El mejor amigo de papá (Robert Downey Jr.)

We're on fire

El Mejor Amigo de Papá

Capítulo 60

|We're on fire|

Subí una escalera de madera para poder entrar al bungalow. Al llegar abrí la puerta.

—Kate —Dice Susan sorprendida.
—Hola Susan... Lo siento, no sabía que estabas aquí.
— ¿Me estas espiando? —Pregunta.
—No, es que, recibí un mensaje de Rodrigo diciéndome que nos viéramos en este bungalow pero quizás me equivoque. Lo siento.
—No te preocupes, sube, te enseñare algo —Pide Susan y entre.
— ¿Qué haces aquí?
—Alquile el bungalow para verme con Matt, el amigo de tu papá.
—Ah, entonces lo mejor es irme. Qué lindo lugar. —Halague al ver todo mi alrededor y me di la vuelta para irme.
— ¿Por qué me haces esto, Kate?
— ¿Ah? —La voltee a ver confundida.
— ¿Por qué te gusta humillarme y hacer que yo sola me humille a mi misma? —Dice ella. La vi confundida. ¿De qué habla?
—Susan, de verdad, no entiendo de que me hablas. —Desde el principio del viaje tú dijiste que viniera para que Robert y yo pudiéramos encontrar una "reconciliación" pero tus planes eran otros, venir a tener tu "pre - luna de miel" con Robert. —Dice histérica.
—Cristo ¿Crees que yo ando con el Señor Downey? —Pregunte haciéndome la ofendida. Carajo ¿Cómo adivinó?
—No te hagas la "niña inocente" Kate, no lo eres. —Pide —Hiciste que me viniera a humillar con Robert aquí, mientras que tú te estabas acostando con él. Y eres tan hipócrita de decirme que "cuento contigo" y sabias perfectamente bien lo que había sucedido en la noche. Tú estabas con Robert cuando llegue como estúpida a ofrecerme al maldito hombre. ¿Por qué Kate? Yo no te he hecho nada. —Dice casi gritando.
—Susan, yo no me he acostado con Robert —Dije seria — ¿Por qué lo haría?
— ¡No más mentiras! —Grita — ¡Te seguí! ¿Sí? Te seguí anoche, fueron con Robert al bar. Bebieron y luego fueron a bailar muy juntitos y se besaban con desesperación... Más noche te llevó a su habitación y no sé que sucedió pero a los cinco minutos él te llevó cargada a la habitación, estabas profundamente dormida. 
—Está bien, bien. Estoy saliendo con Robert ¿Eso querías escuchar? —Grite.
—Sí, me gusta hablar con sinceridad. Pero ¿Por qué robaste a mi esposo?
—Yo no me robe nada, y él no es tu esposo. Estoy enamorada de Robert desde que tengo catorce años, tú te habías ido mucho antes.
—Pero eso no te da derecho a estar con él —Gruñe.
—Él tiene derecho a ser feliz como tú lo fuiste con tu amante, la diferencia es que nosotros nos amamos, no es una calentura de una noche. —Dije firme y ella comenzó a reírse.
—Tú no sabes que es amar... —Se burla.
—Tú tampoco, Susan. 
—Si de verdad se amaran, papi Ryan y mami Hart sabrían de esto —Dice.
—Mañana lo sabrán —Dije rápido y ella niega mientras sonríe. Ve su reloj y agarra un sobre que hay en una mesa.
—Esta es la hora en que papi Ryan debe de tener en sus manos una copia de de estas fotos —Me pasa el sobre. Con mis manos temblorosas abrí el sobre y saque las fotos para verlas. Carajo, son unas fotos de Robert y yo en el bar, bailando, besándonos, tomándonos la mano, tomando whisky. Mierda ¿Cómo no la vi?
—No puedes ser así de mala conmigo, Susan. Yo comenzaba a considerarte una amiga.
— ¿Una amiga hipócrita? Querida de esas abundan y sobran ¿Para qué tener una mierda de amiga? —Dice riéndose. Yo negué y seguí viendo las fotos, esto no puede ser. —Pero no te preocupes, esta será la última vez que tú y yo nos miremos. Puedes quedarte con Robert, te lo regalo.
—Él ya es mío.
—No te lo quito, linda. —Camina hacia mí y me quita su sombrero —Esto es mío.

Camina a la puerta y sale, antes de cerrar todavía me habla. 

—Robert vendrá en un momento, cuídate. 

Cerró la puerta y me senté en una silla. Suspire y sólo me quede pensando, Susan acaba de cagarse en mí. Maldita loca hija de perra. Me sorprendió una llama de fuego en una de las paredes del bungalow. Joder, ¿Qué es esto?

Corrí a la puerta y trate de abrirla pero no pude, está cerrado con llave. Comencé a golpear la puerta y a gritar al ver más llamas de fuego alrededor de mí.

— ¡Auxilio! ¡Ayúdenme! —Grite y seguí golpeando la puerta.

Más fuego comenzaba a quemar el bungalow y el humo estaba llenándolo. Comencé a toser porque no puedo respirar. Esto me está asustando cada vez más, no quiero morir, no ahora. Cristo, ¿Dónde está Robert?

— ¡Ayuda! —Grite y seguí golpeando y pateando la puerta pero era muy gruesa y de una buena madera. 

La desesperación y el miedo se apoderaron de mí y sin querer comencé a llorar. Creo que estos son mis últimos momentos viva.

Corrí a la pared opuesta del bungalow, es de paja pero una muy resistente.

— ¡Ayuda! —Mis gritos ya no eran gritos, el aire me estaba matando y el fuego en el suelo me desesperaba. Literalmente estaba en un círculo de fuego inundado en humo. Me siento débil.

Camine lentamente a la puerta. Le pegue un puñetazo y seguí gritando.

— ¡Ayuda! ¡Auxilio! —Trate de gritar con todas mis fuerzas pero era en vano, si no me escucharon cuando podía gritar bien mucho menos ahora que mis gritos son débiles. El bungalow estaba incendiado por completo, incluso el techo. De repente un pedazo del techo cayó cerca de mí, voltee a ver y vi que una buena parte estaba cayendo. Grite y trate de correr pero una barrera de fuego no me permitía pasar. 
El techo cayó encima de mí, en la parte de mi brazo izquierdo, haciendo me caer junto a él.