Dulce No Venganza|| Khufra x Esmeralda

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Lo que hiciste... No tiene perdón...

Sin embargo, aún te sigo amando.

Por siempre.

Y para siempre.

- Khufra.

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Al terminar de leer la nota, una lágrima cayó de su mejilla.
Esmeralda una vez más sentía lástima por Khufra y la muchacha de sus sueños.

Un amor perdido hace décadas atrás. Pero sin embargo, no extinto. La momia dolida aún podía sentir afecto por las personas, aunque no tan fuerte como antes, pero seguía hay.

Y Esmeralda, como no era fan de la guerra, en su interior decidió ponerle fin a la pelea eterna, ¿Cómo? demostrándole a Khufra que no era necesario pelear por el pasado. Y que podía formar un futuro nuevo y próspero.

Así que tomó la decisión de ir a por él, más allá del desierto en el que se encontraba.

...

Al final logró hallarlo. En unas ruinas que antes fueron un templo de alabanza.
Estaba solo, recostado encima de unos pilares derrumbados, dormido con sus vendajes envolviendo parte de su cuerpo, seguramente para cubrirse. 

Ella se acercó lentamente hasta él, y paro cuando ya estaba a centímetros de rozar su cuerpo. Sus ojos curiosos examinaron el cuerpo de la momia detenidamente. Jamas había visto a un ser en un estado tan deplorable como ese.

Le daba lastima, rabia e incluso le odiaba por todo lo que hizo en el pasado. Pero aun así trataba de hacerse la idea de que podía salvarlo y darle una vida mejor a ese tirano. O al menos eso creía que podía hacer...

— Vas a mirarme por el resto de la tarde o acabaremos esto de una vez?... — Khufra abrió sus ojos y se incorporó lentamente hasta quedar sentado en los pilares.

Esmeralda retrocedió unos pasos a la defensiva alistando su magia en caso de tener que usarla. Cosa que no quiera mucho ahora.

— Khufra... No tenemos que ser enemigos solo por que el pasado te pide serlo, aún puedes cambiar de opinión si lo deseas. No todo está perdido-

—¡Silencio!.

Khufra estiró una de sus gigantescas manos hacía el cuello de Esmeralda y alargando parte de su brazo inexistente, la estrelló contra un pilar que aún quedaba firmemente parado en el templo.
Las vendas del cuerpo de Khufra se alargaron hasta alcanzar los brazos y piernas de Esmeralda y se enrollaron en estos con tal fuerza, que dejaron inmóvil a la pobre Maga, sin muchas opciones.

—¡Agh!... S... ¡Sueltame!.

— No se que tipos de locuras traes en tu cabeza, pero es mejor que te olvides de ellas... ¡Por que de nada te servirán!.

Esmeralda sintió como sin previó aviso, era arrojada por los aires hasta dar con las Arenas calientes de fuera. Por suerte el impacto no fue tan duro gracias a toda esa arena suave y acolchada que amortiguo su caída, sin embargo esto no se lo perdonaría tan fácil a la momia.

Y le iba a demostrar que tan dura podría llegar a ser...

— ¡Khufra!— Esmeralda activo su poder interior y se elevó por los aires.

Un aura estrellada la rodeó a medida que acumulaba poder en su palma, y luego cuando fijo a su objetivo por completó dejó caer todo su poder en el junto con ella misma, causando un estruendo que resonó en todo el templo.

Khufra voló hacían los pilares gracias al impactó, y terminó enterrado entre ellos hasta desaparecer del campo de visión.

En ese momento Esmeralda temió haberlo lastimado demasiado, pero al ver que algunos trozos de pilares rotos salían volando, supo inmediatamente que seguía vivo... Y Furioso.

— ¡Escúchame aunque sea una vez! ¡Khufra!— gritó Esmeralda mientras esquivaba uno de los pilares que Khufra lanzo.

— ¡TU Nunca Escuchaste MIS Deseos Antes De ENCERRAME, Eslora!— grito él y se detuvo al percatarse del nombre erróneo que había dicho en ese momento.

Esmeralda se llevó una mano a su boca sorprendida y se quedó inmóvil ante esa confesión. Khufra negó rotundamente y agarro su cabeza con sus dos manos, tratando de calmarse.

— ¿Ese era su nombre...?, el de la chica que rescataste...

— No voy a... Decir nada— el apenas pudo articular esas palabras.

— Khufra... Por favor. Habla conmigo... No quiero pelear.

—No... No puedo— la Momia se acercó al pilar en pie y se dejó caer hasta quedar apoyado en este.

Esmeralda le siguió y se dejó caer en el otro extremo del Pilar para acompañarlo. Ambos se quedaron en silencio por unos momentos, meditando... Hasta que...

— Ya no se que hacer...

—¿Que?...

Esmeralda pudo oir un suspiro pesado del otro lado.

— Han pasado tantas cosas... Y aún me siento muy atormentado, incluso conmigo mismo.

¿Y por que no dejarlo ir...? ¿Por que te sigues atormentado por un pasado tan terrible?.

—Por que...—hizó una pausa antes de continuar— Cometí muchos errores en el pasado que no creo poder perdonarme.

— Khufra...

Esmeralda se levantó de su sitio y camino un par de pasos hasta llegar al frente de Khufra.

—Nuestro pasado no nos define, son nuestras acciones las que lo hacen. Aún hay esperanza—dijo en un tono serio.

La momia la observó con una expresión calmada y se levantó lentamente hasta quedar los dos frente a frente. Sus alientos se rozaban por centímetros y cada vez los labios de la momia se acercaban más a los de ella.

Esmeralda no se apartó en ningún momento, dejó que todo aquello pasará.

Dejó que los labios fríos de ese ser impactarán con los de ella. Dejó que sus gigantescas manos acariciaran sus mejillas y tomaran sus caderas. Dejó que sus labios recorrieran su clavícula y torso.

Dejó que se volvieran uno, esa tarde.

Continuará.....

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No se preocupen que estas mini historias siguen para rato :v

A continuación:

Martis x Leomord segunda parte. (Pedido por una personita :³)

Luego...

Terizla x Lolita.

Nos vemos :p

[Mobile Legends: One-Shots]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora