miss you. ( luzuplay )

𝟬𝟰.

auron.

el impacto del cuerpo de luzu contra el mío hizo que me tambaleara.

luzu me rodeó con sus brazos y escondió su cabeza en mi cuello como siempre lo hacía.

ahora lloraba, daba pequeños quejidos mientras que entre hipidos murmuraba, ─ lo siento. ─ una y otra vez.

en ese momento quedé paralizado, todo estaba pasando tan rápido y solo alcancé a acariciar la espalda de luzu, mientras procesaba todo.

─ o- osea, ¿lo escuchaste todo? ─ dije mientras recordaba todo lo que había dicho.

luzu no respondió al instante, si no que se tranquilizó lentamente y entonces, después de unos segundos, respondió.

─ sí, lo siento m- mucho... ─ finalmente habló luzu, para luego sollozar suavemente.

yo solo sonreí un poco mientras sentía como poco a poco mis ojos se humedecían.

─ ya, ya. no lo sientas, fue mi culpa. ─ le dije en un intento de tranquilizarlo, aunque mis palabras eran verases.

siguió negando en murmullos mientras que yo seguía acariciando su espalda de arriba a abajo.

no sé cuánto tiempo quedamos ahí parados, pero yo me perdí en esa paz que solo sentía cuándo estaba con él.

finalmente reaccioné cuándo sentí que luzu recargo todo su peso en mí.

me acerqué al sillón para sentarme, mientras que sostenía a luzu entre mis brazos, lo recosté para así yo colocarme al lado suyo.

coloqué una de las almohadas que estaban cerca detrás de mí cabeza y así quedar un poco más elevado.

mis ojos se posaron en la ventana de luzu, en dónde él azul se iba haciendo cada vez más claro dejando ver el amarillo que él sol desprendía.

me sentía a gusto, en casa.

me sentía feliz.
feliz se queda corto a lo que sentía.

un aroma a óxido llegó a mis fosas nasales, ¿sangre?

busqué el origen del olor, hasta que me topé con la muñeca de luzu que estaba sobre mi pecho.

no me había percatado que estaba vendada, y muy mal.

en las vendas habían pequeñas manchas rojas que pintaban el blanco de está.

─ ...luzu, ¿luzu? ─ dije con un poco de nerviosismo, esperaba que esa herida no estuviera infectada, ya que luzu era muy descuidado cuando se trataba de su salud.

solo alcancé a oír un quejido de parte de él.

─ luzu, estás sangrando, al parecer esa herida se abrió nuevamente. ─ él parecía un poco desconcertado y por sus ojeras podía deducir que no dormía hace mucho.

─ ¿eh?, ¿auron? ─ preguntó mientras se restregaba los ojos y se notaba sorprendido.

─ ¿qué pasa?, ¿no recuerdas ahora? ─ dije con una risilla, entonces las mejillas de luzu se tornaron rosadas mientras me regalaba una sonrisa.