It's Corona-Time [X-Men] [Cherik]

Parte Quince

    Ese lunes fue muy tenso para todos y todas, pero no porque hubiera mucho movimiento, sino porque el aire estaba pesado y nadie parecía animado para hablar de nada.

    Scott no salió de su habitación en todo el día, Ororo y Rogue estaba aun más enojadas con el chico, mientras que Kurt intentaba ponerse en su lugar y Jean y Peter tenían debates morales sobre si perdonarlo o no. En la mañana, estaban más que dispuestos en dejar todo atrás, pero luego de su actitud cuando se enteró de la reunión, se dieron cuenta de que ese chico no cambiaría.

    Los adultos, por otro lado, sabían que no era su conflicto, y no querían meterse en un tema de los adolescentes, no creían que fuera su lugar, pero no podían evitar sentirse incómodos por la situación. Sobretodo con Alex, quien intentaba actuar normal, pero sabían que estaba enojado por haber tratado mal a su hermano.

    —No es nuestra culpa, Scott reaccionó así sin razón— susurró Raven luego de haber almorzado de forma incómoda y sin la presencia del nombrado.

    Era casi tabú hablar de ese tema, aunque todos lo hicieran en los rincones y lo pensaran sin cesar, así qué Raven, Hank y Charles se encontraban tirados en el pasto junto a un árbol, con unas mantas que los cubrían porque, aunque la primavera ya había llegado, el clima seguía siendo áspero y frío.

    —Hay que ponernos un poco en el lugar de Scott, está sensible y...

    —¡Charles! Dejá de ser buena persona y dame la razón— lo interrumpió Raven y los tres rieron por su sobre actuado enojo.

    —¡Oblígame!— bromeó Charles antes de seguir con su discurso—. Solo digo que Alex y Scott son muy unidos, y que éste está muy sensible por lo que pasó con Jean, así que es de esperarse que esté a la defensiva y se sienta atacado todo el tiempo, porque muy en su interior entiende que se equivoco, pero no quiere aceptarlo.

    —Esto solo me hace querer encontrar la vacuna para el coronavirus lo antes posible—agregó Hank.

    —Ay, a mí me gusta estar en cuarentena, lástima las hormonas estúpidas de éstos adolescentes que hace que nos peleemos todes con todes. De no ser por eso, estaba más que bien, todo el día con Hank y con Kurt, relajada...

    Raven abrazó a su esposo, con quien compartía manta, y Charles sonrió, genuinamente sonrió ante la pareja que formaban esos dos mutantes, sin una pizca de celos o remordimiento como las otras veces.

    Fue en ese momento que se dio cuenta de que su humor no solo estaba mejor por la autoestima que llegaba a tener al poder mover las piernas, sino porque estar en pareja con Erik lo hacía no sentirse solo, se daba cuenta de que podía amar y esperar el mismo sentimiento a cambio, que era una buena persona, que merecía cariño como todos y todas.

    Hank notó la sonrisa tímida de Charles, sus mejillas sonrojadas y sus ojos brillantes, una mirada tierna que no les había dirigido ni en el día de bodas. Probablemente lo hubiera ignorado de no haber sido porque también vio como los ojos de su amigo brillaron como estrellas al ver que Erik se acercaba.

    El alemán, junto a Logan, caminaba con paso decidido pero ligero hasta la ubicación de ellos y luego se sentó al lado de Charles casi sin dudarlo, a una distancia muy cercana para la Organización Mundial de la Salud, aunque razonable para ser solo dos amigos. Muy al contrario de Logan, que se sentó alejado del resto, aunque tal vez fuera porque se prendió un cigarrillo.

    —¿De que hablaban?— preguntó Erik, en dirección a Charles, como si solo le importara su palabra.

    —Charlábamos de la actitud de Scott esta mañana.