11: ☊

108 10 0
                                    

ᴄʜᴀᴇᴡᴏɴ ᴘᴏᴠ

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

ᴄʜᴀᴇᴡᴏɴ ᴘᴏᴠ

╭⊱♥━━━━ஜீ ⌏- ✧ -⌌ ஜீ━━━━♥⊱╮

Los días cada vez son peores, intentar levantarme en las mañana es un martirio. La mínima luz que entra por mi ventana me quema la cabeza, los gritos de mi papá a sus empleados me martillan el tímpano.
Saber que debo levantarme para no recibir ningún "buen día" me es terrible, a mi no me criaron de esta forma.

Así no me crió mi madre.

Para ella lo principal era el respeto, la bondad, la solidaridad. Me lo repetía en sus sermones mañaneros, debí haberlos aprovechado cuando aún podía...
El hombre éste es una sabandija. Básicamente obliga a las personas que trabajan aquí a no mirarme, porque para él, somos superiores. A mi no me importa nada de lo que él diga, a pesar de ello siempre saludo a todas las personas que tengo delante con la cabeza. Nunca recibo respuesta.

Y es por esas razones que los inicios de mis días son detestables. Me quitan las ganas de comer, las ganas de existir, las ganas de comer, las ganas de moverme, de ir al instituto y por fin terminar mi —puta— carrera.

Las ganas de todo.

Quiero alejarme de todo pero a la vez necesito que alguien me ayude sin preguntar tanto. Que solamente deduzca lo que necesito y lo deje allí, porque no soy buena expresando mis inquietudes, debido a que cuando lo he hecho las personas se alejan porque no las entienden, ya que no hay una razón clara.
Soy un revoltijo de emociones negativas sin motivo para continuar con la vida. Ya perdí el interés en todo, ni siquiera sé porque sigo estudiando, si la carrera que completaré nunca ha sido algo de mi agrado. No puedo disfrutar de lo que tengo a mi alrededor porque vivo con el miedo constante a ser traicionada, a ser atacada, a confiar...

Prefiero alejarme de todo. Así me siento a gusto aunque esa sensación no dura mucho y me termino sintiendo peor.

Ya ni siquiera sé que quiero. Estoy tan confundida.

Los bocinazos de la madre de Heejin me devolvieron la concentración, ahí llevaba veinte minutos intentando comer algo y nada. Tomé una botella de agua, me cepillé y salí rápidamente.

De todas formas y por más esfuerzo que hiciera, fue imposible mantenerme con una sonrisa en la cara.
Prefiero parecer indiferente, así las personas no se reirán de mi de nuevo.

Heejin besa mi frente dulcemente, como todos los días y me hace su cuestionario.

Ya lo aprendí de memoria para responderlo sin levantar sospechas.

Secret - HyewonWhere stories live. Discover now