Materia Prohibida

Capítulo 28

Nuestra Nueva Vida

Cuando menos lo esperamos, la vida nos pone delante un desafío que pone a prueba nuestro coraje y nuestra voluntad de cambio.

Sean cuales sean tus planes, el éxito de tu día comienza ahora. Respira hondo y comienza con entusiasmo.

Relájate, hay cosas que llevan su tiempo… y otras que el tiempo se lleva.

Juliana y Valentina estaban lista para una nueva vida, una nueva oportunidad y un nuevo comienzo.

–...¿Cómo amaneció la mujer más hermosa de este mundo?– Juliana le llevaba el desayuno a la cama a su novia. Se sentó a su lado y le dio un tierno beso en los labios.

–gracias, chiquita que linda eres. Creo que yo debí hacerte el desayuno, para disculparme por lo de anoche– le dijo Val, avergonzada.

–yo me desperté primero. Además, no hiciste nada malo anoche. Todo lo contrario hiciste todo bien– le dijo Juls moviendo las cejas.

–pervertida– le dijo Val, riendo. _encerio mi amor, creo que la cagué_ le decía Val, un poco apenada.

–no te lamentes tanto. Creo que sin esos celos no hubiéramos tenido esa fogosa noche. Por Dios Val, estabas irreconocible– le dijo Juliana. Valentina negaba con la cabeza y reía.

–no seas mamona, tampoco fue así– le dijo Val.

–mira mi espalda, pareciera que me enfrenté con el mismo diablo. Y eso que no tomaste alcohol– dijo Juls. Valentina casi escupe el café.

–pobre mi chiquita. Te Amo tanto– le dijo Val, dándole besitos en la espalda.

–yo también te amo. Con todo mi corazón– le dijo Juls, dándole un beso en los labios.

–¿a qué hora iremos a casa de Beltran? Ya me hace falta mi hija– le dijo Val.

–después de desayunar, nos dachamos y luego vamos. También me hace falta mi bebecita– le dijo Juls.

Mientras desayunaban, platicaban de lo que habían pasado en la fiesta y sus expectativas de como término. Ya querían que fuera lunes para ver a Raimundo contar todo lo sucedido.

Después de desayunar se dieron una ducha, se vistieron y luego salieron a la casa de Beltran.

†  †

Hora después. Llegaron a la casa de Beltran quien estaba jugando en el patio trasero con Lana.

–¡ven aquí, bebé hermosa de mami! Te extrañé demasiado– dijo Val, abrazando a Lana.

Juliana se acercó para también, abrazar a su hija.

–hola bebé de mamá. ¿Te portaste bien?– le decía Juls.

–toda una dulzura esta princesa. Se porta muy bien– dijo Beltran.

Los tres se quedaron jugando un rato con Lana.

Horas mas tarde despues de almorzar, charlar y pasar toda la tarde en casa de Beltran. Ya había llegado la hora de las chicas volver a su hogar.

–... Gracias por todo Beltran, de verdad la pasé muy bien. Y ver a mi chola disparándole a esas latas, fue lo mejor de la tarde– dijo Valentina, sonriendo.