ATRAPADA A ÉL

Parte 15

NARRADOR LEVANA

Después de la reunión con la profesora Antigona fui a mi sala  común ahí estaba Paola Georg su compañero y una chica quera brigadier también y como estaba el odioso Ryan decidí escribir una carta a mis padres y a Lorena mi amiga de la infancia, había tardado en escribir porque me había olvidado una tarea cuando estaba ya por la mitad de la carta llego Ryan.

Todos los brigadieres se fueron al ver que el llegó Ryan, sin embargo a mi no importaba su presencia  solo quiero terminar de escribir, sin embargo ahí estaba el molestándome  para que me vaya yo no seria como los demás yo no le tengo miedo.

Y al parecer  eso no le gusto o lo que le dije, había mojado mi carta con agua y luego me acorralado, quería golpearlo, pero él era mucho más fuerte que yo y aparte su altura me tenia intimidada parecía que pronto me golpearía.

Esperando un golpe de su parte que nunca llego y solo  me amenazo diciendo - la próxima vez que lo enfrentará no se arrepentiría en sacarme del colegio- por lo que su comentario me molesto mucho porque no podía decirle lo que era verdad a caso por su dinero me condicionaba o su poder de sacarme del colegio.

...

Ha pasado una semana después de ese incidente tanto él como yo, no habíamos vuelto hablar y trataba de  no estar en la sala común,  sin embargo la semana próxima como brigadieres generales teníamos que hacer las rondas para cuidar los pasillos en donde los alumnos que no cumplían con las reglas del colegio teníamos que multarlos e informar a la coordinadora, durante las rondas fue algo incomodo en silencio total, no me gustaba su presencia y también creo que le pasa lo mismo.

El día que  tenia clases de trigonométrica  iba algo tarde me había quedado dormida y  con libros en las manos no me había dado cuenta que he empujado alguien en mi camino, por lo que solté mis libros 

-¡oh disculpa! –atine a decir mientras recogida mis libros

- Por favor haz de serte ver de la vista- continuo diciendo -de que te sirve tener esa cabeza, si no puedes mirar bien- cuando levante ahí estaba el arrogante Ryan limpiándose la pelusa inexistente 

Me pare de inmediato y seguí con mi rumbo pero un fuerte jalón me detuvo

-ahora que quieres ya te pedí disculpas- aún con su fuerte mano sobre mi brazo no me soltaba

-te dije que no me gusta que no me hagan caso- había perdido la cabeza o que le pasaba tratando de soltarme y observando el reloj de pulsera de mi otra mano iba algo tarde la profesora ya debería estar entrando y el no me soltaba.

-oye suéltame necesito llegar a mis clases, si tú las pierdes no es mi problema-dije y logrando zafarme de él 

Dí unos cuantos pasos para ser acorralada por él y la pared, este año se había vuelto más molesto y solo quería llegar a mi clases o sino perdería mi practica 

No sabiendo que hacer lo empuje forrajeamos y el creía que con su mirada me intimidada y optando por lo peor lo bese al principio se quedo frió y empujándolo me libere de él.

Y a los segundo de nuevo fui atrapada por él y ahora el estaba besándome, esto no era lo que imaginaba le propina golpes en el pecho pero él aun estaba besándome, era mi primer beso y nunca me imagine que seria con Ryan y menos en esa situación  y soltando lagrimas ya casi sin aliento por fin me soltó y corriendo me fui a las clases,  llegue  justo a tiempo de la repartición ganándome una llamada de atención delante de mis compañeros.

Después del beso no paso mas incidentes  me encontraba en la sala común del grupo Red, no quería volver  verlo.

-ya es tarde creo que deberías volver, a menos que quieras quedarte con nosotras-la verdad prefería quedarme con ellas, sin embargo, si demostraba que le tenia miedo a Ryan el se aprovecharía de eso

-si creo que mejor me voy- levantándome del mueble agarre mis pertenencias y antes de irme Diego entraba a la sala común

-hola no pensé que estarías aquí ya no se te ve tan seguido-comento Diego con una gran sonrisa

Contagiándome de su sonrisa le conteste -si, por eso vine aquí, para pasar más tiempo con ustedes, pero ya me iba-

-quieres que te acompañe-me pregunto Diego y mis amigas rápidamente contestando por mi-claro acompáñala-

Volteando a ver mis amigas y ver su sonrisa picaresca acepte ir con el hasta mi sala común, durante el camino íbamos conversando hasta que llegamos a la puerta, mis nervios crecieron después de lo que había sucedido esperaba no tenerlo que verlo o que estuvieran los otros estudiantes.

la puerta se abrió cuando estaba a punto de entrar para solo revelar a Ryan

-oh veo que trajiste a tu amiguito- mirándonos de arriba abajo y con su típica mirada de desprecio nos miro a los dos

-si te esta molestando dime-contra atacó Diego y me agarro mi mano ese gesto pareció  ser desapercibido por Ryan que rápidamente contesto – si dile lo que te hecho-

Al recordar lo que paso en la mañana me  sonroje y tratando de poner bajo control mis emociones no deje que se burlara de mí  delante de Diego-todo ha ido igual, no hay nada importante que haya podido pasar-

-Estas segura- me pregunto Diego 

-¿Si estas seguro que nada paso?-pregunto el muy cínico de Ryan 

-No creo que sera mejor que te vayas Diego no quiero que te bajen puntos por no estar en tu edificio-dije mirándolo a los ojos a Diego 

-bueno si algo te incomoda me avisas-abrazándome Diego se despidió y entrando a la sala podía ver que Ryan se sentó en el mueble, sin prestarle mucha atención seguí a paso firme hasta llegar a mi cuarto

-Dime porque no le dijiste a tu amiguito lo que paso a caso te gusto lo de esta mañana-quedándome parada voltee para enfrentarlo

-nada de lo que venga de ti me va gustar y sabes no le dije nada, porque es lo mas asqueroso que me ha pasado- dando la vuelta y con mí ego más elevado por primera vez me sentía tan bien y abriendo el pomo de mi puerta.

-es mejor que te arrepientas por lo que has dicho- me asuste por la cercanía de Ryan 

Un fuerte golpe de su mano en mi puerta hizo que cerrara de inmediato, el sonido absorto hizo que volteara para verlo no había nadie a nuestro alrededor y  al tenerlo tan cerca podía notar que sus pupilas estaban tan oscura y creo que estaba mas que enojado.

-tus amenazas me tienen sin cuidado-respondí y él se acerco mas a mí, su gran altura no me intimaría o si

-que acabas de decir pobretona- se inclino mirando mis ojos

-lo que has oído y ya déjame ir, necesito descansar- ataque

- bien, como has dicho que mis amenazas, te tienen sin cuidado ya veremos lo que puedo hacer- su sonrisa maliciosa me indicaba que tenia que haberme retractado, pero mi orgullo fue mas allá

El abrió la puerta y me empujo con mucha fuerza hacia mi habitación haciéndome caer y antes de irse cerro tan fuerte la puerta que hizo  caer mi cuadro de mi familia de la pared

-como te odio Ryan- dije en voz alta, sin embargo él ya no estaba.