Capítulo 17

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•Rubén

La señora Julia. Sin duda una señora muy agradable, amable y buena onda como dicen algunos. Cuándo me llamó inmediatamente se dio cuenta de mi cambio.

Estaba más limpio y cuidado que antes, estaba sorprendida por el gran cambio que había en mí, yo la verdad no lo notaba ya que estoy acostumbrado a verme todos los días en el espejo de la misma manera, pero supongo que ella tenía razón.

Me llevó a la cocina como la ves pasada, ofreciéndome nuevamente una manzana, sonreí al recordar aquel día. Le agradecí, pero no iba a dejarme ir sin antes contarle todos los hechos que han transcurrido los últimos días.

No le iba a contar todo con lujos y detalles, solo resumí la historia resaltando las cosas más importantes. Que mi padre ahora estaba en prisión, que ahora vivo una vida tranquila con mi tía y que Amy ya esta mucho mejor según los doctores.

Julia estaba sorprendida por lo de Amy, pero le alivia el saber que ella esta bien. Por otro lado estaba muy contenta de que mi infierno había terminado, después de que yo había perdido todas las esperanzas en aquellos días.

—¡Te lo dije! Sabía que tarde o temprano todo tu sufrimiento iba a terminar.— decía muy feliz de que sus palabras se hayan vuelto realidad.

Yo asentí con una sonrisa sincera, —Y tenías razón, me alegra ver que alguien a pesar de todo siempre pensó que al final todo saldría bien.

—La fé muchacho, la fé hace milagros. Lo único que debes tener y no te puede hacer falta, es la fé Rubén.

Fé. Sin duda una palabra muy usada en las personas mayores como Julia, al parecer ella tiene una vida religiosa, ya que los únicos que hablan sobre eso, son los creyentes.

Yo en lo personal, no se en que creer. Sin en el destino, las coincidencias o si en verdad hay un Dios en el cielo que observa todo. A pesar de que aquella noche pareciera que mi madre de alguna manera me dio una señal, siento que esta en un lugar tranquila y llena de paz. Quizás es el cielo, o tal vez otra cosa que no conocemos y la única manera de descubrirlo es pasando al otro mundo. Pero lo único que de lo que estoy seguro y siento en mi interior, es que mi madre me observa desde algún lugar.

Después de hablar por unos minutos más con Julia me despedí para ir a mi salón de clases, en estos momentos no puedo perder ninguna clase, ya estoy muy atrasado.

Al llegar noto que la siguiente materia es... ¿Química? Esperen, ¿Qué día es hoy? Diablos, tan mal habré quedado que no recuerdo el orden de las materias.

Voy lo más rápido que puedo a mi puesto ignorando las miradas de los demás, quiero centrarme en la clase sin darle mucha importancia a mi alrededor, pero entonces el profesor dice las palabras que menos quería escuchar en esos momentos.

—Ok alumnos, espero que hayan estudiado para el exámen de hoy.— dijo como si nada.

Hundí mi cara en las hojas de mi cuaderno, estoy perdido. De verdad que este regreso a la universidad no podía ser peor.

Miro al profesor a ver si puede hacer una excepción conmigo pero no se toma ni la molestia en verme ni siquiera de reojo. Solté un suspiro de frustración.

En esos momentos alguien entra al salón pero no me tomo la molestia de saber quien es. Entonces siento como alguien se sienta en el puesto a mi lado, curioso y sorprendido saco mi cabeza de mi cuaderno para observar a la persona sentada a mi lado.

La verdad tenía una pequeña esperanza de que fuese Amy, o al menos Natalia, pero jamás pensé que él sería quien se sentara a mi lado.

—Ray.— murmuré aún sin creermelo.

Bajo Las Estrellas © [Terminada ✔️]Where stories live. Discover now