Mi Hogar «JIKOOK»

➳❅Part 14❅

Después de la ducha caliente, Jimin salió de su habitación y caminó hacia el sofá, sonriendo con ternura al ver a Jungkook acurrucado abrazando a Pequeñín. Al llegar al lado, se agachó y alzó su mano para acariciar el cabello del ojiverde.

─¿Te sigues sintiendo como una mierda, bonito?ㅡ preguntó Jimin con una sonrisa y Jungkook rió.

─Sí, pero menos.─contestó y Jimin rió.─ Whee-In me hizo un té mágico y me siento mucho mejor. Ella es buena, deberías quedártela para siempre.─

─No creo que a su esposo y a su hijo les guste esa idea.─respondió Jimin riendo y Jungkook sonrió.

─¿Dónde está ella ahora?─

─Creo que en la cocina calentando el estofado.─ respondió y Jimin asintió, dejando un beso en su frente y caminando hacia la cocina.

─¿Dónde compraste este estofado?─ preguntó Whee-In al verlo entrar a la cocina y señalando al envase que contenía el estofado.

─Huele jodidamente bien.─

─Lo hice yo.─ respondió Jimin y sonrió orgulloso.

─Vaya, impresionante.─ contestó Whee-In, asintiendo su aprobación.─Ahora, cuéntame.

ㅡ¿Qué te cuento?ㅡ preguntó Jimin mientras se servía un vaso de agua para tomar.

ㅡ¿Cuánto tiempo llevan saliendo tu y Jungkook?ㅡ preguntó Whee-In directamente y Jimin se atragantó con el agua que estaba bebiendo.

ㅡ¿Qué? Nosotros no... Es decir...ㅡ balbuceó Jimin y se sonrojó totalmente. ㅡNo estamos saliendo...

ㅡ¡Oh! Lo lamento, es solo que lo creí por como actúan, ya sabes... lo siento.ㅡ dijo Whee-In sonrojada y con los ojos muy abiertos, avergonzada por haber asumido.

ㅡEs decir...ㅡ empezó a decir Jimin en voz baja y volteó a ver a la puerta para asegurarse de que estuviera cerrada.ㅡSí me atrae pero es muy joven para mi y no sé...ㅡ

ㅡ¿Cuántos años tiene?ㅡ
preguntó Whee-In escéptica y suspiró aliviada al escuchar a Jimin murmurar que el chico tenía veinte años.
ㅡAy Jimin, no es para tanto, ni que estuvieras tan viejo. Él tampoco es un niño y lo mejor de todo es que ¡es legal!ㅡ

ㅡLo sé pero no sé si le atraigo también yㅡ

ㅡEs una broma, ¿cierto?ㅡ interrumpió Whee-In a Jimin y el ojinegro solo la miró confundido.
ㅡ¿No has notado como el chico te mira? ¡Por dios, Jimin! ¡El chico te mira como si tú mismo hubieras colgado la luna y las estrellas solo para él!ㅡ

ㅡNo lo sé, Whee-In.ㅡrespondió Jimin tratando de no creerle a su agente; tenía miedo de creerlee ilusionarse.ㅡY baja la voz, no quiero que nos escuche.

ㅡLo que sigo sin entender es porqué no quisiste que supiera que soy tu agente.ㅡ dijo Whee-In bajando la voz.

ㅡEs complicado.ㅡ dijo Jimin y pasó sus manos por su cara.ㅡCon él soy solo Jimin y eso me gusta.ㅡ Whee-In lo miró confundida así que el ojinegro siguió.

ㅡPara la gente soy Park Jimin el escritor, pero con él soy... Jimin. Me gusta ser solo Jimin de vez en cuando. Amo mi trabajo, no me malinterpretes, pero me gusta cuando le agrado a alguien por como soy y no por mi trabajo.ㅡWhee-In lo miró y sonrió pequeño. Ahora entendía porqué Jimin pasaba tan solo; huía de las personas que los buscaban por conveniencia.

ㅡBueno, ¿te puedo dar mi opinión?ㅡ preguntó la chica y Jimin asintió.
ㅡEstoy segura de que ya le agradaste a ese chico y no necesitaste ser más que Jimin para hacerlo.ㅡ Jimin la miró unos instantes y luego suspiró. No tenía idea de qué hacer.

~Muchas horas más tarde.

Cuando ya Whee-In se había ido y la luna se asomaba por la ventana, Jimin se encontraba en la cocina recalentando té que había dejado hecho su agente para Jungkook y podía escuchar al menor jugando y riendo con Pequeñín.

