Tormento

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-¡¿A hora que vamos hacer?! ¡Oye gordo! ¡Déjanos salir!- Naruko golpeaba los muros de piedra intentando romperlos pero era en vano, por su parte los demás chicos dentro de la cúpula estaban igual o peor de desesperados, así mismo Shikamaru parecía ser el más calmado, pues en su posición debía serlo.

-¡Maldición! Fuimos engañados como niños…- Kiba comentaba, tocando la roca en busca de algún punto débil en la pared para de este modo poder atacar junto con Akamaru que como era de esperarse estaba a su lado sin separarse. -Está bien… No me voy a quedar atrapado en esta maldita cúpula- con aquellas palabras, el chico perro saco una píldora de alimento de entre sus ropas, la cual le ofreció a su canido compañero, ante la mirada de los demás.

-*Grrraaaaar*- gruño el pequeño perro cuando todo su pelaje paso de blanco a rojo carmesí, recordando indudablemente aquella ocasión cuando se enfrentaron a Naruko en las preliminares de los exámenes Chunin.

-¿Qué vas hacer, Kiba-kun?- Hinata se atrevió a preguntar, observando como su compañero de equipo junto sus manos en un claro sello para acumular Chakra y hacer algún jutsu.

-¡Apártense!- respondió con voz elevada, haciendo que los chicos y las chicas se retiraran un poco de él y de su compañero. -Bien, Akamaru… Demostremos de que estamos hechos…- planto sobre el suelo sus cuatro extremidades, adoptando por completo la postura de bestia, sus uñas alargadas y sus caninos sobresaliendo del resto de su dentadura denotaban el nivel de Chakra que estaba manejando. -¡Mimetismo animal:…!- comenzó a exclamar a la par que junto con Akamaru que se había convertido en una copia de él, corrieron hacia el muro de enfrente para finalmente realizar su jutsu. -¡Colmillo sobre colmillo!- termino de gritar a la par que creaba el característico remolino junto con Akamaru, para colisionar con violencia la pared de roca y de ese modo intentar destrozarla.

-*¡CRAAAAACK CRAAAAASH CRAAAAACK CRAAAAAAAASH!*-

Los estruendos eran claramente audibles, observándose como los torbellinos característicos chocaban contra el suelo y las paredes rocosas, ante la mirada de los demás que esperaban que esto funcionara, pero no fue así, hasta que, Kiba detuvo su ataque conjunto, dejando claras marcas en todos lados, pero nada más.

-Es inútil, estas paredes son muy resistentes- comento el chico Inuzuka, volviendo a pisar el suelo, mientras, Akamaru de nuevo en su estado normal se dejaba caer en la tierra un poco agotado.

Shikamaru observaba con toque de detalle los puntos colisionados, así como Lee y Hinata, siendo que todos ellos se dieron cuenta de que de nuevo y justo como antes, las paredes y el mismo piso se empezaron a reparar, como si tuvieran un flujo de Chakra que funcionaba como una especie de "sistema reparador".

-"Las paredes… Se reconstruyen solas, lo que quiere decir que…"-pensaba el chico con cola de caballo, para después ver a Hinata, ya que la chica de ojos opales le ayudaría a confirmar sus sospechas.

-Hinata…- el joven Nara llamo a la Hyuga, la cual estaba junto a Naruko que continuaba con sus reclamos y gritos a pesar de haberse calmado un poco.

-¿S-Si?-

-Quiero que mires los muros de roca con tu Byakugan, tengo una ligera sospecha de lo que pasa y por que los daños que reciben se reparan solos- le comento Shikamaru, a lo que la muchacha de ojos claros asintió en acuerdo.

El Nuevo Clan Son Where stories live. Discover now