Ocasión ideal

111 58 8
                                    

12━━━━━CAPÍTULO DOCE. OCASIÓN IDEAL.

Habían pasado varios días desde la muerte de Alexa. Diego se había pasado las horas llorando, mientras que yo intentaba progresar con la magia, e ideaba un plan para combatir a Sandra. El director nos dijo que no era culpa nuestra, e intentó hacerse el duro, cuando, en realidad estaba triste y se notaba. ¿Pero cómo no iba a estar triste? Nuestra profesora era una persona maravillosa. El mismo día en el que murió, se la llevaron a las cápsulas. Las cápsulas es un sitio dónde llevan a los habitantes de Smasville cuando se quedan sin vida y así la gente los puede visitar cuándo quiera, ya que tienen un tratamiento especial para no descomponerse. Igualmente ni Diego ni yo habíamos ido a ver a Alexa, no queríamos verla así.

Por otro lado, había investigado sobre El Benco. Descubrí que antiguamente fueron parte del pueblo, pero quisieron independizarse. El motivo no lo sé aún, pero no tardaré mucho en descubrirlo, estoy segura. También descubrí que el día que les pegué una paliza a los "soldados" de Sandra, había usado el truco de La Potencia, que es un tipo de magia que te ayuda a poder defenderte con más fuerza. Increíble, ¿no? La verdad es que todo esto al final me gustaba. 

—Emma—Diego entró a mi habitación.

—Dime—le contesté yo.

—He escuchado al Jefe de Magia hablar con Marta—empezó a contar—decían que El Benco no había salido de la isla desde el incidente sucedido, que te tienen miedo—.

—¿A mí?—pregunté.

—Sí.—respondió él—Por lo de los soldados—.

—Entonces...¡es la ocasión perfecta!—exclamé, quizás un poco alto.

—¿Perfecta para qué?—.

—¡Pues para ir a por Sandra!—.

—¿Estás loca?—me dijo—¿Cómo vamos a llegar a la isla?—.

—Algo nos inventaremos, pero no podemos desaprovechar esta oportunidad—.

—Seguro que el Jefe no quiere—.

—No, porque a él no se lo vamos a contar...ni a él, ni a nadie—.

—No sé, Emma—.

—Confía en mí, por favor—asintió—¡Bien! Haz las maletas, nos vamos esta noche—.

Unos minutos después  nos marchamos con nuestras mochilas, un mapa y provisiones. Nadie nos vio. Andamos y andamos hasta llegar a la costa y dormimos en una casa de madera que había allí. Al día siguiente ya veríamos la manera de cruzar hasta la isla.                                                    

SmasvilleWhere stories live. Discover now