Amaba ese sonido. Amaba que en su apartamento hubiera más sonido que el eco del silencio al que tanto se había acostumbrado. Podría admitir que hasta se sentía como un... hogar. Un hogar y no solo un edificio.

ㅡSi sigues riendo así, vas a despertar de nuevo tu tos.ㅡ dijo Jimin acercándose al sofá y ofreciéndole el té al ojiverde. A pesar de haberlo dicho, deseaba que Jungkook siguiera riendo y llenando su apartamento de aquel dulce sonido.

ㅡGracias.ㅡ dijo Jungkook sonriendo al aceptar el té y tomó un sorbo. Cerró sus ojos ante el calor y el picor de jengibre que bajaba por su garganta.

ㅡ¿Te puedo hacer una pregunta?ㅡ preguntó Jimin después de un silencio en el que solo se dedicó a observar a Jungkook tomar té. El alzó su mirada y asintió.

ㅡ¿Qué sucedió?ㅡ Jungkook lo miró directo a los ojos tras la pregunta y no necesitó que Jimin dijera más para comprender a qué se refería.

ㅡMe echaron de mi casa.ㅡrespondió Jungkook. Realmente no le gustaba hablar del tema, pero Jimin literalmente le había salvado la vida y merecía saberlo. Se concentró en clavar los ojos en su taza de té y siguió hablando.

ㅡSalí del closet cuando tenía 18 años y me corrieron de casa al instante de hacerlo. No tuve oportunidad de decir nada, en cuestión de segundos me habían lanzado a la calle y lo único que tenía conmigo era mi celular, mi billetera y la ropa que tenía puesta. Vendí mi teléfono y con ese dinero más el poco que tenía conmigo, vine hacia acá y me compré mi guitarra. Y eso que viste frente al refugio es lo que he hecho por dos años.ㅡJimin se quedó en silencio observándolo.

Sentía ganas de llorar de la suerte tan desgraciada que había tenido el pobre chico. Y realmente lo admiraba; Jimin estaba seguro de que el no duraría ni una noche en la calle. De cierta manera le recordaba a su situación, pero a diferencia de Jungkook, a él no lo habían echado y había tenido mucho tiempo para trabajar y ahorrar antes de irse de su casa.

ㅡEres tan fuerte, Jungkook.ㅡ Jimin susurró y Jungkook alzó la mirada, sorprendiendose al ver los ojosde Jimin brillar con lágrimas contenidas.
ㅡNo mereces ese tipo de mierda. No merecemos ese tipo de mierda.

ㅡ¿A qué te refieres?ㅡpreguntó Jungkook confundido ante las últimas palabras del mayor.

ㅡEl día que salí del closet mi familia dejó de dirigirme la palabra.ㅡ dijo Jimin y Jungkook abrió grande sus ojos. ㅡAsí que un día decidí empacar mis cosas, viajé hacia acá y empecé mi vida de cero.

ㅡ¿A qué te dedicas?ㅡpreguntó Jungkook sin poder evitarlo.

Lo lujoso que era el apartamento en el que estaba no había pasado por alto para el ojiverde y no comprendía como Jimin lo podía mantener si no había tenido el respaldo de nadie al llegar a la ciudad.

ㅡOh, yo... escribo.ㅡ respondió vagamente Jimin y empezó a jugar con sus dedos.

ㅡ¿Escribes...?ㅡdijo Jungkook con una ceja alzada.ㅡSí, tengo una que otra historia.ㅡ respondió Jimin rápidamente y volvió a hablar antes de que Jungkook preguntara algo más.ㅡOye ya se te acabó el té, te traeré más.

ㅡNo Jimin, así estoy bien.

ㅡNo es nada, bonito, Whee-In dejó bastante.

ㅡJimin de verdadㅡDe los nervios, Jimin tomó la taza de las manos del Jungkook y por intentar quitársela a la vez que Jungkook trataba de no dejarlo, terminó volcando el poco de té que quedaba en la taza y cayó en el pecho del ojiverde.

ㅡ¡Mierda!ㅡexclamó Jimin y al instante se preocupó, acercándose aun más al ojiverde y tocando su camisa llena de té.

ㅡ¿Te quemaste mucho? Mierda Kook, lo sientoㅡ Jimin alzó la mirada y no pudo terminar de decir la frase porque tenía su cara a dos centímetros de la de Jungkook.

Y sin poder evitarlo, Jimin cortó la distancia y unió sus labios a los de Jungkook.

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