Una Promesa~ (Mikannie)

•Capítulo 3: Donde Mikasa visita a Annie por segunda vez.•

《¿Por qué Eren siempre se aleja de nosotros?》 Fue lo que le preguntó a Armin cuando Bertholdt y Reiner lograron secuestrarlo.

《- Es verdad. Siempre echa a correr  él solo dejándonos atrás. De seguro está destinado a hacerlo. 》 Fue la respuesta de su amigo.

《A mí me basta con estar a su lado. Sólo eso》. Fue todo lo que pudo decir mientras pequeñas lágrimas comenzaban a salir de sus oscuros ojos. Y justo aquel día tuvieron que soportar una perdida más.

¿Por qué todo tenía que ser tan complicado?

-- ¿Es que acaso el mundo nunca dejará de ser cruel?-- Murmuró Mikasa sentándose en su lugar habitual, Armin se encontraba a su lado en silencio, observando el pedazo de pan que tenía entre los dedos. Se encogió ligeramente al escuchar a Mikasa, pero no dijo nada.

Aquella mañana desayunaron todos en silencio, Eren, quien solía sentarse junto a sus amigos, sólo tomó una pieza de pan y se dirigió a  la salida del castillo. A partir de ese día su distanciamiento fue más y más evidente, a pesar de que Mikasa, sin poder evitarlo, siempre iba detrás de él intentando hacerle hablar, pero Eren sólo le ignoraba; sumergido entre sus lúgubres pensamientos.

Ellos estaban destinados a estar junto a Eren, era de lo que se habían convencido aquel día que cambió el rumbo de las cosas, sin embargo, eso sólo parecía ser acertado en el campo de batalla, pues en casa no había un Eren al que recurrir, sólo un chico atormentado que poco a poco perdía la esperanza.

Mikasa no era buena ayudando a otros, pero con Eren siempre daba su mejor esfuerzo, era a la única persona a la que le sonreía abiertamente, el único por el que lloraba, el único con quien deseaba caminar siempre, a pesar de que él era fuerte ahora, quería seguir protegiéndole, pero con el pasar de los días se  vio a sí misma más y más sola, tan sólo pudiéndose aferrar a su desgastada bufanda y a su soledad, pensando en el chico que todo el tiempo estaba en su cabeza, preocupándose por él cada día.

-- ¿Mikasa?-- Preguntó extrañado Armin una vez cuando la acompañaba a por trozos de leña, aquel día el equipo de reconocimiento había ido fuera de  las murallas sin ellos, ya que no requerían de sus habilidades en la batalla. Mikasa se había detenido de repente y apretaba la leña entre sus manos fuertemente.

Eren caminaba solo arrastrando sus pies a lo lejos, ignorando toda presencia.

-- ¿Cuánto más seguirá así?-- Preguntó Mikasa bajando la mirada a sus pies, Armin suspiró con tristeza y se acercó a ella.

-- Siempre hemos estado juntos, quizá sólo necesita un buen tiempo para pensar, eso es todo, pronto estaremos los tres de nuevo.--

Mikasa no dijo nada, pero al levantar los ojos hacia Eren de nuevo, se sintió más solitaria que nunca.

***

-- Tanta paz nunca significa algo bueno.-- Decía el Capitán Levi a Hange mientras caminaban de vuelta al interior del castillo una vez habían dejado a los caballos en los establos.

-- Creo que la merecemos. Se nos viene una fuerte batalla, es cuestión de días para que aquella bestia venga tras Eren junto a su poder de Titán. Llega a ser aterrador.-- Respondió la comandante.

-- Yo mismo lo haré pedazos.-- Fue todo lo que dijo el Capitán.

Finalmente entraron al castillo, siendo recibidos por el olor de la comida que provenía desde la cocina y donde seguramente Sasha ya se encontraba intentando probar alguna cosa, siendo esta regañada  por Connie.