El Stripper

No merezco esto. No lo merecemos.

-¿Entonces tampoco dormirás hoy conmigo?-

-Creeme que  es lo que más quiero, pero tengo demasiado trabajo... ya duerme ya es muy tarde, te amo- Perú colgó el telefono y siguió besando a estados Unidos, mientras un mexicano se acostaba en su cama con lágrimas en los ojos.

México de verdad confiaba en el peruano, creía que si tenía mucho trabajo que hacer nunca imagino que lo engañarlo con Estados Unidos, su vecino. Rusia ya sabia que estados Unidos lo engañaba, era demasiado obio, el gringo no sabía ocultar sus sentimientos, solo que quería saber que tan lejos llegaba, y con quien lo engañaba.

Tenía una oportunidad perfecta para saberlo, en unos cuantos días sería la fiesta de cumpleaños de un hermano de México, no conocía a ese tal México, pero sabía que la persona con quien Estados Unidos lo engañaba estaría ahí, ya que escucho a estados Unidos que hablaba por teléfono y decía que estaba ansioso por verlo en la fiesta.

México no le reclamo nada a Perú ya que sería la fiesta de chile y el y sus hermanos estaban muy ocupados para pensar en otra cosa. Lo que le lastimó al mexicano que Perú ni le importó que México no me pusiera atención ni fuera como antes es más, parecía más feliz, así que mocos, se puso perrisima y no le hablo para nada, dijo que para la fiesta se pondría sus mejores garras y se la pasaría como si estuviera soltero, si Perú lo dejaba, mejor para el.

Rusia estaba igual que el mexicano, se irían perrisimas  y con la intensión que sus parejas los cortaran.

Llego el día de la fiesta. México y rusia llegaron perrisimas, Perú estaba con Estados Unidos hablando como "amigos" a los dos se simplemente los vieron y no sintieron absolutamente nada, se miraban de putamadre, pero nop, ningún sentimiento.

México y rusia ignoraron por completo a sus parejas, se la pasaron normal, comieron y después vino lo chido, empezaron a tomar todos, los más amargados se fueron y México y Rusia súper pedotes.

-Que bonitos ojos tiene compadre- Dijo un alcoholizado Chile abrazando a México.

-Wey ya, estas bien pedo, te voy a llegar a tu casa-Chile ya estaba todo dormido en la barra del bar, ya se dirijia a la salida con Chile en su hombro pero Argentina detuvo a México y le dijo que el lo llevaría a su casa, para que México siguiera disfrutando de la fiesta, México acepto, ya aun quería seguir chupando.

México tenía ma sensación de vivir todo esto, tuvo un deja vu bien cabron, México sentía que tenía que ir a baño, no por que tuviera ganas, si no por que tenía esa sensación de que algo pasaría si va. Y quería averiguarlo.

México se fue al baño, al entrar miro al Ruso fumando, solo lo conocía por que era pareja de Estados Unidos, nunca le hablo pero Perú era amigo de Estados Unidos y por eso conocía identidicaba al ruso, se miraba que era muy serio, de echo demasiado serio como para estar en una fiesta, México saco un cigarro que tenia en su bolsa del pantalón, se lo puso en la boca y se acerco al ruso.

El ruso le encendió el cigarro al mexicano con su encendedor, y se le quedó viendo.

-Compraste el conjunto de mi traje.- le dijo el ruso al mexicano mientras lo miraba de pies a cabeza.

-No, tu compraste el conjunto de mi traje.- México lo miro y sonrió, el ruso le correspondió la sonrisa, lastima que en un momento esa sonrisa se arruinaría.

-¿Tu eres el novio de Perú no?- Rusia solo miraba como el mexicano fumaba, eres sexy no lo negaría, y bastante guapo, tenía una figura de puta madre, si le da y no consejos.

-Ya ni se que somos.- respondió bastante seco.

-Pues, entonces creo que ya no son nada, por que Perú te engaña con estados Unidos.-