Capítulo 17

40 9 0
                                    


-¿Estás seguro de esto?- preguntó Yoongi, quien miraba hacia cualquier sitio que no fuera su novio.

-Tengo que volver a casa...- susurró Jungkook.

Habían pasado varios días desde la muerte de la madre de Jungkook, y el menor los había pasado en un estado de trance. Incluso Yoongi tuvo que llevarlo a su casa, pues, después de que sus amigo se fueron, Jungkook no parecía dispuesto a levantarse de la silla por sí solo.

Durante esos días, Jungkook se había negado a salir de la cama. Yoongi lo ayudaba a comer, pero el moreno tampoco comía demasiado.

Para alivio de Yoongi, aquella mañana había parecido volver en sí. Se había levantado por sí solo, había comido todo lo que le dio Yoongi y se había duchado. Después de la comida, Jungkook le pidió a su pareja que le acompañara de vuelta a casa.

-Debo volver.- asintió. Parecía estar convenciéndose a sí mismo.- No puedo huir de esto.

En el viaje a la playa Jungkook se había prometido que enfrentaría a su padre. Al volver lo había hecho, pero no había ganado. Por lo tanto, debía volver a intentarlo. Aunque tuviese que pasarse el resto de su vida intentándolo, lo haría.

-A veces huir no tiene por qué ser algo malo. A veces es la única forma de sobrevivir.

Yoongi se sorprendió de sus propias palabras. Había hablado sin pensar. Había dicho lo primero que sintió que debía decir. Entonces se preguntó algo que le provocó escalofríos:

"¿Eso lo había dicho para Jungkook, o para mí?"

-Los que huyen son unos cobardes.- murmuró Jungkook, sin mirarle.

Él había estado huyendo toda su vida. ¿Era un cobarde por ello?. Yoongi no lo sabía. Tal vez sí. Primero huyó de su madre, luego de su muerte, de su padre, de sus amigos, del baloncesto, de la música, el piano... de su propia naturaleza.

-No me preocupa mi padrastro, ¿sabes?- Jungkook lo sacó de sus propios pensamientos, los cuales comenzaban a ahogarle.

-¿Qué te asusta?

-El fantasma de mi madre...- dijo el moreno con un hilo de voz.- Sigo sintiéndome culpable.

-No deberías culparte por algo que no has hecho.

-Lo sé...- suspiró, mirando directamente a los ojos de Yoongi.- Estoy seguro de que tú me ayudarás a ello.

Entonces Yoongi paró de seco y miró a Jungkook.

-¿Ayudarte?

¿Cómo podía él ayudarle, cuando ni él mismo había superado la muerte de su propia madre? ¿Cómo podía él ayudarle, si todavía pasaba noches despiertas comiéndose la cabeza?

¿Cómo podía él ayudarle, si lo único que le había hecho era hacerle mal?

Yoongi recordó la pelea que tuvo con Jungkook en el viaje, la conversación con su padre, sus palabras cuando habló con su madre. Incluso recordó la primera noche después de la muerte de la madre del menor, la había pasado en vela pensando en todo aquello.

-Yo no puedo ayudarte Jungkook...

-Sí que puedes.- Jungkook lo miró confuso.- Tú has pasado lo mismo que yo.

-No, Jungkook.- la voz del pelinegro sonaba ahogada y débil, sus ojos habían comenzado a aguarse y sus manos se cerraban en puños.- Yo no he salido de la penumbra.

Jungkook guardó silencio por unos segundos. Luego, tras haberlo pensado mucho, trató de acercarse, pero Yoongi retrocedió.

-No puedo ayudarte...- murmuró.- No por el momento, o te hundiré conmigo.

You never walk aloneWhere stories live. Discover now