Capítulo 4.

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***
Yongsun caminó a través de las puertas de cristal que abrían paso al interior del edificio principal de <MOON> C.A.

Se sentía confiada, y se notaba. El verse tan segura de sí misma sería un punto a favor en cualquier entrevista.

Se acercó a la recepción y la chica que se encontraba sentada detrás del escritorio la observó con una sonrisa cordial. -Buenos días, señorita. ¿Qué se le ofrece?-Preguntó amable la chica.

-Buenos días, vengo a una entrevista de trabajo. Si es tan amable de indicarme hacia dónde debo dirigirme...-Yongsun Dijo, mostrando sus dientes en aquella sonrisa encantadora que al parecer, caracterizaba a Las Kim.

La recepcionista dejó escapar una risita nerviosa y de manera torpe se puso de pie, asintiendo fugazmente. Amablemente le pidió que la siguiera y así lo hizo.

Caminaron el largo pasillo en silencio, hasta llegar al ascensor en el que Yongsun se apresuró a presionar el botón mostrando caballerismo hacía la chica, que se sonrojó mientras hacía una reverencia de agradecimiento.

Yongsun miraba divertida la situación, llenándose de aún más confianza por lo rápido que podía hacer caer a una chica.

El ascensor por fin llegó y una idea maliciosa apareció junto a él, en la cabeza de la Kim mayor.

Ambas mujeres entraron, y para la recepcionista empezó a hacer más calor de lo normal en ese espacio tan reducido, además de que cometió el error de mirar a Yongsun, quien había empezado a desabotonar su blazer lentamente y la observaba con una mirada sensual.

Yongsun se mordió el labio al escuchar la respiración agitada de su contraria y decidió dejar de molestarla, pues pronto llegarían al piso de la oficina del jefe y no quería que malpensase la situación. Pero para la mujer a su lado no fue tan sencillo borrar de su mente posibles escenarios lujuriosos que inundaban su mente y tal vez... Otra parte de su cuerpo.

-D-disculpe s-señorita...-Pronunció la joven, pero fue interrumpida por el sonido del ascensor, anunciando la llegada al piso deseado.

-Será en otro momento.-Yongsun cortó la conversación, ansiosa de llegar a entrevistarse con la persona encargada.

-En ésta puerta es... Mucha suerte.-La recepcionista dijo, abandonando el lugar.

Yongsun suspiró, dejando atrás el leve nerviosismo que le ocasionó estar frente a la oficina Presidencial de la empresa. Tocó un par de veces la puerta y escuchó un "Adelante".

Ingresó a la amplia y lujosa habitación a paso seguro, admirando momentáneamente la colección de libros ordenados Alfabéticamente en la biblioteca que allí se encontraba, los cuadros de arte colgados con perfecta simetría en las paredes, los muebles de cuero fino, las plantas de la prosperidad, la gran vista de la ciudad, incluso hasta el escritorio de cristal reforzado era impresionante. Pero nada tan impresionante como la imponente mujer que se encontraba sentada en la típica silla de empresario importante, con un semblante serio.

La miraba de manera indescifrable, de arriba hacia abajo, como tratando de leerla, o de descubrir todo sobre su vida. Yongsun debe admitir, que por primera vez en su vida, se sintió intimidada.

-¿Y bien? ¿Es usted la señorita Kim Yongsun?-Le preguntó, corrigiendo su postura. Su voz le erizó la piel.

Mordió su labio, recobrando su confianza y sonriendo a más no poder de forma deslumbrante.

-Así es, un placer conocerla, señora. -Hizo una reverencia respetuosa.

-Moon Byulyi, la dueña y presidenta de éste lugar. Y no me diga señora, según su expediente curricular soy un año menor que usted, señorita.-Respondió la, para Yongsun, Christian Grey coreana.

-De todas maneras debo mostrar respeto ante mi posible nueva jefa.-

-Háblame de tu conocimiento, tengo curiosidad.-Interrogó la presidenta Moon.

-Pues, me enorgullece decir que soy graduada como Licenciada en Economía, Banca y Finanzas, con honores; pues conseguí las notas perfectas, siendo homenajeada con el título de Magna Cumme Laude en mi alma mater. Señorita.- Yongsun se sonrojó, avergonzada por alardear de sus logros.

-Vaya, es impresionante -Byul leía los certificados legales de lo que Yong mencionaba- Aquí dice también que tienes 11 hermanas. ¿Es esa la razón para optar por un trabajo?-Byul la miró a los ojos.

-... Sí, señorita Byulyi. Tengo 11 hermanas menores y quiero darles lo mejor.-Yongsun flaqueó en su seguridad. Y esto no pasó desapercibido por la contraria.

-He estado pensado y necesito a mi lado a alguien que sea mi mano derecha en los negocios, alguien que domine el tema a la perfección, pero que también sea sensible y esté dispuesto a cualquier cosa para sacar adelante ésta empresa. ¿Te gustaría convertirte en mi socia? -La presidenta preguntó- Sé que suena extraño, pero decidí arriesgarme hace 6 años al abrir ésta empresa, y hoy decido arriesgarme contigo. Te daré un 5% de las acciones y poco a poco podrás ir comprando más con tus pagos. ¿Qué dices?-

Yongsun la miró boquiabierta sin saber cómo reaccionar. Tomó unos cuantos segundos el recomponerse y pensar en una respuesta coherente. -No sé si es muy apresurado, pero las oportunidades no se presentan 2 veces en la vida. Así que sí, Señorita Moon. Acepto.-

-Es un honor tenerte como socia, Yongsun. Y por favor llámame Moonbyul.-Dijo la peligris extendiendo su mano hacia la rubia.

-Muchas gracias, es un honor ser su socia, Moonbyul. Entonces tú puedes llamarme Solar.-Le aceptó el saludo y le sonrió de manera amable.

-Está bien Solar, entonces... Como primera misión, tengo hambre. Vamos a comer y te dejo en tu casa para que descanses. Mañana firmarás el contrato y el traspaso de las acciones. ¿Estás de acuerdo? -Moonbyul sonrió. Yongsun casi se desmaya.

Solar asintió.

***

-La comida estuvo deliciosa, gracias Moon, prometo pagarte todo.-La rubia agradeció una vez más, cuando llegaron a la puerta de su casa.

Moonbyul sonrió con ternura. -No tienes por qué pagarme por la comida, tómalo como una celebración y nuestra primera comida como socias.-

-Bueno, viéndolo de ese modo, no me hace sentir tan mal.-Solar rió.-Gracias por traerme, eres muy amable... Y gracias por la grandiosa oportunidad que me has dado.-

-No me agradezcas, yo sacaré mayor beneficio de esto. -Byul rió también- Ten una linda tarde, Solarssi.-Se despidió con la mano, entrando a su auto para irse.

-Ten una linda tarde igual, Byul.-Le sonrió, y se dio la vuelta para entrar a casa. Siendo recibida por Hyuna, quien la miraba curiosa.

Pero ya tendría tiempo para explicarle... Justo en ese momento estaba demasiado feliz.

*

Las Kim.Where stories live. Discover now