C O N T R O L | Levi Ackerman

Capítulo 23: ¿Quién es Dios?

Al anochecer, en una de las habitaciones, Daira estaba escribiendo una carta a Erwin acerca de la misión, en la que detalla lo llevado a cabo y la inocencia total del escuadrón de Levi. Añadiendo que, ella no sospechó de ellos desde un principio.

Dobló la hoja y la guardó en su pantalón antes de ponerse de pié de nuevo. Entonces la puerta se abrió dejando ver al "capitán cara seria".

-Erd preparó té- dice sin más.

Daira asiente y se acerca.
-¿Puedo preguntarte algo?-

-Ya lo hiciste- responde Levi. Daira lo sigue mientras caminan por el pasillo hacia el comedor, o bueno, lo que sería el comedor en algún futuro cercano. Ahora solo había una mesa de madera con unas sillas rechinantes.

-¿Le puedo hacer otra?-

-Ya lo hiciste- repitió Levi mirándola.

Daira frunció el ceño.
-Que gracioso, capitán-

Levi ladeó una sonrisa y la miró.
-¿Qué sucede, Daira?-
Aunque no lo admitiera, él se sentía muy cómodo con ella. La prueba de eso, es que cuando se trataba de Daira, él llegaba a sonreír.

-¿Quién es Dios, y cómo construyó las murallas?-

Levi detiene sus pasos y luego mira a la agente.
-¿Quién te está hablando de eso?-

Daira ladea la cabeza.
-El hombre en el tribunal, portaba una túnica gris oscuro, le faltaba cabello y tenía la nariz muy alargada-

-El pastor Nick- asiente Levi y sigue su camino con Daira siguiéndolo
-No te acerques a él, ¿de acuerdo?- pidió -Es un fanático que espera que todos lo seamos-

-¿Es fan de Dios?, pues si construyó las murallas, yo también lo sería-

Levi niega.
-Nadie puede asegurar que Dios existe. Daira- explica -Es solo una ideología-

-Ah, esa palabra también la usó el comandante cuando le sugerí ir a preguntarle a Dios si le molestaba que alteraramos sus murallas- dice la chica.

Levi sonrió de nuevo.
-A veces olvido que te perdiste de mucho con ese chip de mierda- toma la puerta.
-No tomes la opinión de ese hombre como algo real, te ahorrarás confusiones- empuja la puerta y entran a la cocina en donde estaba el escuadrón ya sentado, con sus tazas sobre la mesa.

Petra le sonrió cuando sus miradas se encontraron, invitando a la agente a sentarse a su lado.
Daira se sentía ligeramente presionada cada vez que Petra era tan amable, como si ambas fueran amigas inseparables, cuando en realidad Daira era bastante arisca (a pesar de Hanji).

Daira se sentó a su lado, ya que no quería quedar junto al capitán, por razones de sentimientos desconocidos. En cuanto sepa qué es lo que siente, tal vez podrá sentirse más cómoda.

-Estaremos en espera varios días más- habla Erd ofreciéndole té a la agente y a su capitán. Ellos lo recibieron.
-Pero hay una expedición preparada para dentro de un mes, en ella participarán los reclutas graduados de este año-