Maratón 1/3
—Vi como estabas hablando con él, muy pegados e incluso te dio un beso — reprochó Christopher tratando de levantarse.
—Hablaba con él como un amigo, no estaba tan pegada y si fuese así ¿que contigo? Y el beso...FUE EN LA FRENTE — dije mientras lo empujaba hasta la esquina de la cama.
Lo empujaba para poder abrir las frasadas y meterlo dentro de ellas.
Por qué comentaba ese tema ¿Acaso estaba celoso? Na, no lo creía.
Pero entonces....si no eran celos..¿qué era?
—¿Estas celoso? — le pregunté mientras lo llevaba donde las frasadas ya abiertas, lo senté sobre la cama.
—NO — dijo casi gritando, estaba sentado en la cama y al decir eso se levantó de golpe y yo caí al suelo —¿Estas bien? — preguntó preocupado viéndome en el suelo.
—Si, pero me duele el trasero — respondí levantándome.
—Lo lamento... — dijo arrepentido. Como si fuese que su madre está a punto de regañarlo.
Vaya, cuando estaba borracho mostraba actitudes que nunca había visto en él.
—Mejor duerme — me levanté y, como él estaba parado, aproveché para hacerlo un lado y abrir más la cobijas de su cama.
Me sentí incómoda en ese momento, lo tenía a mis espaldas mientras que yo estaba inclinada para abrir mas las cobijas de su cama.
Sentí algo rozar con mi trasero y me paré firme de inmediato.
Volteé y con el ceño fruncido pregunté:
—¿Qué fue eso?
—Mi pene — dijo sin ningún rastro de pudor. Noté cierta picardía en su voz.
—¿P-por que me has rozado? — pregunté nerviosa.
—No pude mantenerme parado y casi caigo encima de ti — explicó mientras se tambaleaba un poco.
Si estuviese al menos con pantalón lo dejaría pasar, pero como solo estaba en boxer me puse nerviosa.
Dejé de pensar en eso y lo metí dentro de la cama.
—Estoy duro — sonrió como bobo.
¿Qué?
¿Duro?
¿Yo lo había puesto asi?
Ignoré eso.
—Gracias, buenas noches — dijo y estiró sus labios para ¿recibir un beso?
—¿Qué significa eso? —pregunté.
—Un beso, obvio — dijo y volvió a estirar los labios.
—No, mejor duerme. Eso es más rico — dije en defensa, quería evitar ponerme nerviosa pero con las cosas que decía inevitable no hacerlo, ojalá pudiera controlarlo.
—Un beso al menos en la frente — pidió.
—¿Cómo para que o que quieres un beso? — dije arqueando una ceja.
—Preguntas mucho, solo dámelo o... — se quedó pensando un momento — o te despido.
—¿Me estás chantajeando? — pregunté ofendida.
—Ahí van otra vez las preguntas... — dijo girando los ojos —Mejor ya no hagas nada — dijo y se adentró mas en la cama — vete — pidió como niño chiquito.
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Destruyeme Si Así Lo Deseas || PAUSADA TEMPORALMENTE
RomanceEl amor puede hacerte felíz, al igual que débil, puede reparar tu corazón, así como destruirlo en mil pedazos y con una intensidad más fuerte. Christopher Vélez era de las personas, las cuales aborrecian el amor, creía que te hacia débil y que no er...