Mi boxeador

Cap #4: Una linda gordita.

Charles, un boxeador callejero al que muchos le temen por su largo historial de "víctimas",  sin embargo nadie lo conoce en verdad.
Su padre los abandono cuando Charles tenia tan solo 5 años ni siquiera lo recuerda, su madre nunca ha logrado superar el abandono de su pareja , al principio trabajaba muchísimo para apaciguar su dolor dejando a Charles solo en casa, pasado 8 años Martha la madre de Charles cae en el vicio del alcohol, desamparando completamente a su hijo, pierde su trabajo y se pasa los días completos de bar en bar, gastando lo poco que tiene, Charles si tener siquiera comida en casa sale a la calle en donde se terminó de criar aprendiendo de un buen amigo de su padre , el boxeo y los juegos de suerte, volviéndose con el pasar de los años el mejor de todo el lugar.
Martha sigue ahogándose en el alcohol cada día con lo poco y casi nada que gana como mesera en uno de los bares del lugar, ahora su hijo debe cambiarse de highschool por un pleito que tuvo en su otro highschool pues uno de sus compañeros llamó a su madre p** stituta.
Charles se levanta y hace comida para su madre y para el, toma una ducha y se viste con una playera gris , un blue jean, tenis, un buso negro, toma su mochila, las llaves de su moto y sale hacia el highschool.

Una vez llega, sale directo a secretaria en donde le entregan lo necesario para iniciar clases, Charles sale pensativo hacia su salón, camina un poco y escucha una voz que sale de un pasillo:

- Pues fíjate que no ballena, hoy serás nuestro juguete verdad Landon.
Dice burlón un chico.

- No...n..no me ha..hagan...da..daño por ...fa..favor.
Responde una temblorosa y dulce chica.

- Oh claro que no querida solo nos harás unos pequeños favorcillos, nada mejor que una mamada, tu tío ha estado presumiendo en el bar de mi padre, gorda y asegura que tu boca es de lo mejor, jajajaja.
Dice otro chico burlón, al ser nuevo Charles no tiene ni la menor idea de quienes son solo sabe que quien acabó de hablar se llama Landon.

- Yo...y...yo n..no..se..na...na..nada.
Dice la dulce voz a la que llaman gorda.

- Ahora ballena nosotros probaremos lo que tanto alardea Roberto jajajaja.
Dice el chico que hablo de primero.

- P..por...fa..favor ...su...sueltame Ryan .
Dice la chica quien tal parece que esta sollozando.

Charles sale de su escondite al escucharla llorar y dice:

- Ya la han escuchado par de imbeciles, soltad inmediatamente a la chica, ella ha dicho NO.

- Jajajaja, y tu quien te has creído para llamarnos imbéciles y más aún defender a la rata gorda.
Dice el tal Ryan burlón.

- Que quien me creo, mmmm , pues simplemente no es quien me creo si no quien soy.
Dice Charles con la intención de que suelte a la dulce chica que ahora la mira, es pequeña , algo gordita , su cabello es marrón y  que al estar agachada no puede observar su rostro.

- Y quien se supone que eres???.
Pregunta irritado el chico llamado Ryan.

- Pues quizá hayas escuchado hablar del diablo, nada más que ese soy yo y por tu bien suelta a la chica si no quieres terminar en un hospital.
Dice seriamente Charles cansado de ese imbécil que ha hecho llorar a la pequeña gordita.

- Oye bro, ya no hay bronca nosotros nos vamos ya, la gorda es tuya.
Responde el imbécil que hasta el momento no había hablado.

Los idiotas salen corriendo y Charles escucha un débil:

- G..gra...gracias.
Por parte de la chica a la que a defendido.

- No me agradezcas pequeña. Dice Charles y se aleja dejando a la chica sola.

Charles sale y encuentra a lo que parece es un profesor:

- Disculpe, me diría en donde queda el salón de historia y al ser nuevo no estoy seguro donde es.
Pregunta Charles.

- Oh muchacho, tu debes ser Charles Lawrence, el alumno nuevo , pues yo soy tu profesor de historia Cameron O'Brien, vamos ahora voy para tu salón.
Responde el profesor.

- Gracias, Profe.
Dice Charles.

Caminan hacia un salón y cuando entran el profesor dice:

- Buenos días muchachos,hoy tenemos a un nuevo compañero, presentate chico.

- Hola, soy Charles, tengo 18 años y me gusta el boxeo. Dice Charles, mirando a sus compañeros y encontrando en un rincón a la linda gordita que ahora observa sus ojos, son verdes muy hermosos igual a sus carnosos labios.

Muchos murmuran y Charles escucha lo quedicen sus compañeros acerca de el:

- Es el .

- Es muy guapo

- Es ...es ...el...di...ablo..

Charles camina hacia el único asiento vacío al lado del asiento de la linda gordita,  parece que sus compañeros si lo conocen por lo último que ha escuchado, mientras camina hacia su asiento mira  a los idiotas de los que defendió  a la linda gordita Ryan y Landon.

- Bueno muchachos, bienvenidos a su último año, ahora haremos un recuento de los temas que miramos el anterior año.
Dice el profesor O'Brien.

El profesor inicia su clase y  Charles   no puede atender clases a cada rato desvía su mirada hacia la linda gordita que permanece con la vista fija en el tablero, por suerte la clase pasa rápidamente y la campana anuncia el fin de clases y la hora de receso.
La linda gordita espera a que todos salgan del salón para así ella poder salir, Charles hace lo mismo y cuando ya no hay nadie habla:

- Te puedo preguntar algo???. Le dice Charles a la pequeña, dejandola totalmente sorprendida pues  ella tarda en responder.

- Si...ss...si..
Responde finalmente tartamudeando la pequeña chica.

- Porque dejas que te traten tan mal, pequeña.
Dice Charles intrigado.

- Yo...yo...e..ellos sie...siempre me tra...tan...mal..
Dice  confundida la pequeña, cosa que Charles nota inmediatamente por su ceño levemente fruncido y el pequeño puchero en su boca.

- Pero tu no debes dejarte pequeña, por cierto no me has dicho tu nombre.
Dice dulcemente Charles.

-Yo...soy...E...Evelin...mu....
mucho...gus...gusto...
Dice la pequeña que ahora sabe se llama Evelin.

- Oh pequeña no me temas, te prometo que no te haré daño ¡si!.
Dice Charles a  su pequeña Eve.

- Esta... Bien... Ya me ....voy.... Adiós...... Char...Charles...
Dice tímidamente Eve y sale corriendo mientras un Charles paralizado la observa con una sonrisa pues es la primera vez que una chica lo llama por su nombre dulcemente.