❤Celos que Matan// Serquel_au_story//La_Casa_de_Papel_fanfic

Capítulo 5

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🖎 Aquí les traigo el capítulo no 5 ✍

Me ha quedado un poco más largo de lo usual pero es porque traté de cargarlo bastante. Espero que haya valido la pena y me lo hagan saber en algún comentario.

Cuídense mucho en estos tiempos difíciles. 💖

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El agua le resbalaba por la piel como si su cuerpo fuese la escultura de una perfecta fuente tallada a mano. Nunca unos músculos y espalda ancha habían lucido en mejor sintonía con las gotas calientes que brotaban de la ducha.

Pasó sus dedos echándose hacia atrás los mechones en negros que le cubrían la frente y mojó todo su rostro. Pensando en que quedarse en el hotel no había sido la mejor decisión que había tomado.

Cerró la llave de la ducha y con el cuerpo escurriendo se anudó la toalla a su cintura.

El móvil vibró, no recordaba por qué lo había dejado en silencio pero así era. Se acercó, la cabeza le pesaba horrible, como si fuese el resultado de una fatídica resaca que quisiera acabarlo. El agua aún manteniendo húmeda su piel, y el frío en la habitación hacía que sus músculos se tensaran, todo cual escena de película. Encendió el movil, este había parado de vibrar hacía unos segundos y acababa de recibir un mensaje de texto. RAQUEL. Era el contacto:

- ¿Salimos esta noche? Te extraño mucho.

Sonrió, y se vio atado nada más de ver lo sexy que sonaban sus palabras incluso estando escritas. Aunque no entendía bien la parte de 'te extraño'. Si sólo habían estado separados una hora ¿no? La misma que él escogió para tomar una siesta y meterse luego a la ducha. Pero de todas formas no podía ser indiferente a sus palabras.

- Claro, y me viene perfecto para la sorpresa que te tengo. Nos vemos en el lobby. Te amo.

Terminó de arreglarse. Se puso un atuendo casual y bajó al lobby a por un café. Supuso que Raquel debía andar por algún lugar paseando junto a su ex-compañero de universidad y comprendió que era el momento perfecto para despejar un poco su mente.

Nada más abrirse las compuertas del ascensor dos tazas de café con crema chocaron con el frente de su blazer.

- ¡Uy! ¡Lo siento! - Sonrió la desprevenida mientras daba un pequeño lamido al chorro dulce de café que resbaló por una de las tazas.

- ¿Qué haces? - Preguntó Sergio a Laura mirándose la mancha oscura en la ropa.

- Quería sorprenderte llevándote un poco de café con leche de avellanas y edulcorante a la habitación. - Sonrió arqueando una ceja. - Científicos dicen que es una de las mejores maneras de dar los buenos días.

- Ehm...Gracias. - Titubeó y tomó cordialmente la taza de café. ¿Buenos días? Pero si recordaba el día de tarde, aunque en realidad no se había molestado en ver la hora antes de salir. Sonrió y mojó sus labios con el café saboreando el dulzor de la crema y llegando a probar solo un poco de la mitad de café. - Oye, te vas a reír pero...no sé qué me ha pasado pero he perdido por completo la noción del tiempo.

- ¿En serio? - Dijo ella probando también su café.

- Sí. - Soltó una risa. - Desperté hace unos minutos y todavía pensaba que era de tarde, no que había pasado toda una noche.

- Bueno, una noche...- Bajó la mirada lento y sonrió. - Y un poco más, también.

Él la miró un momento con cara de circunstancias y frunció el ceño.