Por siempre, no lo dudes

36.Amame siempre

-Mamá, no me interesa-dijo Cheryl en la cocina

-No pregunté, te estoy dando una orden-gritó mamá muy enojada.

-No te pedí permiso, ya tengo mi mayoría de edad, además nunca te interesé, solo quieres fastidiarme los planes-reprochó Cheryl

-Pero-empezó a hablar mamá

-Mamá cállate, si? Ya perdiste tu autoridad, no pierdas también tu dignidad-dije entrando a la cocina para desayunar

-Nora Blossom, no me hables así-me regaño mamá. Cheryl y yo la ignoramos por lo que muy enojada se retiró de la cocina

-¿Qué harás hoy?-preguntó mi hermana mientras se sentaba en la mesa

-Iré a merendar con Pea y luego nos iremos a la escuela para presentar la obra, tú?-dije sirviéndome café

-Nada, iré en la noche a la obra únicamente-dijo mientras me sentaba en la mesa

-No quieres quedarte aquí, cierto?-pregunté viéndola directamente

-No-contestó y se levantó de la mesa

-Cheryl-dije

-Basta Nora, no tienes que resolverme la vida-dijo volviéndose hacia mi y luego seguir subiendo las escaleras

Cheryl siempre fue una persona difícil. De niños, Jason decía que era muy caprichosa y ambiciosa pero que eso le serviría mucho pronto, porque además, siempre fue muy independiente físicamente, pero no emocionalmente, estaba muy pequeña para entenderlo, pero finalmente lo hice.

Cheryl nunca celebró su cumpleaños aparte, aunque así lo quisiera, Jason nunca la dejo. Él decía que era cosa de mellizos, pero en realidad, nadie asistiría a la fiesta de Cheryl.

Cheryl siempre quería que ambas fuéramos vestidas iguales en navidad, uniformadas decía, pero para que tuviera un mejor efecto teníamos que estar juntas, pero en realidad, era para no pasar la noche sola.

Se esforzó tanto por ser aceptada que nunca nos dimos cuenta que la que la apartábamos éramos nosotros, su propia familia.

Siempre fue muy madura, creo que las circunstancias la hicieron madurar o mi familia la obligó a hacerlo.

Horas más tarde

- ¿A donde quieres ir a comer?-me preguntó mi novio mientras cambiábamos de lugar en el auto. El conduciría mi auto ya que yo llevaba muchas cosas para la obra y en la motocicleta sería muy incómodo. Como todos los hombres Pea quería conducir.

-No lo sé, sorpréndeme-dije sonriente

Mientras íbamos rumbo al cafetería no pude quitarle la mirada de encima a Sweet Pea. Todo lo que habíamos pasado en Riverdale y aún así nunca nos rendimos.

Tenía poco tiempo de salir con Pea, 9 meses. En los que me había hecho sentir tantas cosas, cosas que siempre deseo sentir. Deseo sentirme amada.

Ya tenía casi un año de conocer a Pea y realmente lo amaba. En todas sus facetas, en todas las modalidades existentes.

-¿En que piensas?-preguntó sonriente. Sacándome de mis pensamientos

-Nada, cosas de la obra-dije poniendo mi mano sobre la suya que estaba posada en la palanca de cambios

2 horas después

Ya habíamos salido de la cafetería, habíamos ido al río Sweetwater. Aún no se por qué, solo se lo pedí a Pea sin más.

Tomé su mano y lo dirigí hacia una roca muy cercana, y nos sentamos allí. El puso su mano en muslo, como era costumbre, pero esta vez sentí que lo hacía como apoyo.

-Aquí encontraron a Cheryl, mojada y llorando por Jason, que se había inclinado para recoger su guante, y yo le creía, creía en ella, creí en Jason, jamás creí que me dejaría-dije viendo hacia la orilla del rio

-Entiendo, no te mortifiques por Jason o por tu padre, por sus muertes-dijo tomando mi barbilla

-No lo hago, pero, me siento mal, me siento mal porque Jason le contó su plan a Cheryl, le dijo lo que haría, cuando y donde lo haría-dije viendo a Pea a los ojos

-Y a ti no-dijo mi chico, terminado lo que yo quería decir

-Así es, no me lo dijo, no me lo contó, no confío en mi-dije con lágrimas rodando por mis mejillas

-Quizá solo quería protegerte, de la policía, de tu padre, confiaba en ti, estoy seguro-dijo acariciando mi cabello

-Desde niños, Jason y Cheryl tenían secretos, y decían que eran cosas de gemelos, que jamás lo entendería-conté a Sweet Pea pero paré, tal vez no quiera escuchar mis historias

-Continua, te escucho, cariño-dijo y me sonrió mientras acariciaba mi rostro

-Era una niña muy pequeña, sentía celos, yo también quería tener secretos. Entonces le conté a papá-dije sonriendo mientras recordaba- Papá me contaba cosas y yo a él y cuando Jason y Cheryl querían saber decíamos que eran cosas de papá y la hija menor.

-Tu padre no era malo, Nora. Te quería mucho-dijo Pea para darme ánimo

-Lo sé, el decía que era su hija menor favorita-ambos reímos- Era la única hija menor que tenía pero yo no lo entendía. Cuando peleaba con Jason se lo decía y el me decía que era muy tonta. Cheryl decía que era obvio, todos sabían que era su hija favorita, no solo la menor-conté y ambos reímos

-Y el era tu favorito, cierto?-preguntó sonriendo

-Si, siempre lo fue. Mi madre nunca fue muy cariñosa conmigo, no le gustaba verme llorando y yo siempre lo hacía. Entonces mamá me enseñó a usar el arco, decía que así me podría defender del hombre de azúcar-dije nostálgica

-¿El hombre de azúcar?-cuestionó

-Si, desde pequeños mis padres nos decían que si no hacíamos caso el hombre de azúcar vendría por nosotros, y me lo creí. Dormí una semana con Jason porque me daba tanto miedo que soñaba con él-dije riendo y le di un beso en los labios a mi novio

-Cuéntame más, se ve que te gusta hablar de tu niñez-dijo sonriendo

-Me gusta porque en ese entonces no entendía muy bien los problemas con los que crecía-dijo triste

-Pero se acabaron-dijo Pea

-No del todo, Jason quería huir con Polly no solo porque estaba embarazada, también huía de mi padre, el sería el heredero, debía seguir con el negocio familiar, pero el nunca quiso. Una vez, nos dijo a Cheryl y a mi que cuando creciéramos tomaríamos un avión y iríamos lejos de Riverdale, y yo se lo conté a Nana Rose. Creo que por eso Jason no me contó su plan, porque yo lo contaría-dije decepcionada de mi misma

-Estabas pequeña, tu ya habías cambiado, quizá tuvo otras razones para no hacerlo-dijo dándome un beso en la frente

-Pea, ámame así, ámame siempre-dije viéndolo directamente

-Siempre lo haré-contestó y me besó

-Debemos irnos, no podemos llegar tarde a la tarde obra-dije y nos levantamos

Le había contado mucho, mi infancia sinceramente fue linda desde la perspectiva de una niña, de un adolescente no, realmente entiendes muchas cosas, que no entendías antes.

Me había abierto con Pea y me gusto hacerlo, me gustaba contarle, que supiera de mi y yo de él. Lastimosamente yo no se tanto de él, no como me gustaría.

•••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••

Lo sé, lo sé, dure demasiado, pero esta vez es en serio, actualizare muy pronto, ya tengo iniciado el siguiente capítulo....

Voten💗
Los amoooooio😘