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Violet Lager;

Escuchaba sonar mi teléfono a los lejos, y no sé quién me está llamando a estas horas, un domingo tan temprano —joder—.

—aló —digo con la voz en bajo y un poco de pereza.

—Hola, buenos días prima —dicen detrás de la llamada alegremente.

—¿Qué carajos? —digo mientras veo la hora en mi celular —son las 8 de la mañana.

—Muy tarde.

—Claro que no, es demasiado temprano para ser un domingo.

—Ay ya no seas tan chillona, en fin, me tienes que ayudar con algo.

—¿Con que cosa? —pregunto cansada.

—Mi padre quiere hacer una fiesta de bienvenida en la casa, así que tú me vas a ayudar —dice emocionado.

—No voy a limpiar después de la fiesta, de una vez aviso.

—No claro que no, solo me ayudaras con los invitados, pásales la información a todos.

—Sabes que no le hablo a todos.

—Pero si todos te siguen en Instagram.

—Agh, bueno, ya no jodas déjame dormir — escuché una risita de él y colgué la llamada.

Y me volvieron a llamar —¿y ahora quién? Carajo—.

—Hola, buenos días alegría.

—Que tienen de buenos, Isabelle.

—Ay, nos levantamos bravas ¿he? —bufe ante ese comentario— mejor acompáñame a desayunar.

—Si tú pagas todo, sí.

—Bien, paso en 15— y colgó.

Me pare con pesadez de la cama, y camine arrastrando los pies hasta el baño, he hice lo que hago siempre. bien estos días se la ha estado pasando lloviendo y hoy igual así que me puse lo primero que encontré, un pants negro con un suéter azul, y unos tenis negros, sí que si señores. No tengo las fuerzas ni las ganas para arreglarme demasiado.

Estoy bajando las gradas y dirigiéndome a la salida a esperar a Issy, pero veo a mi hermano comiendo en el sillón y eso es sospechoso.

—¿Qué haces? — digo detrás de él, haciendo que se asuste.

—¿Qué te pasa? — me reclama.

—¿Eso es nutella?

—No —dice algo asustado.

—Estas comiendo chocolate de buena mañana, y en el sofá.

—Cállate, no le digas a Marta.

—¡Oh Marta!, ¿no te hace falta un frasco de nutella en la cocina? —él me mira con cara de odio.

—Te odio.

—El odio es mutuo así que yo también —dije saliendo de ahí antes me lanzara un cojín.

Me dirigí a subirme al carro de Issy, rápidamente antes de mojarme toda. Llegamos al restaurante y vi el auto de Ian en el estacionamiento, espero y que no sea un desayuno en grupo. Cuando entramos alcance a divisar a Ian en unas de las mesas del fondo del lado izquierdo del restaurante, estaba con Alexis y Tyler. Lo bueno es que Issy escogió una mesa del fondo del lado derecho, lo cual está a tres mesas lejos de la de Ian.

—Bien, ¿y qué tal? ¿Cómo esta Mav? — pregunta.

—Bien, está bien, sigue igual a como se fue, solo que con la diferencia de que ahora es gay —al parecer al decir lo último Issy se sorprendió, ya que casi escupe el agua que estaba tomando.

Thrasher ✔️Where stories live. Discover now