Who's is it? [B99] [Traduccion]

Parte 4

Jake estaba finalmente feliz con su vida - estaba casado con sua alma gemela, tenia el trabajo de sus sueños, y estaba rodeado de gente que se preocupaban por el. Su vida no podia mejorar.

Rosa, por otro lado, sentía que estaba en su punto más bajo. Las cosas no habían estado funcionando para ella en el trabajo por un tiempo ahora. No habia tenido ningun progreso en su vida amorosa. Mientras los dias pasaban ella se sentia mas y mas amarga, vacia y perdida. Rosa ya no podia encontrarle un sentido a su vida. Cuando vio cuán abruptamente estaba disminuyendo su calidad de trabajo, lo único que la mantenía castigada, ya no podía mantenerlo unido.

Otro dia de trabajo. Otra rutina que seguir. Otras veinticuatro horas de sufrimiento. Rosa distraídamente se preparo para el dia (que consisitia en ponerse ropa semi-limpia y perezosamente rociarse su cabello con champú seco) y lograr llegar al trabajo solo media hora tarde. Eso estaba bastante bien comparado con su hora habitual, que iba desde media hora hasta dos horas tarde.

A la vista de otro día más de una infeliz y descuidada Rosa Diaz, Capitan Holt estaba bastante inseguro de lo que debia hacer. ¿Cual era el protocolo para un aparente desmotivado y no inspirado empleado?

El protocolo era hablarles, y Holt lo habia estado posponiendo tanto como podia, pero ya habia tenido suficiente. Todos extrañaban a la antigua Diaz.

Tan pronto como Holt noto a Rosa tambalearse sobre su escritorio, el la llamo a su oficina. Ella ni siquiera habia parpadeado, completamente molesta por su petición.

"Vamos, toma asiento Diaz" El recordo de utilizar su apellido esta vez - inmediatamente compensó la última vez que intentó acercarse a ella sobre un tema serio cuando la llamo  ''Rosa''

"Llegas tarde. Otra vez " Empezo " Y aparcaste tu moto en la acera. Otra vez. Dime que esta pasando."

"Se que llego tarde pero como te dije la semana pasada, mi mecanico ha hecho un desasrte con mi moto y yo he estado intentando programarlo para que lo arregle a tiempo-" La evidente mentira de Rosa fue cortada por Holt.

"No te llame a mi oficina para escucharte decir otra menira. Quiero  que me dijas que esta pasando. Contigo."

"¿Que quieres decir? No me pasa nada!" Exclamo defensivamente Rosa.

"Si fuera verdad, entonces dime porque has venido al trabajo tarde cada dia desde hace tres semanas y solo mirando la pantalla negra del ordenador. Ni siquiera te molestaste en encenderlo. Ya nunca vas a almorzar con nadie del precinto, y mucho menos comer en tu escritorio. Eres piel y carne, Rosa. Te ves enferma. Asi que porfavor, dime que puedo hacer para ayudarte." Holt explico con la mayor empatia que podia reunir.

"¿Sabes que? Estoy enferma de todo esto! No necesito a todos aqui comentando constantemente sobre mi vida! Si, se que soy mala en mi trabajo. Si, se que me veo como si no hubiera dormido en meses. Y tal vez mi pelo apesta, ¿y que? He terminado, Holt, he terminado.2 La voz de Rosa gradualme se fue elevanto hasta que el volumen podia ser escuchado desde fuera de la oficina. Con manos temblorosas, Rosa agarro la manija de la puerta y dejo el edificio a toda prisa.

Holt se quedo en la puerta y la vio irse.

"¿Que acaba de pasar?" Gina pregunto.

"¿Acaba Rosa de solo irse?" La voz de Boyle estaba inundada de preocupación, y Amy y Jake compartieon una mirada preocupda.

Holt sabia donde encontrarla. Y ahi estaba ella sentadoa en la barandilla de Domino Park, mirando el antiguo sitio de la fábrica.

"Sabia que te encontraria aqui." Dijo ligeramente Holt, apoyadose en la barandilla a su lado admirando el sitio.

Rosa estaba en silencio. Ella reconoció su presencia con la más mínima mirada en su dirección pero ella siguio en silencio. Su mente estaba demasiado cansada para hacer cualquier cosa aparte de nada.

"Es un parque precioso. Ese edificio de ahi  alguna vez fue una refinería de azúcar Domino, como probablemente sepas. Me encanta venir aqui a relajarme, pero es facil olvidar lo que este lugar realmente representa. Este parque es un tributo a los tantos, tantos trabajadores que aquella fabrica y la gente de la ciudad, quienes no solo dedican su vida a ellos mismos, por la comunidad."

Sus ojos vidriados sobre los restos de la fábrica y la hermosa costa a su lado. Los ojos de Rosa estaban pegados a la cara de Holt con curiosidad.

"Es facil perder vision de tu proposito, especialmente si la vida no va de tu parte. Pero tienes uno de los deberes mas grandes y honorables que este mundo tiene que ofrecer - sirviendo otra gente. Haces un impacto positivo en la vida de los demas cada dia, ya sea para ayudar a la víctima de un delito, ayudar a encontrar un perpetrador, o inculso salvar la vida de alguien mas. Haces la vida de las personas mejor y esta ciudad mas segura. Somos muy afortunados de trabajr contigo cada dia y no queremos perderte. Estas rodeada de gente que se preocupa por ti y quienes probablemete hayan pasado los mismos sentimientos que estas sintiendo ahora. Nunca estaras sola."

Rosa miraba fijamente sus pies, sumergiendose en las palabras de Holt. Sabia que tenia razon. Ella habia querido toda su vida ser edtective porque ella siempre tiene un impulso de ayudar a otros, para mejorar vidas, y encontrar justicia para a aquellos que lo merezacan, ella no podía tirarlo todo ahora.

"¿Puedo tener mañana libre? Necesito pensar algunas cosas" Hablo finalmente Rosa.

"Entiendo. Si decides volver, tu mesa te estara esperando."

"Oh no, no me voy. ¿Estas de broma? Este es mi trabajo soñado." Dijo Rosa, casi riendo. "Esta pensando... tal vez conseguir, uh,  ayuda profesional" Su voz se apagó, así que Holt tuvo que esforzarse para escucharla.

"Oh, si, entiendo. Buena suerte" Holt se fue del parque, dejando a Rosa admirar el agua azul brillante debajo de ellos. El no podía ayudar pero sonrio con su éxito. Era un buen progreso hacer que Rosa admitiera cualquier cosa de si misma así que ese reconocimiento hizo a Holt sentirse orgulloso de ambos, el y Rosa.