¿Creías que eras para él?

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El pelirrubio se encontraba en la cocina, sentado y con bastante molestia mientras tomaba café y esperando a que cualquiera de los dos ególatras contaran algo de lo que pensaban, entonces el castaño lo acompaño sentándose frente a él, este solo había alzado la mirada, sin decirle nada y volvió a bajarla mirando su tasa. El castaño sabía que estaba enojado, y lo peor. Es que él no había hecho nada.

– Entonces… – Preguntaba House sentado en el sofá de John. – ¿Dices que le inyectó algo?

– Sí. – Respondía Sherlock quien miraba la ventana y después se apartaba con las manos en los bolsillos, analizando los hechos. – Ella dijo "Salí, ya no moriré solo".

– "Moriré Solo"… Es obvio. – Observaba a Sherlock y el cual asentía, ambos ya sabían la respuesta.

– ¿Pero qué clase de..

– Tenemos que hacer las pruebas. – Se levantaba el con ayuda de su bastón y comenzaba a caminar, y eso había llamado la atención de los que estaban en la cocina levantándose con prisa.

– ¿A dónde vas House?

– ¿No es obvio? – Ante la duda en el rostro de ambos hombres, este solo rodaba los ojos y seguía caminando saliendo de allí.

– Voy contigo –Decía el pelinegro comenzando a caminar, llevando su saco y bufanda con él.

– Esperen!. – Caminaban detrás de ellos, pero House se detuvo y se volvía hacía ellos.

– Si van, solo serán un estorbo. Quédense.

– ¿Qu-Que? – Se había quedado atónito el castaño, quien solo retrocedía un paso y comenzaba a reír. – Estarás de broma…

– No. Vámonos. –Le decía a Sherlock y salían de allí.

– Pero que… -Volteaba a ver a John y este solo bajaba los hombros regresando y abriendo su Lap.

– Tan amigos ellos… -Decía rascándose la mejilla.

– Sí igual que tú y Sherlock. –Respondía con Celos en la voz.

– John.. por favor, ¿Es que aún no te das cuenta?

– ¿Cuenta de qué?

– Que Sherlock te ama…

– Vamos.. – Se reía y seguía tecleando.

– Es por eso que hacen eso. Porque son idiotas y no saben como expresarse, todo es un juego para ellos John, pensé que lo sabrías.

– ¿Juego?

– No es que te quiera poner celoso a ti. Quiere poner celoso a House…

– No.. puede ser… -Ya le había caído la noticia, y se llevaba la palma a la frente. – Es un idiota.

En el hospital había llegado House, mientras marcaba a su equipo en USA consultando con los síntomas, Estos no le habían podido dar una clara respuesta, así que como siempre, les había insultado de "cariño" y colgaba, soltando un bufido. Había hecho bastantes pruebas ya. Y aún no podía conciliar con el antídoto. En otra parte, había ido Sherlock a investigar a la casa de la abuela, que le había contado House. Y era en la misma ciudad a la que la chica había ido a investigar en la fauna. Lo que los diferenciaba solamente es que estaban apartados a unos kilómetros. Pero lo que los conectaba era un camino, lleno de naturaleza y que era el único paso que podía llevar a la ciudad, hasta es punto. Comenzó a recorrer todos los lugares, y se había encontrado que no a una distante distancia había una granja. Una granja peculiar. Entonces llamó a Lestrade y a John, le mandó un Texto.

Un caso en comúnDonde viven las historias. Descúbrelo ahora