Relación por contrato

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|Un mes después|

Llevo un mes asistiendo a mis terapias y debo decir que me he recuperado bastante.

Ya puedo caminar sola sin estar apoyándome mucho.

La silla de rueda ya no la uso y eso es un súper éxito en mi vida.

Lo que todavía me cuesta es tomar en brazos a Dylan, pero es por su peso.

Además de que ya es un niño del kínder.

-Veo que ya podemos levantar algunas libras- dijo mi entrenadora mientras colocaba pesas

-Recuerdo las veces que llore aquí-

-Has pasado por mucho- respondió mientras me observaba

Mi madre como todos los días estaba sentada en una esquina observando todo.

- ¿Qué realmente me falta de recuperar? -

-Bueno ya tus rodillas logran sostener tu cuerpo, tus brazos están fortalecidos otra vez, lo que faltaría es tu confianza. Siento que en ocasiones realizas las cosas con un poco de temor y eso psicológicamente nos atrasa. Debes pensar que estas recuperada para que te lo creas- dijo sonriendo

Continúe con mi hora de terapia física.

Al terminar me despedí de todos y nos fuimos directo al auto.

- ¿Puedo conducir? - pregunte mirando a mi madre

-Prométeme que si te duele cambiamos de lugar- dijo ella preocupada

-Si- respondí tomando las llaves del auto

-Qué raro se siente- dije riéndome

-No me asustes que me da un paro cardíaco-

Todo el camino a la casa ella iba rezando.

-Ya deja a Dios tranquilo que ya llegamos- dije riéndome mientras apagaba el auto

-Gracias a Dios- se bajó del auto

Como siempre cuando llego después de la terapia Loki es el primero en saludarme.

-Hola muñeco- dije mientras acariciaba su cabeza

Entramos a la casa y Anna se encontraba limpiando el comedor.

-Hola Anna- le sonreí mientras iba por un vaso de agua

-Hoy la veo más recuperada-

-Si la terapista me dijo que ya estoy recuperada solo es algo psicológico- dije nerviosa

-La mente juega con uno- dijo mi madre

-Hija te dejo en manos de Anna ya tengo que regresar a la casa tu padre no puede hacer nada solo- dijo rodando los ojos

-Vale- le sonreí mientras la abrazaba

Las pasadas semanas mis padres y mis suegro decidieron mudarse a lo que era mi hogar.

Claramente la casa la seguiré pagando yo. Les debo mi vida así que es una forma de agradecimiento.

- ¿Le duele alguna parte? -

-No – le sonreí

-Iré a la oficina, toca trabajar- le sonreí mientras iba a la escalera

Loki ya tenía la costumbre de pegarse a mi mientras subía.

-Ya estoy bien- le hable acariciándolo cuando termine de subir la escalera

En la oficina de la casa ahí pase horas muertas.