Capítulo 14

67 7 6
                                    

Apenas me desperté, sentí como una luz segadora me pegaba en toda la cara, solte un gruñido y me incliné terminando sentado.

Pestañe varías veces para que mi vista dejara de estar borrosa y ver bien donde me encontraba, mire a mi alrededor, era una habitación blanca.

-¿Dónde estoy?- me pregunté a mi mismo.

Me mire, estaba en una camilla y tenía vendado todo el cuerpo, también vestía una bata azul, tenía una especie de jeringa pegada a un tubo con una especie de suero inyectada encima de mi mano izquierda.

Me toqué la cara, tenía unos tubos metidos por mi fosas nasales, y había una máquina que medía mi pulso a mi lado derecho.

De repente sentí un fuerte dolor de cabeza haciendo que suelte un quejido. Después de unos segunos se calmo.

-Al parecer... Estoy en un hospital.

En ningún otro lado podían haber este tipo de cosas. Intenté levantarme pero todo el cuerpo aún me dolía.

Lo que me pareció raro es que no me sentía tan débil como antes. No tenía tanta hambre y deshidratado, me pareció raro ya que no recuerdo nada después de... Mierda, ¡Amy!

Rápidamente con la fuerza que tengo me levanté de la camilla, me tambalee un poco pero pude mantenerme en pie.

Me quité los tubos de mi nariz y use el tubo del suero para sostenerme, comencé a caminar usando el tubo que por suerte tenía ruedas. Me dirigía a la única puerta que se encontraba aquí, pero alguien la abrió antes que yo, dejando a mi vista lo que parecía ser una enfermera.

Venía con una especie de tubo con algo dentro de él, me miró con sorpresa pero enseguida se le formó una sonrisa, -Joven Steel, me alegra ver que al fin se ha despertado. Pero aún no puede levantarse, por favor vuelva a la camilla mientras le busco algo para comer.- estuvo a punto de irse pero le hablé antes de que se fuera.

-¡Espere! ¿Dónde esta Amy? O mejor dicho, ¿cómo se encuentra? ¿está bien? Por favor digame.- rogué.

Ella soltó un suspiro, -Antes de eso, vuelva a la camilla, vendré con comida junto a tu doctor y él te responderá todas tus preguntas ¿si?- dijo con una sonrisa amable.

Yo solo asentí y ella salió de la habitación. Me dirigí nuevamente a la camilla y me acosté, espere varios minutos, donde empecé a desesperarme, estaba a punto de volver a ponerme de pie cuando abrieron la puerta.

Era la mano enfermera de antes, junto a una mesa rodante con un plato de comida encima y atrás de ella estaba quien parecía ser el doctor.

Ella se acercó a mi, puso una especie de mesa que se ajustaba con la camilla y encima puso el plato de comida, -Buen provecho.- me dijo para después salir de la habitación y dejarme a solas con el doctor, quien estaba revisando unos papeles.

Yo empecé a comer tranquilo, lo miraba de reojo para ver si estaba por hablar pero ni señales de eso. Terminé por comer y allí fue cuando me miró, -¿Estaba buena?- preguntó, yo solo asentí, -Me alegra escuchar eso.- tomó una silla con ruedas que estaba por allí, se sentó y se acercó a mí, -Bueno Rubén, yo soy el doctor Carlos, fui yo quien te atendió.

Estaba a punto de seguir hablando cuando yo lo interrumpí, -¡Yo no importo, ¿cómo esta Amy?!- solté de golpe.

El doctor me miró con sorpresa para después soltar una pequeña risa, -Aquí todos los pacientes importan por igual joven Rubén.- yo lo miraba dándole a entender que eso no era lo que quería escuchar. El solo soltó un suspiro y me respondió, -La jovencita Amy está bien. La operación fue todo un éxito, pero aún no se ha despertado. Pero no creo que tarde mucho, le doy un día más.- explicó calmadamente.

Bajo Las Estrellas © [Terminada ✔️]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora