la esperada hora de salida llegó y muchos comenzaron a guardar rápido sus cosas para irse a sus casas.
jeongin mientras tanto sentía que había una nube en su cabeza, los nervios de ver al otro lo estaban comiendo. saludo a los demás y salio disparado hacia el salón del otro, se encontraba en el piso de arriba a la izquierda, seguramente lo vería llegar por la ventana de al lado. rápidamente fue al salón y lo encontró sentado guardando sus cosas, tranquilo.
- hola...- entró con una pequeña sonrisa que apenas fue correspondida con una mueca un poco incómoda de parte del otro.
- ¿como estas?
- se directo, por favor.- recibió una respuesta seca de parte del otro. se obligó a sí mismo a borrar la sonrisa y suspiró mientras cerraba sus ojos.
- lo siento.
-¿eso es todo?- hyunjin levantó una ceja mientras miraba a otros lados y movía sus manos, esperando por algo más.
- no...escucha...me gustas. y mucho.- entonces hwang dejó de respirar. abrió sus ojos y observa al chico que ni siquiera le dirigía la mirada.
- ss-estas bromeando...siempre bromeamos así.- intentó reír sin mirar al menor, pero este volvió a hablar luego de otro suspiro.
- no lo estoy...yo se que es muy tarde y pensaras que estoy jugando, pero no es así...siento muchas cosas al estar a tu lado, a veces solo quiero...estar ahí, que acaricies mi cabello y agarres mi mano. me siento bien así, todo lo malo de repente se detiene y es porque estas tú ahí. no quiero pedirte que seas algo que no...pero, no te alejes de mi...- contuvo sus lágrimas. esperaba alguna reacción del otro, pero él ni siquiera lo miraba.
- hyun, solo...quiero volver a como eramos antes...- hyunjin no era capaz de aguantar sus lágrimas, siempre fallaba y eso jeongin lo sabía. ahora mismo hwang intentaba voltear havia otros lados para no soltarlas, pero era inútil, mientras mordía sus labios con fuerza algunas gotas salían de sus ojos.
- y yo te amo jeongin.- él mencionado no sabía que responder. solo lo miraba con miedo.
- y-y no se si pueda soportar a como eramos antes, no quiero volver a ocultarnos porque...tienes miedo siempre. no quiero obligarte a quererme.- yang se acercó al otro y colocó sus manos en su rostro.
- y lo siento por eso...no debí hacer todo eso, no me estoy obligando a quererte, de verdad lo hago...yo no quiero que me odies.- hyunjin negó rápidamente.
- no, claro que no te odiare, es imposible para mi hacerlo.- ambos tenían muchas ganas de cortar la distancia que los separaba, aunque sea con un abrazo.
- entonces...¿seremos amigos otra vez?- conectaron sus miradas sin mucho que decir. ninguno quería ser "amigos" de nuevo.
- si...claro, como te sientas cómodo.- se sonrieron y sin saber bien qué hacer con sus cuerpos y las ganas de acercarse solo chocaron sus palmas, y luego se despidieron.
una vez que jeongin salió de ahí pudo respirar mejor, tocó su cara que estaba caliente y roja.
- tal vez...novios hubiera sido mejor.- susurró para si mismo y comenzó a dirigirse a su casa.
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