Lentamente abrí los ojos, parpadeando repetitivamente para acostumbrarme a la potente luz de la sala.
Mis ojos estaban cansados y mi vista seguía siendo un poco borrosa.
Intenté levantar la cabeza, pero se me hizo imposible y dejé escapar un quejido por el dolor que me provocaba.
La puerta se abrió, un doctor entró en la habitación con unos cuantos papeles en una mano y medicinas en la otra.
-Ah, Matthew, por fin te despiertas -Dijo saludándome con entusiasmo.
-¿Qu-qué? ¿Dónde estoy? -Suspiré alarmado echándole un vistazo la habitación.
De repente me acordé de Scarlett.
-¿Dónde está Scarlett? -Pregunté.
-¿Scarlett? ¿Es ella la chica que ha venido a visitarte estos días? -Frunció el ceño.
-No sé.
-Supongo que sí, siempre viene a ver cómo vas -Empezó a apuntar cosas en los papeles.
-¿Puede llamarla? -Volví a preguntarle.
El doctor pasó su mano por su barbilla.
-Supongo -Suspiró y abandonó la habitación.
No podía moverme, aunque quisiese, era demasiado doloroso. Tenía muchas heridas y con ellas marcas y moratones por todo mi cuerpo, gentilmente puse el dedo en mi nariz y me resalté. La sentía más que rota.
La puerta se abrió y Scarlett entró.
-Matt -Dijo en un hilo de voz y se formo una sonrisa en su rostro.
-Scarlett -Dije intentando ponerme de pie pero fallando en el intento.
-No hagas eso, te haras daño -Dijo con tranquilidad, y me ayudó a colocarme de nuevo.
Se sentó en la esquina de la cama y me sonrió.
-Estoy tan alegre de que por fin hayas despertado, te he estado visitando -Dijo jugando con mi pelo.
-¿Cuánto tiempo he estado aquí?
-Una semana y poco más -Contestó.
Wow, me dije a mi mismo, ¿Tanto tiempo?
-Brody ha sido denunciado a la policía, nadie sabe qué ha pasado con él, pero la gente dice que le han echado del colegio -Scarlett explicó.
-Eso es genial, ¿tienes un espejo? -Pregunté dudoso, quería ver como estaba mi cara.
Sonrió.
-Toma, utiliza mi móvil -Me lo pasó.
Me miré en él. Mi nariz estaba muy roja, y aseguraría que también estaba rota. Mi labio tenía cortes notables y tenía sangre seca en ellos. Mi ojo izquierdo, igual, una gran mancha morada lo adornaba y tenia algunos puntos en el.
-¿Cuántas veces me pegó? -Murmuré.
-Muchas, no solo te pegó, también te empujaba. Casi tipeja con un ladrillo pero se lo impedí. ¿Lo recuerdas? -Tenía una sonrisa torcida, pensando que a lo mejor tenía un poco de amnesia.
Pero no era así.
Recordaba todo, mi mente aun estaba asimilando lo que había pasado, pero lo recordaba.
-Claro que lo recuerdo, no tengo amnesia, no te preocupes Scar -Sonreí, ahora yo, jugando con su pelo.
-Estaba preocupada, pensé que no me ibas a recordar -Dijo riéndose.
Qué bien se siente al volver a escuchar su risa, tan adorable.
-No estés tan preocupada, te saldrán arrugas -Le acaríciela mejilla.
-¡Como no iba a estar preocupada! Estaba viendo cómo te daban la paliza de tu vida, ¡y luego estuviste en coma por una semana! -Dijo negando y a la vez riendo.
Volví a poner mi mano en su mejilla,
-Estoy bien, todo lo está -La tranquilicé.
Ella maniobrando intentó darme un abrazo pero solté un gemido de dolor.
-Lo siento, se me olvidó -Musitó.
-Está bien -Sonreí, poniendo un pelo rebelde que estaba en su rostro detrás de su oreja.
Que cliché hacer eso ¿no?
El doctor entró acompañado de una enfermera.
-Hora de ver cómo estás. Oh, se me olvidó mencionarte que soy el doctor Harley -Sonrió, recibiendo una aguja.
-Tienes que darme la mano y no soltarme por favor -Le dije a Scarlett, sintiéndome avergonzado.
-Aw, el bebé tiene miedo a las agujas -Me dijo en tono burlón.
-Bien, extiende el brazo por favor -El doctor Harley ordenó.
Extendí el brazo, y metió la aguja. Me resalté un poco, apretando la mano de Scarlett e ignorando el dolor que corría por mis venas.
-Ya está.
-Te podrás ir a casa en una semana -Dijo el doctor.
-Vale, muchas gracias doctor.
-Y tú, -Señaló a Scarlett - La hora de vista termina en quince minutos, tengan un buen día -Salió de la habitación.
Di golpecitos a mi lado de la cama para que Scarlett se sentase ahí.
Scarletts POV
Me senté a su lado, y él se movió para dejarme espacio suficiente.
-¿Estas cómodo? -Le pregunté.
-Sí, lo estoy.
-¿Qué quieres hacer en estos 15 minutos?
-Pues ehm, ya sabes, liarnos -Sugirió.
-Te daría una cachetada, si no es porque estuvieses ingresado -Dije de broma mientras nos reíamos.
A veces podía ser muy directo.
-Eh! Tú me has preguntado, yo te he respondido -Dijo entre risas.
-Touché.
-¿Has vito a mi madre? -Cuestioné.
-Si, te ha venido a ver también -Sus padres estaban separados y él vivía con su madre.
-¿Quieres jugar al tres en raya? -Sugirió.
-Claro -Sonreí.
**
-¡Has hecho trampa! -Me reía de Matt, había empezado a hacer trampas por que iba perdiendo.
-¡Pues para de ganar entonces! -Dijo, sus ojos marrones tenían esa chispa.
Knock knock
-¡Adelante¡ -Matt dijo.
La enfermera entró.
-Perdón si les interrumpo, pero la hora de visita ha acabado -Explicó.
La sonrisa de Matt se convirtió en un puchero, sus ojos perdieron la chispa.
-Supongo que me tengo que ir, te iré a visitar mañana. Lo prometo, te quiero -Dije y le di un pequeño beso en los labios.
-Yo también te quiero -Sonrió.
Antes de cerrar la puerta volví a mirarle, observando sus ojos,
Ese marrón tan bonito.
No era difícil perderse en ellos.
Y creo que lo hice.
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broken ; matthew espinosa
Fanfiction" one day someone is going to hug you so tight, that all of your broken pieces will stick back together. "