntó asustado al ver la cara de vergüenza de Tweek.

-si!- gritó mientras se inclinaba para tratar de golpear al mayor en son de defender su honor perdido.

-también el mio!- dijo tratando de evitar los golpes para nada intencionalmente fuertes del rubio.

-eso es peor!- se alteró, ocultando las ganas de reírse y tratando de mantenerse serio frente a su compañero.

-¿por qué?!- se defendió -la obra requería un beso, íbamos a besarnos de todas formas-

-no fue para nada romántico!- se puso la peluca usando su voz de fémina que había estado practicando durante semanas.
Las risas entre ambos chicos los relajó y les ayudó a sobrellevar la vergüenza que ambos sentían al percatarse de que les había fustado el beso -quiero mis girasoles y mi café, ¿dónde está mi café Craig?!-

-Bien entonces!, tengamos una cita después de la obra!- le siguió el juego, pero una parte de él quería que eso fuera verdad -te compraré tus girasoles y tu puto café! Y lo disfrutarás!-

-Bien! Y después me besarás y haremos como que esto nunca pasó- Tweek sonrió internamente recordando como solía pelear de esta forma con el pelinegro cuando aún no se llevaban bien. Le pareció nostálgico que esta vez ambos se estén sonriendo en vez de llegar a los golpes.

-Bien!- suspiró aliviado al ver nuevamente la cara animada del menor, al parecer fue una buena idea seguirlo mientras este trataba de no atropellar a todas las personas que se encontraban en su camino al momento de correr por los pasillos.

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-Excelente! esa es la pasión que estaba buscando- gritó asombrado el director mientras aplaudía junto con los demás actores que se habían quedado embobados por la escena realizada por sus compañeros -recuerden jovenes, mañana es el gran día, no me fallen a menos que quieran vivir un gran infierno hasta el momento de su graduación- amenazó para finalmente cerrar su libreta de apuntes y marcharse acompañado por su asistente, Butters.

-Wow! chicos por un minuto pensé que eran una pareja real- Token abrazo a sus compañeros por los hombros -gracias a ustedes Nicole está más que emocionada, nada mejor para prender a una mujer que dos chicos apuestos besándose, mis puntos se desbordan-

-no sé si pueda hacer lo mismo frente a un publico de más de cuatrocientas personas- se tapó la cara mientras agarraba parte de su cabellera rubia -soy un cobarde-

-nah~ eres incomodo, timido, no tienes mucha confianza en ti mismo, piensas demadiado las cosas, no tienes experiencia y tiemblas por todo, pero no eres un cobarde- Clyde recibió un fuerte golpe por parte de Craig quien lo veía amenazante, cosa que no pudieron percibirlo ni Tweek ni Token, solo el pobre castaño que ahora tenia ganas de llorar.

-Clyde tiene razón Tweek, no eres un cobarde, eres nuestro jugador estrella- animó el moreno levantando un poco la confianza y el animo del menor -así que solo has tu mejor esfuerzo-

-igual si el beso no convence, que sea con leng...-no pudo terminar pues la mirada asesina del pelinegro fue clavada en él -lentitud si lentitud!-

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Romeo and Juliet || CreekWhere stories live. Discover now