Closet (2Shot) - NamKookMin

2da Parte

Para la cumpleañera más bella.-

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La biblioteca permanecía silenciosa, como debía ser. Park Jimin pasaba de forma inconsciente y repetitiva una mano por su cabello, esforzándose en entender lo que los libros frente a sus ojos decían, pero no lo conseguía. Su mente estaba en otro sitio, sin permitirle captar ni una sola palabra. Suspiró resignado, saliendo del lugar para tomar un poco de aire y calmarse. Rosé había sido demasiado específica en lo que dijo, como para estarle mintiendo, además, ella era su amiga y también de Jungkook, por lo que no existía ningún motivo para querer perjudicarle o meterle cizaña en contra de su "mejor amigo".

¿Acaso te peleaste con tu novio? ¿Terminaron?

Jimin se espantó ante la idea de alejarse de uno de sus atractivos amores, o su novio oficial para quienes le conocían de cerca. Él se precipitó a negar, confundido con las preguntas de la chica.

No quisiera ser indiscreta, pero me pareció verlo ayer en el centro comercial y... estaba muy cariñoso con Kookie... Pero, a lo mejor yo lo estoy malinterpretando... ellos son buenos amigos, después de todo...

El rubio casi había extorsionado a la chica para que le detallara todo lo que había visto, porque él no recordaba que ninguno hubiera mencionado algo respecto a una salida, y su relación se basaba precisamente en la confianza y pasar tiempo los tres. Algo andaba mal y eso no le estaba comiendo la cabeza.

- Jiminnie – una mano rodeó su cintura y un beso llegó a su cuello desde atrás. El chico se sobresaltó, debido a lo concentrado que se encontraba, intentando darle una explicación lógica a todo - ¿Nos vamos, o aún te queda por estudiar?

- Sabes que me estoy quedando atrás – le recordó, sintiendo que su garganta se secaba por el doble sentido de sus palabras – Si no refuerzo mis materias, terminaré trabajando de mesero para sobrevivir.

- Te he dicho que puedo ayudarte, cariño – le acarició fugazmente el mentón, haciéndole aletear un par de mariposas en el estómago. No, ellos no podían estar dejándolo de lado, cuando lo trataban como una delicada pieza de cristal.

- No quisiera tenerte hasta tarde pegado a un montón de libros, cuando tú no lo necesitas – negó con la cabeza. Su sentido de la responsabilidad le podía más.

- Hey, somos una pareja ahora – acunó su rostro – Bueno, una pareja de tres – rio, dejando ver sus dientes delanteros, mientras sus ojos se arrugaban de la dicha – Si algo te afecta a ti, nos afecta a todos.

Por un segundo, su mente procesó las palabras, deseando soltar su mayor inquietud, aquella que no le dejaba concentrarse en los libros que leía con anterioridad, sin embargo, no lo hizo. Tenía que confiar.

Entonces, un mensaje hizo sonar el celular del más alto, quien sacó el aparato, leyendo rápidamente y perdiéndolo en su bolsillo en un movimiento veloz.

- ¿Pasa algo? – quiso saber Jimin. Jungkook mantuvo su sonrisa y negó – Voy a volver a mi estudio – comentó, indicando con su pulgar su espalda y la puerta de la biblioteca – Sólo salí a tomar un poco de aire.