One More Time - Amy & Laurie

Capítulo 11

Amy

Había transcurrido los últimos meses más rápido de lo que podía darme cuenta. Estaba verdaderamente feliz porque todo había marchado mejor. 

Las clases de pintura, la relación con la tía March, las relaciones con las personas en la sociedad, las cosas con Fred.

Fred...

Que podía decir de él. Nos habíamos hecho muy cercanos verdaderamente. Siempre tan atento, comprensivo y amable. Me había presentado a muchas otras personas en su entorno y eso me había ayudado mucho a adaptarme a mi nueva vida. De verdad estaba muy agradecida y sobre todo, muy feliz de tener a alguien como Fred a mi lado. 

Pero... claro, no había sido suficiente para sacar a Laurie de mi corazón. ¿Me odiaba por ello? Todo el tiempo. Pero estaba aprendiendo a querer a Fred. Y esa sensación de ser correspondida me hacía feliz... lo suficiente para dejar a Laurie a un  lado en mi corazón.

Hace unas semanas había enviado mi ultima carta. Nunca respondieron y eso me puso un poco nerviosa. Quizá la carta se hubiese perdido entre los preparativos de la boda de Jo. 

Claro, mentiría si dijese que no era plenamente consciente de que en unos meses la boda de Laurie y Jo tendría que estar celebrándose. ¿Qué más me daba a mi? 

Aunque admito que se me hacía demasiado extraño que nadie hubiese mencionado la boda. Durante todas las cartas, la familia no me había mencionado ni una sola vez acerca de los preparativos o lo que fuese. Eso me incomodaba porque quería saberlo, pero otra parte de mi, estaba agradecida por no tener que sufrir de leer aquello. 

Siempre era lo mismo, la familia contándome algunas cosas y enviándome sus saludos. 

Eso me lleva a otra cosa: Los saludos de Laurie.

¿En qué diablos estaba pensando Laurie al enviarme cartas por aparte?

Al recibir la primera de ellas, mi corazón casi se me sale por la boca de la impresión. Por supuesto que una parte de mi se alegro por el detalle. Pero al leer la carta, me di cuenta de que Laurie solo quería desahogarse con alguien. ¿No le bastaba Jo?

Me moleste por ello, ¿acaso yo era su segundo plato? ¿La persona con la que se consolaría siempre?

Me prometí que no contestaría y sería fiel a mi palabra de dejarlo en el pasado y considerarlo lo que era realmente. Mi cuñado.

Y por eso mismo, era inapropiado mandarte cartas privadas con el futuro esposo de tu hermana. Evadí todas sus cartas... al menos de contestarlas, porque sí... como la Amy que aun esta enamorada de Laurie, las leí, todas ellas.

Me sentía defraudada de mi misma, pero de cierta manera recibir cartas de Laurie me hacía sentir... reconfortada. Soy una tonta ¿no?

Las ultimas que había recibido habían sido diferentes. Como si Laurie estuviese triste y a la vez ¿enfadado? 

Pero eso era imposible. Porque Laurie, quien estaba apunto de casarse con el amor de "su vida" tendría que sentirse de esa forma. No tenía ningún sentido.

De todas maneras, me había obligado a ignorar aquellas sensaciones y concentrarme en lo que me importaba. Yo.

Y Fred, claro.

-Amy...- la voz de la tía Marcha a mi lado me trajo de vuelta a la realidad. 

Ambas nos encontrábamos en el carruaje de regreso a casa tras algunos concursos de pintura en los que había participado.