La Espada Mágica (TODODEKU)

III

La vieja puerta de madera se abrió con estrépito y una tropa entró a la casa de los Midoriya. Eran demasiados, tenían múltiples armas. Un hombre con la cara destrozada se acerco a la pobre Inko con mucha confianza.

— All for one, creí que no te volvería a ver después de asesinar a mi marido — dijo con rencor.

— Pero el destino nos volvió a juntar — All for One mandó a sus acompañantes a revisar la casa — Yo esperaba una bienvenida más cálida de tu parte.

— No eres bienvenido aquí — con un tono cortante le respondió — ¿qué es lo que quieres?

— ¿No es obvio? ¡Conquistar Camelot! — la arrogancia se hizo presente en su voz —

El plan de All for One era despiadado, primero robaría la espada, para después ir a la casa más próxima, la casa de Inko, luego irían al reino amenazando de muerte a todos los habitantes de esa morada, los súbditos del rey, al ver que Escalibur estaba en las manos del mal se rendirían. 

La mujer conocía bastante bien a su secuestrador, pero quién sabe qué estuvo haciendo mientras estuvo desterrado. Se fueron al patio y pudieron ver un enorme agujero en él. Estaban haciendo un hechizo, AFO tiro a varios de sus aliados al hoyo, al salir pudieron ver de que se habían convertido en monstruos.

 Por muy extraño y absurdo que suene, el hombre que estaba sujetando a Izuku lo soltó y se fue a donde todos estaban siendo embrujados. Inko le dio una mirada al peliverde y este entendió. Se escondió en un muro cerca de su casa ¿para qué? Para saber a fondo que es lo que planeaba ese desquiciado. De repente un grifo apareció y aterrizo al lado de ese demente.

— Oh, mi fiel mascota ¿Pudiste robar a Escalibur? — pudo escuchar al de rostro deformado.

— Sí, lo hice — dijo la bestia.

— Bien, dámela. 

— Eh... Vera, mientras venía para acá un halcón de alas plateadas me ataco y...

— ¿Y? — pregunto tratando de ocultar su enfado.

— Se me cayó en el bosque prohibido.

— ¡Idiota!  — bramó — ¡Eres una bestia de gran tamaño! ¿¡Y dejaste que una pequeña paloma te venciera!?

El pecoso no lo pensó más, dejo de escuchar la conversación y se monto en su caballo para irse rápidamente de ese lugar, si entregaba la espada al rey, podría salvar el reino, podría salvar a su madre. A lo lejos escucho un grito de All for one, gritaba porque lo había visto, sus secuaces lo habían empezado a perseguir, miro por el rabillo del ojo para ver por última vez a su madre.

También pudo visualizar dos hombres-armas —de los que habían sido transformados— siguiéndolo. Agitó las correas de su caballo fuertemente, provocando que aumentara la velocidad, siguió derecho hasta que encontró un árbol caído, no le quedó otra que desviarse. Las armas que traían los dos sujetos volaban tratando de alcanzarle, mas esquivo todo. Una hacha casi le llega al caballo, este se asusto y boto a Izuku, este vio la entrada del bosque y sin dudar entro. Los dos hombres le siguieron por el bosque, no se dio cuenta de donde caminaba y termino cayendo por un pequeño barranco, que al final se encontraba una laguna. Escucho las pisadas alejarse de donde estaba.

— ¡Hey, tú! — dijo una voz — Ten cuidado con mis redes.

Un chico de la misma edad de Izuku se apareció, el peliverde quedo embobado al verle. Era más alto que él, tenía un cabello bicolor, el lado derecho era de un color blanco como la nieve y el izquierdo era rojo como la sangre, sus ojos eran dispares, el derecho era un gris profundo, mientras el izquierdo era turquesa, ese lado de su cara se encontraba una gran cicatriz de quemadura, traía con sigo un ave y un bastón.

Iba a hablarle, pero los dos perseguidores habían llegado, el chico se puso en guardia y corrió hacia donde estaba Izuku, con su bastón golpeo el entrepierna de un individuo y lo lanzo a una roca mágica que se lo comió. El otro estaba encima de una de sus trampas y con ayuda del pájaro la accionó, así el sujeto cayó a un pozo escondido.

— Guau — dijo asombrado el pecoso — Eso fue increíble, ¿cómo lo hiciste? Las trampas están colocadas a la perfección, además eres muyápido y tienes una habilidad asombrosa — el chico se dio cuenta de que estaba hablando mucho — Eres increíble — el otro joven ni siquiera lo veía — Ni siquiera me estas escuchando.

— Me costo seis meses en hacer estas redes— susurro.

— ¿Tu red? Me ha salvado la vida, gracias.

— Bueno... Se supone que tiene otra función... Atapar monstruos, no personas.

— ¿Eres un ex-bufón del rey All Might y te dejo aquí por no hacer reír a nadie?

— Oh, ahora yo te doy las gracias, me acabas de recordar de que soy un ermitaño — dijo secamente el chico, se dio la vuela y empezó a caminar.

— ¡Oye, espera! ¿Cuál es tu nombre? — preguntó curioso.

— Shouto Todoroki — respondió desinteresado.

— El mío es Izuku Midoriya — el pecoso se dio cuenta de algo en ese momento, se acerco al bicolor deteniendo su caminata — ¿por qué no me miras cuando te hablo? — entonces reaccionó — Oh... Perdón no me había dado cuenta que eras...

— ¿Qué? ¿Alto? ¿Tosco? ¿Frío? ¿Apuesto? — dijo Shouto.

— Ciego... — respondió Izuku, avergonzado por su atrevimiento.

— Ah... Esa es la cualidad que siempre olvido — dijo un tanto triste.

El joven de la cicatriz siguió caminando, parecía de alguna manera triste. El peliverde lo siguió, no sabía se él tenía alguna idea sobre la espada, por lo que decidió preguntar.

— ¿Sabes dónde está Escalibur?

— Sí, en Camelot, en un gran castillo lleno de banderas — dijo en un tono monótono.

El halcón se poso en su hombro y empezó a moverse, Shouto parecía que le entendía, el ave se revoloteaba sin cesar. Izuku aprovechó ese momento para poder observar bien al chico, tenía un aura un tanto intimidante, como método de defensa, sus ojos que parecían vacíos mirando a la nada tenían un brillo de profundidad y amabilidad. Por alguna razón se sentía nervioso y seguro a su lado.

— Así Escalibur esta aquí... Bien, vamos a buscarla — dijo por fin.

— Oh, que bien ¡vamos!— dijo Izuku saliendo de sus pensamientos.

— No, tú no vienes... Solo vamos Gin y yo — dijo refiriéndose al halcón y él.

— Te lo suplico... La persona que robo la espada tiene a mi madre como rehén, por favor — suplico.

De mala gana, Shouto acepto a que fueran los tres, así comenzó ese viaje en busca de Escalibur... ¿quién sabe? Tal vez se consiga algo más al final.

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Hola ¿cómo están? Bueno lo prometí y aquí esta el nuevo capítulo, espero que les guste. 

Quiero que me digan dos personajes de BNHA (Qué no sean los que ya aparecieron) que se "odien" o que sean un dúo cómico, por favor...

Recuerden de comentar, votar y disfrutar...

Nos vemos en otra historia...

Kurenai-kun...